Mayor presencia en la costa y solo el 15% en capitales: así se reparten las 50.000 viviendas para alquiler del banco malo

• La Sareb dispone aún de 133.314 inmuebles, de los cuales 46.542 son viviendas ya construidas
• Las viviendas en su propiedad se reparten por todo el territorio nacional, aunque de forma muy desigual

España tiene 290.000 viviendas de alquiler social, una cantidad "insuficiente", según los expertos

La distribución de las viviendas en poder de la Sareb –el conocido como banco malo– es muy desigual. Ahora que el Gobierno pretende movilizar hasta 50.000 inmuebles en su propiedad con el fin de fomentar el alquiler asequible, se ha puesto el foco en este organismo creado en 2012 a raíz del estallido de la burbuja inmobiliaria para comprar (y posteriormente deshacerse) de los activos inmobiliarios de cajas de ahorro y bancos quebrados en la crisis. Pero, ¿cómo se reparten estas viviendas y dónde se ubican?

El plan del Ejecutivo pasa por incorporar al mercado del alquiler un total de 50.000 inmuebles a través de tres vías: traspaso a las comunidades y municipios de viviendas disponibles para su venta y adecuación de aquellas en las que sea necesario (21.000); inmuebles habitados actualmente por personas en situación de vulnerabilidad, que pasarían a formar parte del programa (14.000); y construcción de nuevas viviendas en terrenos de su propiedad en los que se trabajaría conjuntamente con el sector privado (15.000).

Según la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, el Gobierno ya trabaja con las comunidades autónomas y los ayuntamientos para poner en marcha el plan lo antes posible. Y ha destacado que la Sareb ya ha cerrado acuerdos de colaboración con nueve gobiernos regionales y 33 consistorios.

Cabe recordar que, aunque la Sareb se creó en 2012, no fue hasta el año 2022 cuando pasó a ser controlada por el Estado, al hacerse con una participación de más del 50%. Su entrada conllevó un aumento de deuda de 34.000 millones de euros para el Estado, por lo que el objetivo del Gobierno ahora es por "aprovechar el 100% de los activos", ha añadido Calviño, también con "la cesión de suelos para construir hospitales, escuelas, aparcamientos y otros servicios públicos".

Cuenta con más de 46.000 viviendas construidas...

Pese a la adquisición por parte del Estado, la Sareb mantiene la misión con la que fue concebida: dar salida a la totalidad de activos tóxicos que acumuló la banca durante los años de la burbuja inmobiliaria. Y tiene una fecha límite para hacerlo: hasta 2027.

Tal como recoge Efe, el organismo redujo hasta el pasado año un 48% su cartera gracias a la venta de inmuebles, la finalización de promociones, la construcción de nuevas y la firma de acuerdos de colaboración con las administraciones para la cesión y venta de vivienda social. Sin embargo, aún queda mucho trabajo por hacer.

Según los últimos datos de la Sareb, el organismo dispone actualmente de un total de 133.314 inmuebles, de los cuales 46.542 son viviendas ya construidas (el 35% del total) y 24.619 suelos disponibles para su edificación (18,5%). Estos serían, precisamente, los que se utilizarían en el plan aprobado este martes por el Consejo de Ministros. El resto se reparte entre obra en curso, con un total de 14.202 unidades; los llamados inmuebles anejos, como trasteros y garajes, con 34.759; y los terciarios, aquellos destinados a la actividad económica como naves industriales, con 13.192 unidades.

...pero solo el 15% en capitales de provincia

Por comunidades, los inmuebles se reparten por todo el territorio nacional, aunque de forma muy desigual, siendo las regiones de la costa mediterránea (Cataluña, Comunidad Valenciana y la Región de Murcia) las que concentran la mayor parte de sus activos.

La provincia de Barcelona se situaría a la cabeza, con casi 7.000 inmuebles; seguida de Valencia, que ligeramente supera los 4.000; y de Murcia, Tarragona y Castellón, con más de 3.000 viviendas en sus manos. También destaca la Comunidad de Madrid y sus alrededores (como Toledo), que contabiliza una cifra superior a los 2.000 inmuebles disponibles para su venta, aunque es un dato bajo teniendo en cuenta el número de habitantes de la región y los elevados precios de sus alquileres.

Precisamente los datos demuestran que la Sareb apenas dispone de inmuebles en las capitales de provincia, donde el acceso a los alquileres es más complicado. Así, Barcelona solo cuenta con 767 viviendas, mientras que Madrid la cifra se eleva a las 1.189. También destacan las cifras de otras grandes ciudades como Valencia, con 279 viviendas disponibles, o de Sevilla, que no llega a las 50.

En total, de las 46.542 viviendas ya construidas con las que cuenta la Sareb, tan solo 7.087 se sitúan en las capitales. Esto es, un 15% del total.

En este sentido, fuentes del Gobierno a TVE señalan que esta pieza no está orientada a los mercados tensionados e instan a no minusvalorar la importancia de la vertebración territorial y el desarrollo rural con este plan, que tendrá a su juicio un impacto significativo en los territorios con menor población.

Tres de cada cuatro viviendas construidas serán movilizadas

No obstante, no todas las viviendas con las que cuenta el llamado banco malo serán incluidas en este programa de fomento del alquiler asequible. Lo harán 35.000 de ellas, un 75% total.

Por un lado, estarán incluidas las 21.000 viviendas construidas y disponibles para la venta y aquellas que necesiten obras de adecuación, que se movilizarán a través acuerdos de venta a las comunidades autónomas o municipios. Entre otras, se movilizarán 4.950 inmuebles en la Comunidad Valenciana, 3.539 en Cataluña, 2.288 en Castilla y León o 2.093 en Murcia.

También se incluirá la gestión de 14.000 viviendas ya habitadas, en las que se desarrollará una estrategia de alquiler social y de acompañamiento en la inclusión de las familias vulnerables. Actualmente, SAREB está dando apoyo a más de 400 familias y tiene aprobados más de 2.000 contratos de alquiler social desde que inició la labor de identificación de las familias con vulnerabilidad que habitan en sus viviendas, el pasado mes de septiembre, apunta el Gobierno.

Por otro lado, y para alcanzar esas 50.000 viviendas, se pondrá en marcha un proyecto de cesión de suelo urbanizable para la construcción de unas 15.000 viviendas adicionales, que se desarrollará a través de la colaboración público-privada. Según los datos de la Sareb, actualmente cuenta con 24.619 suelos disponibles para su edificación en toda España, con mayor presencia en Valencia (2.916), Castellón (2.198) o Murcia (1.955). Y, de nuevo, la presencia en las capitales de provincia es limitada: tan solo un 15% de ellos, un total de 3.650, se encuentran en las mismas.

España, a la cola de la UE en vivienda social

Actualmente, y según los últimos datos oficiales correspondientes al año 2019, España únicamente contaría con unos 290.000 inmuebles de alquiler social. Muy pocos, según los expertos, fruto de una política de vivienda tradicionalmente enfocada solo a la compra de inmuebles.

De hecho, España se sitúa prácticamente a la cola de la Unión Europea en este tipo de vivienda, ya que tan solo representaría un 2,5% de nuestro parque inmobiliario. Son tres veces menos que la media europea (un 9,3 %) y muy lejos de Países Bajos (con un 30% de parque de vivienda social); Austria (24%) o Dinamarca (20,9%), según datos del Observatorio de Vivienda y Suelo. Por otro lado, en Francia y Reino Unido la cifra está entre un 10 y un 20%, mientras que en el Bélgica es del 5 al 10%.

"Queremos dejar de estar a la cola en lo que se refiere a una política pública de vivienda", ha señalado este martes la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, con el fin de ampliar esa cifra hasta el 20% y colocarse al nivel de otros países: "No solo estar a la media de esos recursos de vivienda pública en Europa, sino que queremos estar a la cabeza", ha añadido.

Críticas de la oposición

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, por su parte, ha tildado de "trampantojo" el anuncio, pues a su juicio el 40% de estas 50.000 viviendas de la Sareb están ocupadas o son solares y el 60% restante son viviendas que nadie quiere porque están inacabadas o en lugares donde no hay demanda ni presión de precios.

En su opinión, para lograr el objetivo del 20 % de vivienda pública harían falta 30 años, hasta 2053, y emplear todas las que se construyen al año en España. "No hay soluciones fáciles para problemas complejos, son medidas populistas e intervencionistas que encarecen los precios", ha insistido el líder popular.

Mientras, la banca considera que ampliar en 50.000 casas el parque público es positivo, pero duda de si se adecuarán a la demanda actual, esto es, con las necesidades de los jóvenes a quien va dirigido este plan. "Habrá que ver si las viviendas de Sareb se pueden adecuar bien a la demanda y a las necesidades que puedan tener las familias en este momento", señaló este lunes la presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), Alejandra Kindelán.