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Varios heridos durante las protestas en Pakistán por el intento de arresto del ex primer ministro Khan

  • Los manifestantes tomaron las calles de la capital del país, Islamabad, y las ciudades de Karachi y Lahore
  • Además, algunos de sus partidarios también bloquearon carreteras en ciudades más pequeñas

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Seguidores del ex primer ministro Imran Khan se enfrentan con la policía delante de la residencia de Khan para protestar por su detención
Seguidores del ex primer ministro Imran Khan se enfrentan con la policía delante de la residencia de Khan para protestar por su detención

La policía paquistaní y los partidarios de Imran Khan se han enfrentado este martes frente a la casa del ex primer ministro en Lahore, resultando heridas personas de ambos bandos, antes de su esperada detención, han confirmado un portavoz del gobierno y varios testigos.

Los partidarios de Khan empezaron a lanzar piedras y ladrillos a la policía, mientras que los agentes han respondido golpeando a los partidarios de Khan con porras y ha lanzado botes de gas lacrimógeno, algunos de los cuales cayeron sobre el césped de la casa de Khan, según imágenes de vídeo difundidas por su partido.

"Detendremos a Imran Khan hoy y lo presentaremos ante el tribunal", ha declarado el ministro del Interior, Rana Sanaullah, en un acto público retransmitido en directo por las televisiones locales.

Un tribunal de primera instancia de la capital, Islamabad, había emitido la orden de arresto contra Khan por venta ilegal de regalos del Estado mientras estuvo en el poder entre 2018 y 2022, según ha confirmado a Reuters su ayudante Fawad Chaudhry.

El ayudante de Khan, Shah Mehmood Qureshi, ha explicado a los periodistas que el ex primer ministro había obtenido una "fianza protectora" de un tribunal. "Entendemos que la policía no puede detener a Imran Khan", ha concluido.

Varias ciudades del país envueltas en protestas

Las protestas estallaron este martes en las principales ciudades de Pakistán después de que las autoridades se personasen en el domicilio del ex primer ministro Imran Khan para efectuar su arresto.

Grupos de manifestantes tomaron las calles de Islamabad y las ciudades de Karachi y Lahore, donde reside Khan, para mostrar su rechazo y evitar así que la Policía de la capital paquistaní arrestase al líder opositor.

La tensión en el país ha ido en aumento en las últimas horas. En un mensaje de vídeo aparentemente grabado dentro de su residencia, Khan ha llamado a sus seguidores a "tomar las calles" para resistir a este nuevo intento de detención.

De hecho, algunos de sus partidarios también bloquearon carreteras en protesta por la posible detención de Khan en ciudades más pequeñas.

No es el primer intento de arresto

No es la primera vez que Khan se ve envuelto en algo así. Desde su destitución ya ha hecho frente a varios procesos judiciales.

Desde un intento de arresto similar el pasado día 5, y ante la orden de prisión sin derecho a fianza promulgada por un tribunal de Islamabad, Khan ha permanecido atrincherado en su residencia rodeado de sus seguidores.

El líder opositor ha sido acusado de quedarse con regalos recibidos durante su mandato sin entregarlos al Toshakhana, un depósito gubernamental donde se guardan los presentes percibidos de parte de funcionarios extranjeros y que, en caso de querer conservarlos, deben pagar previamente el 50% del valor de su tasación.

Khan ha sido implicado además en otros casos y en los últimos meses se ha ausentado de varias citaciones, alegando problemas de salud después de que sufriera heridas de bala en ambas piernas por un intento de asesinato el pasado noviembre.

Desde entonces ha denunciado que figuras de poder del país planean otro ataque en su contra.

Khan fue destituido de su cargo el pasado abril a través de una moción de censura, que el exgobernante atribuyó a un movimiento de Estados Unidos para expulsarlo del poder como castigo por una visita a Rusia celebrada en la misma jornada en la que Moscú comenzó su ofensiva en Ucrania.

Washington negó las acusaciones de Khan, que posteriormente se retractó y afirmó que fue el ex jefe del Ejército de Pakistán Qamar Bajwa quien conspiró con la oposición para desalojarlo.