Las pensiones mínimas contributivas subirán un 22% hasta los 1.178 euros mensuales entre 2024 y 2027
- La reforma de pensiones supondrá también que las cotizaciones sociales por hora trabajada suban 37 céntimos hasta 2050
- En total, las nuevas medidas aportarán ingresos por valor del 1% del PIB anual en la década de 2040, según Escrivá
La reforma de las pensiones incluye que entre 2024 y 2027 las pensiones mínimas subirán por encima de la inflación para garantizar su suficiencia, lo que supondrá un alza de alrededor del 22% de la pensión mínima contributiva con cónyuge a cargo, que pasará de 966,20 a 1.178,50 euros al mes.
El texto, pactado este miércoles con los sindicatos y rechazado por la patronal por la "voracidad recaudatoria", contempla varias medidas para elevar los ingresos del sistema, como una cuota de solidaridad a los salarios más altos, el progresivo destope de bases máximas o la ampliación del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI). El acuerdo se aprobará este jueves durante un consejo de ministros extraordinario convocado por el presidente del Gobierno.
En total, las nuevas medidas aportarán ingresos por valor del 1% del PIB anual en la década de 2040, según el ministro de Inclusión, José Luis Escrivá, que ha presentado la reforma en la comisión del Pacto de Toledo. Escrivá ha defendido con esas cifras el "impacto limitado" de las medidas recogidas en la reforma en las cotizaciones, "que se mantendrán por debajo de las de otros países europeos, manteniendo el nivel de competitividad de la economía española".
Entre otras cosas, establece que la pensión mínima contributiva con cónyuge a cargo debe alcanzar el 60% de la renta mediana de un hogar de dos adultos, lo que supondrá 16.500 euros anuales en 14 pagas en el año 2027.
Con arreglo al mismo criterio de suficiencia, la pensión mínima no contributiva tendrá que situarse en el 75% del umbral pobreza individual, lo que en 2027 serían cerca de 8.300 euros anuales o unos 592 euros al mes, frente a los 457,30 actuales.
Las cotizaciones suben 37 céntimos por hora trabajada
Por otro lado, la reforma de pensiones supondrá que las cotizaciones sociales por hora trabajada suban 37 céntimos, hasta los 6,37 euros, en los próximos 27 años, según la presentación del ministro.
En total, el coste laboral por hora trabajada, donde entran cotizaciones, salarios y otros conceptos, pasaría de 23,4 euros a 23,8 euros, en niveles "relativamente bajos" en comparación con otros países de Europa.
El titular de Inclusión también ha explicado que la reforma cuenta con un "mecanismo de cierre" que conlleva la revisión del sistema por parte de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), que hará un informe si aprecia una "desviación significativa" con una serie de recomendaciones.
El Gobierno correspondiente deberá proponer a los agentes sociales y al Pacto de Toledo medidas ante ese desvío, pero, si no logra consenso suficiente para sacarlas adelante, se contempla un mecanismo final automático que corrige la situación con más aumentos en el MEI. "En ese escenario hipotético no serán subidas significativas", ha dicho Escrivá.
Se podrán excluir del cálculo los 24 peores meses
Sobre el periodo de cómputo, el titular de Inclusión ha explicado que en 2038 se podrán excluir del cálculo los 24 peores meses de los últimos 29 años y ha facilitado algunos ejemplos sobre cómo puede beneficiar este nuevo cómputo a los pensionistas frente a los 25 años actuales y por los que también podrán seguir optando.
Por ejemplo, ha explicado, un trabajador que haya cotizado desde 1978 a 2022, un total de 44 años, con una interrupción de dos años cobraría 1.715 euros de pensión con el sistema actual y 1.814 –100 euros más– con el nuevo.
En cuanto a la mejora del tratamiento de las lagunas de cotización, el ejemplo facilitado por Escrivá recoge que una trabajadora que haya cotizado desde 1978 a 2022 con una interrupción de ocho años tendría una pensión de 1.318 euros con el sistema actual y de 1.486 euros con el nuevo y la mejora de lagunas, un 13 % o 170 euros más.
Finalmente, Escrivá ha ofrecido a la Comisión tramitar como proyecto de ley la reforma de pensiones, que primero el Gobierno quiere aprobar vía decreto para que entre en vigor. El ministro ha sugerido esta posibilidad para que los grupos puedan introducir enmiendas al texto en torno a diferentes elementos.