El Constitucional francés valida la propuesta de Macron de retrasar la edad de jubilación a los 64 años
- Los jueces no han dado el visto bueno a seis disposiciones de la ley y han rechazado someterla a referéndum
- Macron ha promulgado la ley horas después del fallo y pese a las protestas
El Consejo Constitucional francés ha validado este viernes la mayor parte de la polémica reforma de las pensiones del Ejecutivo de Emmanuel Macron, aprobada por decreto el pasado 17 de marzo, incluida su medida estrella, el retraso de la edad de jubilación de los 62 a los 64 años.
El órgano constitucional ha rechazado, además, la petición de someter la normativa a un referéndum, solicitada por fuerzas de izquierda, sobre la que también tenían previsto pronunciarse.
Los nueve jueces miembros de este órgano, que tenía como función la evaluación, no solo del texto, sino también del procedimiento empleado para su aprobación, no han dado el visto bueno, sin embargo, a seis disposiciones del texto del Gobierno, entre ellas las relativas al fomento de la contratación de trabajadores mayores de 55 años en las grandes empresas.
Macron ha promulgado la ley tan solo horas después del dictamen, ya por la noche.
El Consejo valida el procedimiento usado por Macron
El dictamen del Consejo estaba siendo muy esperado después del revuelo generado por la ley que, entre otra cuestiones, eleva la edad de jubilación en Francia de los 62 a los 64 años. El Ejecutivo recurrió al artículo 49.3 de la Constitución para aprobar la reforma, esquivando así su votación en el Congreso, donde Macron no cuenta con la mayoría necesaria, y a otros como el 47.9 para acelerar su tramitación.
Una fuente del Consejo ha aclarado a la prensa que, al validar el aumento a 64 años, se ha tenido en cuenta "que el legislador busca la supervivencia del sistema por repartición, teniendo en cuenta además el aumento de la esperanza de vida". También ha explicado que este órgano estudiará el próximo 3 de mayo una nueva propuesta de referéndum, pero con una cuestión diferente a la planteada hasta ahora.
Alrededor de la sede del Consejo Constitucional, en el número 2 de la Rue Montpensier, se ha desplegado un cordón policial para evitar posibles disturbios. La Policía parisina ha dispersado a los manifestantes congregados en la plaza del Ayuntamiento, donde han quemado mobiliario urbano mientras protestaban contra la decisión de los jueces.
Las protestas no solo se han producido en la capital, también en otras ciudades como Marsella, Nantes, Estrasburgo, Rennes o Lyon, entre otras, con incidentes en algunas de ellas.
"El Consejo ha juzgado, tanto en el fondo como en el procedimiento, que la reforma es conforme con nuestra Constitución. El texto llega al final de su proceso democrático", ha dicho la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, en su cuenta de Twitter tras la publicación del dictamen. "Esta tarde no hay ni ganadores, ni perdedores", ha añadido.
El ministro de Trabajo francés ha adelantado que la reforma será implementada desde septiembre.
Para la presidenta de La Francia Insumisa, Mathilde Panot, la decisión supone un "precedente peligroso", ya que el Gobierno podría seguir utilizando la figura legal de un presupuesto rectificativo para "hacer aprobar reformas importantes".
"La entrada en vigor de esta reforma marcará la ruptura definitiva entre el pueblo francés y Emmanuel Macron", ha dicho por su parte la ultraderechista Marine Le Pen.
12 jornadas de incansables protestas
La que fue la propuesta estrella del presidente francés durante la campaña de las pasadas elecciones, en las que revalidó su mandato, ha despertado una oleada de movilizaciones en toda Francia con hasta doce jornadas de protestas ciudadanas en todo el país.
La última fue la del jueves, en la que, aunque participaron menos personas que en anteriores convocatorias, se concentraron un millón de asistentes, según la CGT, y 380.000, según la Prefectura. Los sindicatos, sin embargo, ya habían advertido de que las protestas continuarían, incluso aunque el Consejo avalara la reforma.
Según las últimas encuestas, más de un 60% de la población francesa respalda las movilizaciones contra la reforma, que se alargan desde hace tres meses. Además, según datos de Ipsos, la popularidad del presidente francés ha ido a la baja en los últimos meses, con un 28% de opiniones favorables, según su último sondeo.
Macron propone una reunión con los sindicatos el martes
El Elíseo ha informado antes de la decisión de la Comisión de la propuesta del presidente Macron de reunirse con los sindicatos franceses el próximo martes.
El Jefe del Estado ha invitado al diálogo "sin condiciones previas" e "independientemente de la decisión del Consejo Constitucional".
La tramitación de la ley llevó al Ejecutivo a enfrentarse a dos mociones de censura impulsadas por distintas alas de la oposición en la Asamblea Nacional, a las que sobrevivió por un estrecho margen de 9 votos.