'Los reyes del mundo' o la "épica punk" de Laura Mora tras la justicia y la belleza
- Se estrena la película ganadora de la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián
- RTVE.es entrevista a la cineasta colombiana
Combinando un realismo duro con una mirada poética, la cineasta colombiana Laura Mora consiguió la Concha de Oro del Festival de cine de San Sebastián con Los reyes del mundo, en un raro consenso que a veces sucede en los festivales: su película cautivó con la epopeya utópica de cinco muchachos hacia el corazón de Colombia.
Los reyes del mundo acompaña a Rá, Culebro, Sere, Winny y Nano, cinco chicos de Medellín sin familia, dinero ni posesiones, que viajan hacia el territorio de Bajo Cauca para recuperar terrenos expropiados a la abuela de Rá. Por el camino de mar, montaña y selva les golpea la violencia y pobreza, que sobrellevan con su amistad y dignidad.
“Me obsesiona la idea de justicia, quizás porque crecí en una familia de abogados -explica la directora en una entrevista con RTVE.es-, pero tiene que ver con crecer en un estado en el que siento que uno de esos grandes problemas es el colapso del de del departamento de Justicia, no solo por la corrupción, sino por la magnitud de la tragedia en Colombia. Una amiga mía dice que la única justicia que existe en el cine es la justicia poética, y esa es la que más me interesa”.
Mora reclutó para su pandilla protagonista a cinco actores no profesionales, un aspecto que concuerda con una película iniciática en muchos aspectos: muchos paisajes eran cinematográficamente vírgenes. La tierra prometida se convierte en una utopía tras un mundo justo.
La llamada ‘restitución de tierras’ que detona la trama de su película es una parte de la reparación para las víctimas del conflicto armado colombiano. Para la cineasta, hay un resonancia de la película en el viraje político que precisamente ha iniciado Colombia con la nueva presidencia de Gustavo Petro. “Ahora está en el centro de la discusión el tema de las tierras, que es algo de lo que nadie quería nunca hablar. Es hermoso que la película alimente el debate. También para los opositores, que odian la película”, reconoce.
Pero por encima del fondo político vuela la mirada poética y prácticamente alegórica de Mora. “Entiendo la estética como lo espiritual. Para mí la belleza solo tiene sentido cuando tenemos una belleza que realmente nos conmueve a un nivel profundo y místico y espiritual.
Mora bautiza ese realismo onírico como “épica punk”. “Lo que me interesa es no limitarme a la imagen realista. En particular, el cine de Theo Angelopoulos fue muy importante. Sus películas siempre implicaban un viaje y sus películas tienen eso que solo supo hacer él: detener todos los tiempos, pasado, presente y futuro, dentro del mismo plano”, desarrolla.
La directora afirma que Los reyes del mundo es una película personal porque de alguna manera expresa su filosofía. “Vivo en una contradicción que creo que se siente mucho en la película. El mundo me parece realmente un lugar horrible, pero la vida me encanta. En ese sentido tengo mucha esperanza lo que pasa es que no soy optimista. La esperanza no excluye la derrota”, concluye.