Contrataciones en origen: en 2023 llegarán a España 18.000 trabajadores para sectores como el de la agricultura
- Trabajarán, sobre todo, en Huelva, pero también en Lleida, Baleares, Albacete y Segovia
- Este año, como novedad, firman contratos fijos-discontinuos y el permiso de trabajo es por cuatro años
A pesar de que el paro ha subido en la agricultura, hay empresas en Huelva donde les cuesta encontrar personal para recoger y envasar frutos rojos. Un total de 450 trabajadoras llegan cada año desde Marruecos con un contrato en origen.
"Es verdad que las trabajadoras de aquí no me dan la confianza como para acabar una campaña, ya que entran a trabajar, pero luego se cansan o les sale algo mejor", explica a TVE María Isabel Estévez, administradora única de Los arenales de Mazagón, una empresa exportadora de Huelva y dedicada a Cultivo de otros árboles y arbustos frutales.
Mina y su hermana llevan años yendo a esta empresa para recoger la fresa. Les dan alojamiento, trabajan de cinco a seis meses y después vuelven a su país. Todo esto engloba un concepto llamado "migración circular".
Está previsto que lleguen a España un total de 18.000 contratados en origen, 7.000 más que el año pasado. Trabajarán, sobre todo, en Huelva, pero también en Lleida, Baleares, Albacete y Segovia.
Cobran 1.000 euros por trabajar seis horas y media al día
Este año, hay una novedad: firman contratos fijos-discontinuos. Además, el permiso de trabajo que les dan, que antes era por un año, ahora es por cuatro. Cobran alrededor mil euros al mes por trabajar seis horas y media diarias, una cantidad superior a lo que recibiría en Marruecos.
No obstante, UGT rechaza traer trabajadores de fuera y prefieren que esos empleos sean cubiertos por trabajadores parados, pero con mejores condiciones. "No es que las personas que están aquí no quieran trabajar en el campo, sino que las condiciones que parece que se están ofreciendo no son lo suficientemente atractivas", explica a TVE Fernando Luján, vicesecretario general política sindical del sindicato.
Por su parte, el Gobierno insiste en que las condiciones son las mismas para todos por convenio. "El salario de estas trabajadoras es exactamente el mismo al sueldo que tiene cualquier otro trabajador del sector agrario en España porque se aplica el convenio colectivo", señala Isabel Castro, secretaria de Estado de Migraciones.