La guerra de Ucrania reaviva la industria de defensa española: el 8x8 'dragon' y un submarino, los grandes emblemas

• España, Francia y Alemania están inmersas en la fabricación del futuro avión de combate previsto a partir de 2040
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Nave de construcción de los submarinos S-80 en Cartagena (Murcia).

En el astillero de Cartagena llevan más de un siglo fabricando submarinos. Al principio solo construían lo que otros países habían diseñado, pero con el paso del tiempo comenzaron a participar también en la creación del proyecto.

Lo hicieron con la empresa francesa DCN hasta que la compañía española, ahora Navantia, decidió navegar sola y tener 'autoridad de diseño', es decir, poder definir, diseñar y fabricar el producto de principio a fin.

Un proyecto a punto de naufragar

Programa S-80 es el nombre que dieron a este proyecto para la construcción de cuatro submarinos. Su andadura ha soportado grandes tormentas y estuvo a punto de naufragar en 2013 por un problema de sobrepeso. Antes de terminar de construir su estructura comprobaron que pesaba más de lo debido y que no se iba a poder sumergir.

"Todo lo que llevábamos hasta entonces hubo que pararlo y poner de nuevo en marcha la ingeniería, como si estuviéramos, no comenzando de cero, pero sí con un impacto muy relevante. Hablamos de revisar prácticamente dos terceras partes del diseño", afirma Germán Romero, director del Astillero de Navantia en Cartagena del Programa S-80. "Aprovechando esa situación -añade- se modificaron una serie de cosas y se incorporaron una serie de capacidades adicionales para finalmente tener un mejor submarino".

“El S-80 va dotado de misiles que están destinados a la lucha contra buques de superficie“

Entre esas capacidades se encuentra un sistema integrado de combate que se controla desde la cámara de mando, donde se dan todas las órdenes. "Es un sistema de armas muy novedoso comparado con lo que teníamos en los submarinos S-70. Permite el lanzamiento de armas que antes no podían lanzarse. El S-80 va dotado de misiles que están destinados a la lucha contra buques de superficie y también está preparado para la incorporación de misiles tácticos de ataque a tierra".

Varias semanas sumergido

Uno de los retos en la construcción de un submarino siempre ha sido encontrar un sistema de combustible que le permita permanecer más tiempo sumergido. Eso lo convierte en menos vulnerable porque es más difícil de localizar.

La serie S-80 incorpora un sistema de Propulsión Independiente del Aire (AIP) basado en hidrógeno que le permite estar en inmersión varias semanas, frente a los tres días de los submarinos que utiliza ahora la Armada. Además de ser de mayor tamaño, en los S-80 estará todo más automatizado, lo que significa que el número de marinos a bordo se reducirá a la mitad y será más cómoda la convivencia a bordo.

El coste total de este programa se acerca a los 4.000 millones de euros. Una cifra mayor que la inicial. El primer submarino de esta serie, el S-81, se entrega a la Armada este año, con una década de retraso pero con unas mejoras, que según Navantia, le servirán para competir en los mercados internacionales.

En estos momentos se encuentra en lo que denominan pruebas de puerto y de mar. Confirma Germán Romero que Navantia es "el número diez del reducido club de diseñadores de submarinos". Un club al que solo pertenecen diez países.

La fábrica de armas en activo más antigua de España

Los abuelos, el padre y la hermana de Valentín Álvarez trabajaron en la fábrica de armas de Trubia (Asturias). Él es la quinta generación de su familia en Santa Bárbara Sistemas.Trabajar aquí "supone algo muy importante para la gente de este pueblo".

“Las armas existen desde que el hombre existe“

Entró como aprendiz hace más de 30 años y su reflexión es que "las armas existen desde que el hombre existe. Hoy en día el armamento es necesario, es importante tener una buena industria de defensa, no solo por la creación de puestos de trabajo y la creación de riqueza en el país que lo produce, sino también como arma de disuasión".

En esta fábrica de Trubia se está fabricando el 8x8 'dragón' un vehículo de combate sobre ruedas que, según Beatriz Gómez, directora de Operaciones de la compañía "ahora mismo es el producto estrella. Es la columna vertebral en torno a la cual se ha generado toda la estrategia de nuestro Ejército español".

Un vehículo artesanal con mucha tecnología

Gómez explica que "casi prácticamente en menos de un minuto sale un automóvil de una cadena de producción; aquí no, aquí hablamos de otros tiempos, hablamos de otro producto con una elevadísima complejidad".

“El precio de estos vehículos es elevado, oscila entre los dos y los seis millones de euros“

Tan complejo que, si sumamos los tiempos del diseño y la fabricación, pasan una media de diez años para que estén listas las primeras unidades. Eso sí, su vida útil es de unos 40 años, similar a la de los submarinos y los cazas. El precio de estos vehículos es elevado, oscila entre los dos y los seis millones de euros dependiendo de la tecnología que lleven incorporada.

"Son productos que tienen un coste elevado porque tienen mucha tecnología. Se necesita que nuestro ejército esté dotado de la mejor tecnología. Mandamos a los conflictos -argumenta Beatriz Gómez- a nuestros soldados y tienen que ir protegidos". Por ese motivo se necesita una industria de defensa.

Barcaza del carro de combate 8x8 'dragón' de Santa Bárbara Sistemas. EMILIA AYALA

Al igual que el submarino de Navantia, en el 8x8 'dragón' Santa Bárbara Sistemas tiene autoridad de diseño. "Y eso es lo que le da una soberanía a España -asegura la directora de Operaciones- para poder decidir en cualquier momento exportar este producto sin tener que depender de terceros". Y las exportaciones, en esta industria, son fundamentales para obtener beneficios y que salgan las cuentas de la inversión inicial.

“Tenemos personal preparado, tenemos tecnología, tenemos tradición y tenemos instalaciones“

"Hay muchas personas que cuestionan el trabajo de fábricas como la de Trubia", afirma Roberto Suárez, economista y gran experto en la historia de esta fábrica. Comparte con Valentín Álvarez su pasión por este lugar y los dos defienden su valor. "Si ese armamento que producimos aquí no se hiciera aquí y nos dedicáramos a hacer otro tipo de obra civil, ese armamento se haría en otro país, el beneficio se iría a parar a otro país", razona Valentín y añade que "tenemos personal preparado, tenemos tecnología, tenemos tradición y tenemos instalaciones. ¿Por qué no vamos a seguir fabricando carros de combate en Trubia?"

FCAS, "el proyecto más ambicioso que tenemos en España"

Aunque ya se han destinado millones de euros al proyecto, todavía no hay una imagen real de lo que algunos califican como la próxima revolución tecnológica de los aviones de combate. Sus siglas inglesas son FCAS (Futuro Sistema Aéreo de Combate Europeo).

“Involucra a toda la industria española integrada y vertebrada a través de un coordinador nacional que es Indra“

"Es claramente el proyecto más ambicioso que tenemos en España, uno de los proyectos al que vamos a dedicar el mayor número de recursos. Muy importante es que involucra a toda la industria española integrada y vertebrada a través de un coordinador nacional que es Indra", afirma Ignacio Mataix, consejero delegado de esta compañía, que es la coordinadora nacional del programa en España en el consorcio que junto con Francia y Alemania se va a encargar de su diseño y fabricación.

FCAS

Prototipo del futuro avión de combate europeo, FCAS. INDRA

El coste de este proyecto es tan elevado que su financiación se aprueba por fases y por el momento está asegurada hasta 2027. Cada país ha invertido ya 2.500 millones de euros. El dinero procede de los presupuestos generales de los tres países que forman este consorcio europeo.

2040, año de partida

"Es un sistema que complementará al Eurofighter que hoy tenemos y digo complementará porque el Eurofighter tiene vida más allá de 2040", explica Ignacio Mataix. Y es 2040 una de las fechas que se han barajado para que este futuro avión de combate esté listo. Aunque, como ha ocurrido con el 8x8 'dragón' y con los submarinos de la serie S-80, es posible que necesiten algunos años más para finalizar el proyecto.

"Lo importante que ha hecho España -dice el consejero delegado de Indra-es estar desde el principio en los programas y con igualdad de participación desde el comienzo, porque es cuando se acaban repartiendo las cargas de trabajo que hacemos cada uno de nosotros".

“En 40 ó 50 años muchas de las armas serán obsoletas y habrá que fabricar nuevas armas dotadas de inteligencia artificial“

Para Tica Font, experta en economía de la Defensa, "esta nueva era en la que estamos entrando, con el uso de la inteligencia artificial y la robótica, va a representar un cambio en el mundo similar al que fue la industrialización y un cambio de era que va a cambiar en muchísimas cosas la vida cotidiana, la vida civil y también la vida militar. Estas nuevas tecnologías dejarán obsoletas las armas conocidas hasta ahora. Estamos entrando en un período que se augura que en 40 o 50 años muchas de las armas serán obsoletas y habrá que fabricar nuevas armas dotadas de inteligencia artificial, armas robóticas, etcétera. Yo creo que eso ya lo estamos viendo en Ucrania, ya estamos viendo el uso de estas armas en los inicios".