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¿Cómo combatir un golpe de calor? Comer ligero, hidratarse bien y evitar las bebidas alcohólicas

  • Las altas temperaturas llegan con fuerza y aumentan el peligro de sufrirlos
  • Entre sus síntomas están el enrojecimiento de la piel, dolor de cabeza, naúseas o fatiga

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Las altas temperaturas llegan con fuerza y aumenta el peligro de sufrir golpes de calor

Llegan unas temperaturas insólitas para este mes de abril y con ellas los posibles problemas de salud ocasionados por el calor. En muchos puntos de España se van a alcanzar récords para esta época. Por ello, es fundamental tomar las precauciones necesarias para evitar sustos. Además, los agricultores y ganaderos deben tener máxima precaución ante este aumento de las temperaturas.

Entre las principales recomendaciones, más propias de la época estival que de primavera, están las de vestir con ropa clara, realizar comidas ligeras, hidratarse bien y evitar las bebidas alcohólicas.

¿Cómo identificar un golpe de calor?

Lo normal es que el cuerpo humano se encuentre entre los 36 y 37 grados para gozar de una buena temperatura corporal. Si, por el contrario, se alcanzasen los 40 grados, la piel se percibiese caliente o se padeciese fatiga continuada, hay que prestar especial atención ante la posibilidad de estar sufriendo un golpe de calor.

SUMMA 112: "Hay que evitar llegar al golpe de calor, ya que puede causar la muerte" - Escuchar ahora

"Lo que vamos a notar es una temperatura corporal muy elevada por encima incluso de los 40 grados. Como cuando tenemos fiebre", afirma Marián García, farmacéutica y nutricionista.

Además, el cuerpo mandará una serie de señales muy características cuando esté sufriendo un episodio de golpe de calor: "Notaremos nuestra piel caliente, seca y enrojecida. También nos va a doler la cabeza. No podemos olvidar la aparición de náuseas, fatiga, pero también, la confusión mental, el aturdimiento, llegando incluso a perder el conocimiento", si se diese este último caso, la experta recomienda llamar al 112.

¿Cómo combatirlo?

Una de las claves principales para combatirlo es hidratarse correctamente: "Beber agua es fundamental", y si es a pequeños sorbos, mejor.

Existen otras recomendaciones que se pueden realizar de una manera sencilla en el día a día y pueden ser muy efectivas: "Evitar las bebidas alcohólicas, realizar comidas ligeras, usar ropa que transpire y colores claros", explica la experta. Durante la próxima semana se espera que se alcancen hasta quince grados por encima de lo normal para esta época del año.

Consejos para prevenir la insolación y los golpes de calor

Una vez se haya hidratado correctamente el cuerpo, lo siguiente que se debería hacer es buscar un lugar fresco para guarecerse de las altas temperaturas.

Especial atención a mayores y niños

Los niños menores de cuatro años, mujeres embarazadas y personas mayores o que estén tomando medicación o padezcan enfermedades crónicas son las más vulnerables: "Los más pequeños y las personas mayores no tienen bien desarrollada la sensación de sed. Por tanto, tienen que beber agua por prescripción, porque no van a tener sed como nosotros, hay que ofrecerles líquidos. Beber gazpacho también es muy útil".

En los días con temperaturas elevadas hay que tener una especial precaución con los menores. Se deben tener en cuenta algunos síntomas, como la fiebre alta, la puerta de entrada del golpe de calor. Lo primero que hay que hacer es bajarles la temperatura.

Para muchos agricultores y ganaderos, el calor se convierte en una auténtica pesadilla. El uso de sombreros o gorras pueden ayudar a sobrellevarlo: "Hay que ir con ropa ligera, con calzado fresco y traspirable. Es recomendable llevar una gorra y gafas de sol".

Por otro lado, hay horas en el día que es preferible tomarse un descanso para tomar un tentempié o reposar y esperar a que pase el calor extremo de la jornada: "La temperatura más alta del día es a las cinco de la tarde, no a las doce del mediodía como se suele pensar", concluye Marián García.

Unas temperaturas que reflejan que el cambio climático está mandando señales y que desembocan en una situación que, según los expertos, "es noticia por la rareza del evento" pero que entra dentro de "las proyecciones de cambio climático" que también avisan de que estos episodios cada vez serán más frecuentes en un futuro no muy lejano.