León en Argelia y Barcelona en Grecia: el calor desplazó las ciudades españolas 335 kilómetros al sur en 2022
- Un estudio de temperaturas en un centenar de ciudades revela que el sur de Europa registró en 2022 un calor propio de climas más cálidos
- Las temperaturas en las 27 ciudades españolas analizadas fue, en promedio, 1,17 grados más elevada que la media histórica de 1990 a 2020
Las altas temperaturas registradas en España a lo largo de 2022, el año más caluroso en España desde que hay registros, equivalieron a desplazar, en términos climáticos, las principales ciudades españolas una media de 335 kilómetros más al sur. Así, Barcelona tuvo temperaturas propias de la costa sur de Grecia, León marcó cotas similares a las del norte de Argelia -a más de 700 kilómetros de distancia- y en A Coruña el calor se pareció al de las ciudades que bordean la bahía de San Francisco.
Así se desprende del análisis realizado por Callendar, una empresa francesa especializada en evaluación de riesgos climáticos, que compara las temperaturas registradas durante todo el año pasado en un centenar de ciudades de cuatro países del sur de Europa -España, Francia, Italia y Portugal- con la media de esas mismas ciudades en el período 1990-2020 a partir de los registros del ERA5, una base de datos elaborada por el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo, y empareja cada una de ellas con una localidad que presenta esas mismas temperaturas.
El resultado revela que, en conjunto, las ciudades analizadas estuvieron 1,38 grados por encima del promedio histórico, un incremento que en España se sitúa, para las 27 ciudades seleccionadas en el análisis, en 1,18 grados. Granada y Jaén fueron las ciudades españolas que más se desviaron de su promedio histórico, con casi dos grados en el conjunto del año, aunque todas ellas tuvieron temperaturas más altas de lo normal.
Temperaturas propias de áreas situadas cientos de kilómetros más al sur
Esos incrementos son el equivalente, en términos climáticos, a desplazar esas ciudades cientos de kilómetros más al sur: según Callender, la media para todas las localidades analizadas es de 435 kilómetros de latitud, si bien para las ciudades españolas se queda en 335 kilómetros.
El ejemplo más extremo que presentan, para las ciudades españolas, es el de León, que en 2002 tuvo unas temperaturas similares a las Sétif, una ciudad del norte de Argelia situada 712 kilómetros más al sur. También en Argelia se encontraría el espejo de Madrid, que el año pasado tuvo temperaturas equivalentes a las de Tissemsilt, 535 más al sur que la capital.
También destaca el caso de A Coruña, a la que la consultora emparenta con Palo Alto, en California, a casi 9.000 kilómetros de distancia en Estados Unidos y 665 kilómetros más al sur que la ciudad gallega. O Barcelona, que sufrió un calor similar al que normalmente se registra en Gargaliánoi, en la costa sureste de Grecia, casi 480 kilómetros más al sur.
Casi mil kilómetros de distancia climática en algunas ciudades europeas
En el resto de países analizados hay variaciones incluso más acusadas, lo que revela lo extremo de las temperaturas sufridas a lo largo del año pasado en Europa, especialmente en el verano, que fue el más caluroso en el continente desde que hay registros. En Turín, por ejemplo, la temperatura media fue casi 2,2 grados más elevada que el promedio histórico, mientras que en la localidad francesa de Annecy, también en las estribaciones de los Alpes, se superaron los dos grados de diferencia.
En términos de equivalencia climática, el análisis -que se ha volcado en un mapa interactivo- señala que la ciudad francesa de Metz tuvo temperaturas parecidas a las de Tepelenë, en Albania, situada a 980 kilómetros más al sur, o que Livorno, la ciudad portuaria italiana, pudo comprarse con el clima habitual de Tympáki, en Grecia, a 942 kilómetros de latitud.
París, por su parte, tuvo unas temperaturas asimilables a las de Albi, aún en Francia, aunque 547 kilómetros al sur de la capital francesa.Y Roma, que estuvo un grado y medio por encima de su media, se emparenta con Spáta, localidad griega situada 436 kilómetros más al sur.