La ley de inmigración del gobierno de Sunak pasa el primer trámite en el Parlamento británico

• La ministra de Interior, Suella Braverman, tacha de "bien intencionados naif" a los que se oponen a la ley
• Los laboristas advierten de que la ley beneficia a las mafias del tráfico de personas

La ministra de Interior del Reino Unido, Suella Braverman, en una imagen de archivo.

La ley de inmigración propuesta por el gobierno del primer ministro británico, Rishi Sunak, ha pasado el primer trámite en el Parlamento de Westminster este lunes.

La ley, que bloqueará el acceso al asilo de las personas que lleguen al Reino Unido de manera irregular a través del Canal de la Mancha, ha sido admitida en la Cámara de los Comunes al fracasar el intento del Partido Laborista de bloquear su tramitación.

La ley ha pasado el trámite en votación tras cuatro horas de debate por 313 a favor (los de los diputados tories más cuatro independientes) frente a 251 en contra (los del Partido Laborista, el Partido Nacionalista Escocés, los Liberal-Demócratas, los nacionalistas galeses y otros), según informa la web del Parlamento.

Ahora la ley podrá continuar con su trámite parlamentario y pasará a un comité antes de volver al pleno de los Comunes y más tarde pasar a la Cámara de los Lores.

"Demasiada inmigración", según la ministra de Interior

La ministra de Interior, Suella Braverman, encargada de defender la propuesta de ley, aseguró que ha habido "demasiada inmigración" en los últimos años y ha tachado quienes se oponen a la norma de "naif bien intencionados".

Braverman, cuyos padres emigraron al Reino Unido en la década de los sesenta del siglo pasado provenientes de Kenia y Mauricio, lamentó haber sido objeto de "ataques grotescos". "No me van a intimidar izquierdistas desfasados - dijo en su intervención - Es perfectamente respetable para una hija de migrantes como yo decir que estoy profundamente agradecida de vivir aquí, decir que la inmigración ha sido abrumadoramente beneficiosa para el Reino Unido, pero que hemos tenido demasiada en los últimos años".

Braverman afirmó también que la protección de los menores vulnerables estaba asegurada. "Seamos honestos, la gran mayoría de llegadas, 74 % en 2021, fueron de varones adultos por debajo de los 40 años", argumentó.

"La gran mayoría no eran mujeres embarazadas, ni mujeres jóvenes. Todos viajaron a través de países seguros como Francia, en los que podrían y deberían haber pedido asilo en primer lugar", añadió la ministra, según recoge Reuters.

Los laboristas advierten de que la ley beneficia a las mafias

La réplica a Braverman la ha dado la ministra de Interior en la sombra del Partido Laborista, Yvette Cooper, quien ha advertido que la nueva ley no detendrá el tráfico de personas.

"El mensaje del gobierno británico a las mafias de tráfico criminal y esclavitud es: 'no se preocupen, mientras traigan a gente ilegalmente, no les ayudaremos. De hecho, les ayudaremos a ustedes', ese es su mensaje a las mafias, 'les ayudaremos a ustedes y amenazaremos a esas personas con la detención inmediata y la deportación, para que así ustedes puedan incrementar su control sobre esas víctimas de tráfico'. Esta norma es un estatuto para los traficantes, esclavitud moderna", dijo Cooper.

La diputada laborista lamentó que los menores no acompañados podrán ser deportados sin consideración a los motivos de su huida, y que una vez que alcancen los 18 serán deportados incluso aunque tengan familia en el Reino Unido. "Incluso si han sido exportados y abusados por las bandas criminales, se les niega cualquier protección ante la esclavitud moderna. Les convierte en ilegales para siempre en el Reino Unido".

Cooper advirtió además que la ley no conseguirá detener las llegadas irregulares, y en lugar de eso aumentará "el caos". Pero, añadió, a Sunak solo le importa obtener una ganancia electoral de cara a las elecciones, aunque ellos perjudique tanto la reputación internacional del país como a personas vulnerables.

Por su parte Theresa May, diputada conservadora y ex primer ministra, mostró sus dudas respecto a la eficacia de la nueva norma, porque "cuando se cierra una ruta para los migrantes, tanto ellos como los traficantes encuentran otra".

"Quien crea que con esta ley acabará de una vez por todas con el problema de la migración ilegal, se equivoca", ha añadido May, y ha recordado que la mayoría de quienes residen irregularmente en el Reino Unido han entrado legalmente, con un visado.

La primera ministra no ha participado en la votación final.

Protesta frente al Parlamento británico contra la Ley de Migración durante el debate del lunes, 13 de marzo. Victoria Jones/PA Wire/PA vía AP

Una ley polémica

Se espera que la Ley sobre Migración Ilegal siga levantando oposición tanto en el Parlamento como en los tribunales. Este mismo lunes, cientos de personas se han concentrado frente en Westminster para protestar durante el debate.

La inmigración se convertirá previsiblemente en uno de los argumentos de las elecciones generales, previstas para el próximo año.

Sunak ha declarado que una de sus prioridades es frenar la llegada de personas a las costas británicas desde Francia, que hacen la travesía en pequeños barcos o incluso en botes hinchables.

El último año llegaron 45.000 personas, lo que supone un aumento del 500 % en los últimos dos años. La mayoría llegan de países en conflicto o donde no se respetan los derechos humanos como Siria, Afganistán, Eritrea, Irak o Irán.

Con la nueva ley, quienes lleguen de manera irregular, incluso aunque sean potenciales solicitantes de asilo, será detenidos sin fianza y deportados a su país de origen o a un tercer país seguro. Solo en casos extremos se permitirán excepciones.

La ONU ya ha advertido de que la norma puede violar la legislación internacional.

Como parte de su política de control migratorio, Sunak ha firmado con el presidente francés, Emmanuel Macron, un acuerdo para aumentar la colaboración fronteriza.