Alemania tardará "varias semanas" en analizar el material recogido en un embalse portugués por el caso Madeleine

• La presa de Arade era un lugar frecuentado por el principal sospechoso, el alemán Christian Brueckner
• La niña desapareció hace 16 años cuando se encontraba junto a su familia de vacaciones en el Algarve

Imagen de archivo de la busca de pistas sobre la desaparición Madeleine McCann en el embalse de Arade, Portugal.

Las autoridades alemanas tardarán "varias semanas" en analizar el material recogido durante las labores de rastreo en torno al embalse de Arade (Portugal) en el marco de la investigación sobre la desaparición de la niña británica Madeleine McCann hace 16 años.

El fiscal alemán Hans Christian Wolters ha indicado además que la investigación liderada por Alemania ha incluido "otras búsquedas" más allá de la presa de Arade.

"Trabajamos continuamente en este caso, pero no todo lo que hacemos se hace público", ha precisado.

Otra imagen de la búsqueda de material en la presa portuguesa.

En este sentido, ha asegurado que hubo "buenas razones" para ordenar un nuevo rastreo en torno a la presa, si bien las autoridades alemanas no han llegado a precisar las razones concretas detrás de la búsqueda, ha informado la cadena BBC.

Efectivos portugueses, alemanes y británicos han trabajado en la zona durante esta semana.

Christian Brueckner, el principal sospechoso

La Policía Judicial de Portugal confirmó el jueves que el material recogido sería entregado a Alemania "de conformidad con las normas de cooperación judicial internacional".

Las autoridades lusas establecieron un amplio perímetro y prohibieron que sobre la zona -situada a unos 50 kilómetros de Praia da Luz, el lugar en el que se perdió la pista a la menor cuando se encontraba junto a su familia de vacaciones en el Algarve-, sobrevolasen aeronaves, incluidos drones.

Una fotografía de Madeleine McCann en 2007 EFE/LUSA/LUIS FORRA

El caso adquirió un nuevo rumbo en 2020, cuando la Policía alemana identificó a Christian Brueckner como el único sospechoso de la desaparición de McCann.

Este hombre, de 45 años, se encuentra cumpliendo condena y tiene pendiente también otro juicio por delitos sexuales perpetrados supuestamente entre 2000 y 2017.