Los sindicatos paralizan el aeropuerto de Ben Gurion por la reforma judicial que divide al Gobierno de Israel
- Los puertos de Haifa y Ashdod han anunciado que han dejado de funcionar por el seguimiento de una huelga
- El presidente israelí ha pedido al Gobierno de Netanyahu que paralice la reforma judicial
El aeropuerto internacional Ben Gurion, el principal de Israel, ha cancelado este lunes el despegue de vuelos tras decretarse una huelga de sus trabajadores en el marco de una protesta generalizada contra la polémica reforma judicial impulsada por el Gobierno de Benjamin Netanyahu.
Los dos puertos principales de Israel también han anunciado este lunes que han dejado de funcionar por el seguimiento de una huelga. Los puertos de Haifa y Ashdod han afirmado en declaraciones separadas que continuarán en huelga hasta que el primer ministro detenga la reforma.
Israel lleva trece semanas consecutivas de protestas desde que el nuevo gobierno de Netanyahu anunciara a principios de enero su plan de reforma judicial, que aumenta el control gubernamental sobre la Justicia.
La reforma incluye la "cláusula de anulación", por la que una mayoría parlamentaria podría revertir fallos del Supremo. Además, da al gobierno control casi total sobre la elección de los jueces y permite que cargos políticos ocupen los puestos de asesores legales de los ministerios.
Los críticos ven la reforma como una amenaza a la democracia y a la separación de poderes. Más de 100.000 israelíes se han concentrado este lunes frente a la Kneset, una concentración que sigue a multitudinarias protestas durante los últimos días, incluida una manifestación anoche que concentró a más de 650.000 personas tras el despido del ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien el pasado sábado se convirtió en el primer miembro del Gobierno en pedir frenar la reforma.
Aviso de huelga general
El cese del ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha radicalizado las protestas. A los disturbios del domingo y la madrugada del lunes se suma que la confederación de sindicatos, el Histadrut, ha amenazado con una huelga general inmediata. El sindicato se ha dirigido a Netanyahu para pedir que abandone el proyecto. Horas después, tras el anuncio del primer ministro de aplaar la polémica reforma judicial, el sindicato ha decidido cancelar la huelga nacional.
Las principales universidades del país ya han declarado una huelga indefinida, y un grupo de 23 alcaldes pretenden iniciar una huelga de hambre.
Algunos de los principales bancos de Israel, la compañía eléctrica del país y el ayuntamiento de la ciudad de Tel Aviv se han sumado a la huelga. También se han unido importantes cadenas gastronómicas como las cafeterías Aroma o los restaurantes McDonalds, el cuerpo diplomático, empresas productoras de alimentos, el colegio de abogados y grante tiendas como Fox, entre otros.
La Embajada de Israel en Estados Unidos ha amanecido este lunes cerrada por un día debido a la huelga contra la reforma judicial. En un mensaje en Twitter, la portavoz de la embajada, Elad Strohmayer, ha dicho que permanecería cerrada hasta "nuevo aviso".
Herzog pide frenar la reforma por la "unidad" del país
El presidente de Israel, Isaac Herzog, ha pedido a Benjamín Netanyahu que detenga "de inmediato" la reforma judicial que pretende reducir el poder del Tribunal Supremo, después de que el primer ministro haya cesado a su ministro de Defensa por criticar el proyecto.
Medios israelíes citan a "fuentes" del Likud, el partido conservador al que pertenece Netanyahu, y que es el socio mayoritario de la coalición de gobierno, que aseguran que el primer ministro podría congelar la reforma para calmar la situación. El Canal 12 de televisión asegura que Netanyahu comparecerá esta mañana.
En un mensaje publicado a través de su cuenta en Twitter, Netanyahu ha llamado a los manifestantes de Jerusalén, "de derecha e izquierda" a que "se comporten con responsabilidad y no actúen con violencia".
Los supremacistas judíos que forman parte de la coalición no quieren dar marcha atrás. El ministro de Seguridad Nacional, el ultranacionalista Itamar Ben-Gvir, ha pedido en redes sociales continuar con la reforma judicial y no ceder "a la anarquía".
"Por el bien de la unidad del pueblo de Israel, por el bien de la responsabilidad necesaria, les pido que detengan el proceso legislativo de inmediato", ha afirmado Herzog en un comunicado, horas después de que Netanyahu haya cesado al titular de Defensa Gallant, que había pedido públicamente frenar la reforma judicial.
Por su parte, el ministro de Justicia de Israel, Yariv Levin, ha afirmado que respetará cualquier decisión que tome Netanyahu sobre el futuro de la reforma y ha advertido de la falta de unidad en el gobierno.
"Una situación en la que todos hacen lo que quieren puede provocar la caída instantánea del gobierno y el colapso del Likud", ha afirmado el ministro en un comunicado. "Todos debemos esforzarnos por estabilizar el gobierno y la coalición", ha añadido.