Fuentes dice que las reuniones en el Congreso con empresarios son "habituales" y Espinosa que recibió pagos
- El exdiputado socialista niega su participación en el 'caso Mediador' y admite que su empresa recibió ayudas europeas
- El general retirado acusa al mediador, Antonio Navarro, de captarle para tejer su "red de araña" de empresarios
El exdiputado del PSOE Juan Bernardo Fuentes Curbelo, conocido como 'Tito Berni', ha reconocido en su declaración ante el jueza por el 'caso Mediador'que las reuniones con empresarios en el Congreso son "habituales", mientras que el general retirado de la Guardia Civil Francisco Espinosa, otro de los investigados en esta causa, ha admitido haber recibido pagos de los empresarios de la trama en concepto de vuelos u hoteles.
RTVE.es ha tenido acceso a la declaración que ambos investigados realizaron ante la magistrada del Juzgado de Instrucción Número 4 de Santa Cruz de Tenerife, Ángeles Lorenzo-Cáceres, en el marco de la investigación del caso de 'mordidas' y extorsión a empresarios canarios a cambio de favores y privilegios en materia de contratación pública. Una investigación que sitúa a Fuentes Curbelo como cabecilla de la trama y en el que están siendo investigados su sobrino Taishet Fuentes, el general retirado Espinosa y el empresario canario Antonio Navarrete, considerado el 'mediador' de la trama, entre el total de 12 imputados.
En su declaración el pasado 22 de febrero, Fuentes Curbelo indica a la jueza que quedó un día con Navarrete, el presunto mediador, en la Cámara Baja, en Madrid. "Comimos una vez en la cafetería del Congreso de los Diputados", ha dicho, a lo que la instructora ha preguntado si era "normal" ese "paseíllo de empresarios". "Es habitual que muchos empresarios vengan al Congreso a exponer sus problemas e intentar solucionar", ha apuntado Fuentes Curbelo, que está acusado de cohecho, falsedad documental, blanqueo de capitales, pertenencia a grupo organizado.
Fuentes ha negado formar parte de la cúpula de la denominada 'trama Mediador', al tiempo que ha reconocido que su empresa recibió ayudas europeas cuando estaba al frente de la dirección de Ganadería de Canarias.
La jueza ha preguntado directamente a Fuentes Curbelo si él fue quien presentó a los integrantes de la denominada trama. "¿Es usted quien le presenta Navarro Tacoronte a su sobrino? ¿En qué momento se forma este triángulo?", le ha interpelado la instructora. Pero el exdiputado se ha desmarcado. "No sé de qué triangulo me pregunta", ha dicho. La jueza le ha respondido: "El que evidentemente hay. Navarro se reúne con su sobrino, se reúne con usted y entre ustedes tres hay un cruce de conversaciones y de transferencias y pagos".
El exdirigente ha relatado que conoció al "mediador" de la trama que ahora se investiga al principio de su gestión como director general de Ganadería. "Navarro Tacoronte se me presentó por primera vez (...) en la dirección general de Ganadería. Pasó por mi despacho. No recuerdo el mes exactamente. Pero fue al principio de mi gestión. Se presentó con un señor de Tenerife (...) como un empresario que se dedica a la instalación de fotovoltaicas", ha precisado.
Ante tal afirmación, la jueza le ha preguntado si dentro de sus funciones como director de ganadería estaba recibir a empresarios. Fuentes Curbelo ha dicho que sí. "No volví a hablar con él más hasta que era diputado", ha añadido al tiempo que ha precisado que el "mediador" le contactó de nuevo. "Seguía comentándome que tenía empresas interesadas en establecerse en la Zona Especial Canaria", ha dicho. Según consta en el sumario, Navarro Tacoronte aseguró en sede policial que conocía a Fuentes Corbelo "desde la infancia".
Reconoce que su empresa recibió ayudas europeas
Preguntado sobre si durante su mandato como director general de Ganadería intervino en algún expediente relacionado con su empresa, el exdiputado ha asegurado que "lo primero" que le asesoraron los servicios jurídicos de las direcciones generales es que dejara sus responsabilidades como empresario. "No recuerdo haber participado directamente, pero mi empresa ha sido beneficiaria de subvenciones y ayudas de fondos europeos", ha añadido.
Fuentes Curbelo ha puntualizado que quien se encargó de gestionar dichas ayudas fue su esposa, aunque ha dicho que "de memoria" no puede precisar la cantidad recibida y ha asegurado que "nunca" ha usado su condición de director de Ganadería o de diputado para favorecer el ámbito de sus empresas.
Al margen, ha asegurado que él mismo lleva la contabilidad de la Asociación Deportiva Vega Tetir, empresa que según consta en el sumario se habría beneficiado de la trama y habría servido como empresa "pantalla" para efectuar y retirar los pagos.
Al hilo, la jueza ha avisado a Fuentes Curbelo que aún no ha podido realizar una investigación patrimonial de sus cuentas porque hasta hace poco era diputado.
Espinosa admite que recibió pagos de los empresarios
Por su parte, el general retirado de la Guardia Civil Francisco Espinosa admitió en su declaración del pasado 16 de febrero ante la magistrada que los empresarios le pagaron comidas, vuelos y hoteles, entre otras cuestiones.
El general confirmó tres reuniones con la trama, dos en Gran Canaria y una en Fuerteventura y dijo no conocer quién sufragaba sus vuelos y estancias, aunque sí señaló que le explicaron que no querían que le costase dinero a él y que por lo tanto "pagaban el billete de avión y el hotel". Sobre si también corrían con los gastos de su amante, el general negó que fuera así porque ella reside en Las Palmas y no abonaron su billete. "¿Y el hotel?", preguntó la jueza, a lo que respondió el general que su habitación era doble.
La magistrada le echó en cara que estando en activo aceptara esos favores económicos en busca de un futuro trabajo, pero Espinosa respondió que en el momento de los viajes tenía suspendida su condición de general, estaba en servicios especiales y por lo tanto no estaba obligado por imposiciones legales de la Guardia Civil. "¿No ve inconveniente a que le paguen vuelos, comidas y hoteles?", cuestionó la jueza, a lo que respondió que "eran amigos y se ofrecían como fase de captación" para que él fuera a trabajar con ellos.
Respecto a cómo se implicó en el 'caso Mediador', el general retirado dice que conoció a Navarro Tacoronte de forma casual en un restaurante y que en una primera reunión le ofreció un puesto de director de relaciones institucionales en una empresa de fotovoltaica que quería montar en Canarias junto al empresario Antonio Bautista (también imputado). Asegura que le ofrecieron ese puesto porque él conoce "mucha gente" de cuando estuvo destinado cuatro años en Las Palmas. Además, el general apuntó, a preguntas de la jueza, que le pareció "perfecto" porque quería trabajo tras su jubilación. "Las condiciones laborales eran 5.000 euros y una tarjeta de gastos de protocolo", dijo.
Navarro Tacoronte le explicó, según Espinosa, que viajaba dos o tres veces al mes a Madrid "porque trabajaba con un diputado". Preguntado el general retirado sobre si fue entonces cuando Espinosa conoció al exdiputado del PSOE implicado en la causa, Espinosa respondió taxativamente que no: "No lo conocía, ni lo conozco ahora tampoco".
Cenas para introducir empresarios "en la tela de araña"
Espinosa acusa a Navarro Tacoronte de usarlo como cebo para tejer su "red de araña". Precisamente, cuando la jueza le puso sobre la mesa las comidas con empresarios en restaurantes como La Trainera o La Quinta y le preguntó por la finalidad de las mismas, el general señaló que Navarro Tacoronte las organizaba "simplemente para introducir gente en esta tela de araña que estaba construyendo". "La tela de araña que tenia construida era que tenía contactos en la comunidad canaria, que me tenía a mí de contacto (...), y él traía de vez en cuando a empresarios a los que verdaderamente pedía dinero y extorsionaba diciendo que conocía a fulanito y a menganito", explicó, para luego subrayar que a él le "engolosinaba con esto de vámonos a comer o a tomar algo".
En cuanto a las gestiones que habría realizado para que empresarios importantes de Canarias se reunieran con Bautista para intentar colocar placas solares (algo que no fructificó), el general retirado explicó que las hizo porque quería que le diera trabajo tras la jubilación. "Por eso me esforcé en intentar que él se entrevistara con personas del grupo Lopesan, pero no impulsé la contratación obligando a nadie", añadió.
Además, sobre esas gestiones, el general confesó a la jueza que se produjeron porque la trama quería que él tuviera "un acto de buena voluntad" presentándoles a empresarios. Por eso, tiró "de dos buenos amigos" para que Bautista les hiciera una exposición de su proyecto de instalación de placas. "Lo estudiaron y concluyeron que no les interesaba, y ahí se acabó el proyecto", recordó.
Durante su declaración, Espinosa reiteró en varias ocasiones que si bien le presentaron a empresarios, como Raúl Gómez Gordo, él en realidad no hizo "nada por nadie". En concreto, sobre este empresario explicó que le comentó si le podía echar una mano en un proyecto en Perú, pero él no lo hizo.