La nueva directora de la Guardia Civil reivindica la gestión de Gámez y defiende la "inmensa limpieza" de la institución
- Gámez presentó su dimisión el pasado 22 de marzo tras la citación judicial de su marido en una pieza del 'caso ERE'
La nueva directora de la Guardia Civil, Mercedes González, ha reivindicado este martes la "honradez y honestidad" de su predecesora en el cargo, María Gámez, por encima de "cualquier ataque o descrédito", y ha defendido la limpieza y transparencia de la institución. "Nada ni nadie, ninguna estrategia política y ningún abuso particular puede marchar la inmensa limpieza de la Guardia Civil", ha recalcado
Gámez presentó su dimisión al frente de la Guardia Civil el pasado 22 de marzo tras la citación judicial de su marido en una pieza del 'caso ERE' y en medio de la polémica por el 'caso Cuarteles'.
"Quiero hacer un reconocimiento a mi predecesora, María Gámez, cuya honradez y honestidad está muy por encima de cualquier ataque o descrédito", ha defendido este martes González en sus primeras palabras tras el acto de toma de posesión en la Dirección General de la Guardia Civil.
"Su estilo de dirección y mando transformó la Guardia Civil en una institución moderna y avanzada", ha reconocido también Marlaska sobre Gámez, que no ha estado presente en el acto.
El ministro, que ya despidió a Gámez situándola como la mejor directora de la Guardia Civil en sus 179 años de historia, ha insistido este martes en su "enorme labor" para dotar a la Benemérita de una capacidad de respuesta "eficaz a los retos propios del siglo XXI y preparada para actualizarse siempre que sea necesario".
"Seremos inflexibles con quien manche la institución2
La nueva directora de la Guardia Civil ha reivindicado que "ninguna estrategia política ni abuso particular" podrán "manchar" la labor de la Guardia Civil ni "enturbiar" su trabajo en servicio de los ciudadanos. González ha remarcado que los mecanismos internos han sido los que han permitido descubrir cualquier actuación "objeto de reproche penal y ético", lo que cree que demuestra que el control interno "funciona, ha funcionado y seguirá funcionando".
En cualquier caso, se ha comprometido a perfeccionar estos mecanismos de control interno para evitar cualquier actuación "en beneficio personal". "Esa es una de mis tareas prioritarias", ha asegurado, pidiendo para ello la colaboración de todo el Cuerpo y también de las asociaciones.
"Seremos inflexibles. Quiero transmitir un mensaje inequívoco de limpieza, de lealtad y de entrega, porque el honor es nuestra divisa", ha afirmado.
En este sentido, el ministro del Interior ha limitado los casos de corrupción a un grupo "muy reducido" de guardias civiles, pero ha lamentado que su actuación daña al conjunto porque "desprestigia" su servicio "ejemplar". Por ello, ha proclamado que esas "reprobables" acciones no quedarán sin sanción y el Ministerio del Interior trabajará "sin desmayo" para impedir que las "deslealtades" ensucien el "prestigio" del Cuerpo.
Además, ha reivindicado que la Guardia Civil cuenta con mecanismos "suficientes" para corregir cualquier "desviación" de sus normas deontológicas o los principios legales y el Cuerpo es el primer interesado en "erradicar" toda conducta que pueda erosionar el "crédito y honestidad" de sus efectivos.