Los combates continúan en Sudán pese al alto al fuego acordado entre el Ejército y las milicias de las FAR
- La tregua de 14 horas comenzaba a las 18:00 hora local, según los medios locales
- En cuatro días de violencia, hay más de 180 muertos y más de 1.400 heridos, según la ONU
Los combates han continuado este martes en Sudán pese a que el Ejército sudanés y el grupo militar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) habían alcanzado un acuerdo de alto el fuego de 24 horas. Este ha sido rápidamente interrumpido por nuevos tiroteos en la región de la capital, Jartum, y otras zonas.
"Por ahora, los combates en Sudán, incluida Jartum y otras zonas, continúan sin señales de una disminución real", ha dicho el portavoz de la ONU Stéphane Dujarric durante su rueda de prensa diaria.
El alto el fuego, que estaba previsto comenzar a las 18:00 hora local y no se extendería más allá de 24 horas, según había confirmado el líder del Ejército de Sudán, Abdelfatah al Burhan, a la cadena estadounidense CNN, así como el miembro del consejo militar sudanés, Shams al Din Kabbashi, a la cadena saudí Al Arabiya.
Anteriormente, el líder de las FAR, Mohamed Hamdan Dagalo alias "Hemedti", ha asegurado en su cuenta oficial de Twitter que aceptaba un armisticio de 24 horas.
Un intenso tiroteo ha resonado durante la retransmisión en directo de varios canales de noticias de las televisiones árabes y algunos residentes han declarado a Reuters que los disparos no habían cesado. Uno de ellos ha asegurado haber oído un ataque aéreo en Omdurman, ciudad hermana de Jartum, en la orilla opuesta del río Nilo.
Ya a primera hora del martes habían sonado disparos en la capital, acompañados del ruido de aviones de guerra y explosiones. Los habitantes de las ciudades vecinas de Omdurman y Bahri han informado de ataques aéreos y de fuego antiaéreo. También se han producido combates en el oeste del país, según la ONU.
El conflicto entre el líder militar de Sudán y su adjunto estalló hace cuatro días, desencadenando lo que las Naciones Unidas han descrito como una catástrofe humanitaria, que incluye el colapso del sistema sanitario. Al menos 185 personas han muerto en los enfrentamientos en todo el país.
Alto el fuego propuesto por Estados Unidos
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se ha entrevistado por separado con el jefe del ejército y con el jefe de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido, para proponer el alto el fuego en el país.
Blinken ha dicho desde Japón que había telefoneado tanto al jefe del ejército, el general Abdel Fattah al-Burhan, como al líder paramilitar, el general Abdel Fattah al-Burhan, y al jefe paramilitar General Mohamed Hamdan Dagalo, conocido como Hemedti, de la RSF, apelando al alto el fuego de 24 horas "para permitir a los sudaneses reunirse con sus familias" y proporcionarles ayuda.
El líder de la RSF, el general Mohamed Hamdan Dagalo, conocido como Hemedti, cuyo paradero no se ha revelado desde que comenzaron los combates, ha anunciado que la RSF aprobó el alto el fuego de 24 horas para garantizar el paso seguro de los civiles y la evacuación de los heridos.
En un mensaje en Twitter, Hemedti ha dicho que había "discutido cuestiones urgentes" con Blinken durante su llamada y que estaban previstas más conversaciones. La RSF también ha emitido un comunicado en el que afirmaba que estaba librando una batalla continua para restaurar "los derechos de nuestro pueblo" en lo que denominó una nueva revolución.
Ataque contra un enviado estadounidense
Blinken ha declarado que los informes iniciales sugerían que el ataque contra el enviado estadounidense había sido perpetrado por fuerzas asociadas a la RSF, y ha calificado la acción de "temeraria". Afirmó que todo el personal estadounidense se encontraba a salvo tras el incidente, y ha calificado las amenazas a diplomáticos estadounidenses de "totalmente inaceptables".
Subrayando el riesgo que un conflicto prolongado representa para la estabilidad regional, Kabbashi ha explicado que dos países vecinos estaban intentando proporcionar ayuda a la RSF, pero no ha identificado a los países.
A primera hora del martes, los disparos resonaban en la capital sudanesa, acompañados del sonido de aviones de guerra y explosiones, según un reportero de Reuters. Los habitantes de las ciudades vecinas de Jartum, Omdurman y Bahri, también informaron de ataques aéreos que hicieron temblar los edificios y de fuego antiaéreo.
Los combates se han recrudecido en varias regiones del país desde el sábado. La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja declaró que era casi imposible prestar servicios humanitarios en los alrededores de la capital. Advirtió de que el sistema sanitario del país corría riesgo de colapso.
Varios desaparecidos europeos, según Borrell
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha dicho este martes que tras el estallido de los combates en Sudán el pasado sábado hay "varios desaparecidos" europeos "que no se sabe dónde están".
"Sabemos que hay varios desaparecidos, más o menos, que no se sabe dónde están. Desaparecidos", ha puntualizado Borrell en declaraciones a EFE desde la sede del Parlamento Europeo en Estrasburgo, sin dar más detalles sobre su nacionalidad concreta.
El alto representante ha confirmado también que tanto el embajador de la Unión Europea en Sudán, Aidan O´Hara, como el personal de la delegación "están bien", pese al asalto que el diplomático sufrió el lunes en su residencia.
"Por desgracia, no es lo mismo que centenares y centenares de sudaneses que han muerto, víctimas civiles y militares de un conflicto entre dos generales disputándose el poder", ha dicho Borrell.