Junqueras abandona la protesta independentista contra la cumbre entre abucheos y gritos de "traidor"
- Unas 6.500 personas, según Guardia Urbana, y unas 30.000, según los convocantes, se han concentrado contra la cumbre
- Antes de dejar la concentración, Junqueras ha señalado que "el conflicto no ha terminado"
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha acudido este jueves a la protesta organizada por ANC y Òmnium contra la cumbre hispano-francesa, donde ha sido abucheado por un grupo de manifestantes que le han llamado "botifler" (traidor). Antes de marcharse, el líder independentista ha reivindicado que el 'procés' "no ha terminado".
"Hemos venido para decirle a Sánchez que aquí no ha acabado nada", ha manifestado el líder de ERC a los medios de comunicación antes de empezar la concentración a los pies del Museo de Arte Nacional de Cataluña (MNAC), donde se celebra la cumbre hispano-francesa.
Este jueves Sánchez y Macron firman en Barcelona el Tratado de Amistad entre ambos países, un texto que no existía hasta ahora, mientras que el presidente catalán, Pere Aragonès, asistirá al inicio de la cumbre y realizará una declaración institucional a las 11.30 horas ya en el Palau de la Generalitat.
Contra la cumbre
Para escenificar que el 'procés' soberanista continúa vigente, así como para denunciar que no hay "normalidad" en Cataluña, el movimiento independentista se ha congregado en Barcelona a las puertas del Museo de Arte Nacional de Cataluña. Según la Guardia Urbana se han concentrado unas 6.500 personas, mientras que, según los convocantes, han sido 30.000.
Los manifestantes han empezado a llegar a los pies de Montjuïc alrededor de las 8.30 horas, portando en su mayoría banderas independentistas.
También a la manifestación ha asistido la plana mayor de ERC, encabezada por su presidente, los dirigentes de JxCat Laura Borràs, Jordi Turull y Josep Rius, entre otros, así como el diputado de la CUP en el Parlament Carles Riera, además de numerosos diputados de las tres formaciones independentistas.
En los carteles que han exhibido los manifestantes se pueden leer mensajes como "nada se acaba hoy", "Govern de Cataluña, dónde estás" y "no pararéis la autodeterminación de los países catalanes".
Abucheos a Junqueras
Ondeando banderas independentistas, los manifestantes han coreado consignas contra los Gobiernos francés y español -"Ni Francia, ni España, països catalans"-, y, en el momento en el que Junqueras ha realizado declaraciones a la prensa, algunos asistentes han silbado, le han gritado "botifler" -"traidor"- y han proferido cánticos a favor del expresidente Carles Puigdemont.
Entre los gritos de algunos manifestantes incluso se ha podido escuchar un "Junqueras, traidor, te queremos en la prisión". El presidente de ERC salió de la cárcel indultado por el Gobierno central tras estar más de tres años condenado por los hechos del 1-O.
Poco después Junqueras abandonaba la concentración. Fuentes de ERC han explicado a EFE que el dirigente político ha abandonado la manifestación "cuando tenía previsto", ya que a las 10.00 horas tenía un "compromiso".
Junqueras: "El independentismo sigue bien vivo"
Antes de marcharse, el líder de ERC ha insistido en que "el independentismo sigue bien vivo. El conflicto no ha terminado porque sigue habiendo represión contra los catalanes en forma de persecución económica y de juicios".
Y ha añadido que "este conflicto no terminará hasta que la sociedad catalana pueda ejercer su derecho a la autodeterminación votando. Ese es el camino que seguimos. En este camino seguimos trabajando y negociando en todos los ámbitos. Lo hacemos de gobierno a gobierno con el Gobierno español", ha aseverado.
Sobre la contradición de ERC ante la cumbre, con la presencia del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y las críticas del independentismo al respecto, Junqueras ha explicado que aprovecharán "todos los espacios y oportunidades para reivindicar los derechos" de Cataluña. "Lo haremos dentro y fuera de la cumbre", ha zanjado.
El líder de ERC también se ha referido a la amnistía que el independentismo reclama para todas las personas vinculadas al independentismo y que están inmersos en causas judiciales.
"Caminamos hacia la amnistía. Estamos más cerca. La derogación de la sedición es un paso muy importante. Y la reforma de la malversación, aunque no sea suficiente, también es un paso adelante", ha argumentado. En ese sentido, ha añadido que "queda camino por delante" y que lo seguirán recorriendo "al lado de la sociedad catalana y de la comunidad internacional".
La protesta de los CDR deriva en tensión
Por otra parte, también los CDR han protagonizado otra protesta contra la cumbre hispanofrancesa en la que se han reunido 2.500 personas, según la Guardia Urbana. La manifestación ha derivado en momentos de tensión cuando los Mossos d'Esquadra han impedido, con empujones y algunos golpes de porra, que los manifestantes avanzaran hacia la plaza Urquinaona.
La marcha ha recorrido la Gran Vía de Barcelona desde la plaza España, donde este jueves por la mañana unas 6.500 personas han protestado contra la cumbre, y se ha detenido ante el Consulado francés, en la ronda Universidad, fuertemente protegido por efectivos antidisturbios de los Mossos d'Esquadra.
Los manifestantes más radicales -que la Guardia Urbana ha cifrado en 2.500 en su inicio- han seguido después su marcha en dirección a la plaza Urquinaona, epicentro de los graves disturbios desatados en 2019 con motivo de las protestas contra la sentencia del 'procés', mientras gritaban "lo volveremos a hacer".
A la altura de la plaza Cataluña, los Mossos d'Esquadra han avisado por megafonía de que no se iba permitir a los manifestantes avanzar hacia Urquinaona. Los manifestantes, no obstante, han persistido en seguir avanzado hacia la plaza Urquinaona hasta toparse con una línea policial integrada por una veintena de agentes antidisturbios, lo que ha desembocado en algún enfrentamiento y momentos de tensión.
En una crispada situación que se ha prolongado durante poco más de diez minutos, los Mossos d'Esquadra han tratado de apartar a empujones a los manifestantes que pretendían sobrepasar la línea policial y han cargado con sus porras contra algunos activistas. Finalmente, la marcha ha proseguido en dirección a la plaza Sant Jaume de Barcelona avanzando por las calles del barrio Gótico, entre un importante despliegue policial.
Una vez en la plaza, adonde según la Guardia Urbana no han llegado más de 500 manifestantes, los concentrados -entre los que se encontraban los diputados de Junts Salvador Vergés y de la CUP Montse Vinyets y Dani Cornellà- han coreado lemas como "Govern dimisión" y "Ni Sánchez ni Macron, queremos a Puigdemont" y han colgado una pancarta para reivindicar el "mandato del 1-O".