Muere Anne Perry, escritora de novela negra, condenada en su adolescencia por asesinato
- La novelista ha vendido millones de ejemplares de sus libros sobre la época victoriana
- Perry fue encarcelada cuando tenía 15 años por el asesinato de la madre de su mejor amiga
La célebre escritora británica de novela negra Anne Perry, condenada por el asesinato de la madre de su mejor amiga, ha muerto a los 84 años en Los Ángeles, según ha informado su editorial francesa.
Su historia personal inspiró la película Criaturas celestiales de Peter Jackson, estrenada en 1994 y protagonizada por Kate Winslet en su papel.
La prolífica autora, que ha despachado más de 25 millones de libros de policíaco sobre la era victoriana en todo el mundo, logró mantener su secreto durante décadas.
En 1954, Anne Perry, que entonces respondía al nombre de Juliet Hulme, tenía 15 años y vivía en Nueva Zelanda, junto a su mejor amiga, Pauline Parker. Cuando sus padres le comunicaron que tenía que mudarse al extranjero, las dos adolescentes decidieron matar a la madre de Pauline para evitar ser separadas.
El brutal asesinato de Honora Mary Parker conmocionó al país en un juicio en el que la futura novelista reconoció que la relación entre ambas jóvenes era obsesiva. Las dos amigas fueron condenadas a cinco años de cárcel al no tener la edad legal suficiente para la aplicación de la pena de muerte vigente en Nueva Zelanda.
Cambio de identidad y éxito como novelista
Cuando salió de prisión, la joven cambió de nombre y de vida. Trabajó durante un tiempo como azafata, se hizo mormona y se instaló en Escocia.
Fue bajo su nueva identidad cuando publicó su primer libro en 1979. El comienzo de una larga carrera, marcada por una serie de novelas protagonizadas por los personajes de Thomas Pitt y el detective William Monk.
Su nombre real, y sobre todo su pasado, acaban siendo revelados por la prensa, en los años 90, cuando su historia acaba de ser adaptada a la gran pantalla.
"Todo lo que había logrado como miembro honesto de la sociedad estaba amenazado", afirmaba al periódico The Guardian en 2003. "¿Por qué no puedo ser juzgada por lo que soy ahora, en lugar de por lo que era entonces?".
La escritora vivió en los Los Ángeles sus últimos años, la historia conservará "sus personajes destacados, su precisión histórica, la calidad de sus novelas policiacas y su interés por los temas sociales", relata en una nota su editorial.