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Miles de personas vuelven a protestar en Tiflis contra la polémica ley de agentes extranjeros

  • Los opositores aseguran que continuarán hasta que se cumplan sus exigencias
  • Durante la manifestación un grupo ha tratado de acceder al Parlamento y la policía ha usado cañones de agua

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Miles de personas vuelven a protestar en Tiflis contra la polémica ley de agentes extranjeros
Miles de personas vuelven a protestar en Tiflis contra la polémica ley de agentes extranjeros

Miles de personas han vuelto a exigir este miércoles a las autoridades georgianas retirar la controvertida ley de agentes extranjeros, aprobada el martes en primera lectura por el Parlamento del país caucasiano.

"Las autoridades no hablan con nosotros y somos más de 100.000 personas aquí", ha dicho durante la protesta en Tiflis el diputado opositor Gueorgui Vashadze.

El Gobierno, por el momento, no ha compartido sus estimaciones acerca del número de los participantes en la manifestación, que ha ido creciendo conforme avanzaba la jornada.

Vashadze ha dicho que los manifestantes exigen revocar la polémica norma, tachada de "antidemocrática" por la oposición. "Vamos a cercar el Parlamento de una manera pacífica", ha añadido dirigiéndose a los presentes en la movilización.

Los opositores aseguran que continuarán su protesta hasta que se cumplan sus exigencias y no permitirán la celebración de la sesión de este jueves en la Cámara.

Durante la manifestación un grupo de los presentes ha tratado de acceder al Parlamento y ha lanzado piedras contra las ventanas del edificio. Finalmente, ha sido dispersado por los antidisturbios con cañones de agua y gases lacrimógenos.

La presidenta de Georgia critica que es una ley "dictada por Moscú"

La ley, respaldada por el partido gobernante Sueño Georgiano, va a exigir a cualquier organización que reciba más del 20% de su financiación del extranjero que se registre como "agente extranjero" para no enfrentar multas sustanciales.

Sus detractores consideran que el proyecto recuerda a la ley aprobada hace una década por Rusia, que permite al Estado reprimir y prohibir las opiniones críticas de la oposición, ONGs , medios de comunicación y activistas de derechos humanos.

Pese a las críticas en el seno del país, en Estados Unidos y en la Unión Europea, 76 parlamentarios georgianos apoyaron el martes el proyecto sobre agentes extranjeros, mientras trece votaron en contra, lo que dio lugar a violentas protestas frente al Parlamento.

Desde Estados Unidos, la presidenta georgiana, Salomé Zurabishvili, ha expresado públicamente su apoyo a los manifestantes. "Me dirijo a vosotros, que os encontráis en la Avenida Rustaveli. Hoy me encuentro en Nueva York y ante mí está la Estatua de la Libertad. Ella es símbolo por lo que siempre luchó Georgia. Estoy con vosotros, ya que hoy vosotros representáis a una Georgia libre", ha asegurado.

En declaraciones a la televisión, ha subrayado que la ley "fue redactada bajo el dictado de Moscú", por lo que "el proyecto debe ser retirado".

En la noche del 7 al 8 de marzo los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes georgianos se saldaron con 66 detenidos y medio centenar de heridos entre los agentes del orden, según fuentes oficiales.

El presidente del Sueño Georgiano, Irakli Kobijadze, ha afirmado que el polémico proyecto ya ha sido enviado a la Comisión de Venecia y su discusión continuará solo después de que haya un veredicto.

La víspera, el presidente del Parlamento, Shalva Papuashvili, ha asegurado que la respuesta de la Comisión de Venecia podría llegar "dentro de unos tres meses".