'Mocro Maffia', la nueva mafia de la droga que opera en el corazón de Europa

• La expresión 'Mocro Maffia' se refiere al origen marroquí de los neerlandeses que integran la organización criminal
• Este grupo de delincuentes utiliza las viejas rutas del hachís para introducir cocaína en Países Bajos y Bélgica
• Este sábado, a las 21:00 horas, en RTVE Play y La 2 de TVE volvemos a emitir el documental 'La Mocro Maffia'

La "Mocro Maffia" controla el tráfico de la cocaína en Bélgica y los Países Bajos. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

El presunto cabecilla de la banda criminal 'Mocro Mafia', Karim Bouyakhrichan, que estaba en búsqueda en Países Bajos por su amenaza de muerte a la princesa heredera al trono de Holanda, Amalia de Orange, ha conseguido fugarse este martes tras una descoordinación policial y judicial.

Al hilo de la actualidad hemos recuperado el documental emitido por Documentos TV en el que se explica quiénes son estos delincuentes radicados en Países Bajos pero de origen magrebí, la violencia con la que actúan y cómo tienen amenazados, entre otros, a la heredara al trono y al expresidente del país, Mark Rutte.

Países Bajos y Bélgica se han convertido en los nuevos escenarios de los cárteles de la droga en Europa. Casi el 80% de la cocaína que se consume en el Continente pasa por los puertos de Rotterdam y Amberes y este tráfico ha dado lugar a la 'Mocro Maffia', una nueva organización criminal dirigida por neerlandeses de origen marroquí que mueven miles de millones de euros.

Quienes la persiguen conocen su violento modus operandi contra todo aquel que se atreve a desafiarla. Por de pronto, ha conseguido aterrorizar a las, hasta ahora, tranquilas y seguras sociedades neerlandesa y belga.

El periodista Woulter Laumans con su libro sobre esta organización criminal, la "Mocro Maffia". © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

Rotterdam y Amberes, los puertos de la cocaína

En menos de diez años, Países Bajos y Bélgica se han convertido en las principales vías de entrada de la cocaína en Europa, los nuevos terrenos de juego del narcotráfico donde la 'Mocro Maffia' se mueve a sus anchas.

Un barco entra al puerto belga de Amberes, uno de los más grandes e importantes de Europa. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

El puerto de Rotterdam, el mayor del Continente, es la base desde donde actúa esta organización criminal neerlandesa. Por aquí pasan cada año 30.000 barcos procedentes de todo el mundo y las autoridades estiman que se introduce, oculta en los contenedores, entre el 50 y el 80% de la cocaína que se consume en Europa.

Contenedores descargados en el estratégico puerto de Rotterdam, Países Bajos. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

En torno al desmesurado tráfico de droga surgió la 'Mocro Maffia', extremadamente violenta y poderosamente armada, que controla este sucio negocio en los Países Bajos y que ya ha logrado instalarse también en Bélgica, convertida desde 2021, en un nuevo centro europeo de distribución de cocaína.

Alijo de cocaína incautado en el puerto neerlandés de Rotterdam. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

Por algo, la carretera que une los puertos de Amberes y Rotterdam es conocida como la autopista de la droga. Por allí, circula mucho dinero al año. Al mismo tiempo que la policía federal y las autoridades portuarias aseguran que las incautaciones de cocaína se han multiplicado por 30 en diez años, advierten de que este dato representa, apenas, el 10% de la droga que entra en el país.

De los idílicos canales al miedo en las calles

Los investigadores que conocen bien el violento modus operandi de la 'Mocro Maffia' revelan que esta organización criminal hace su multimillonaria fortuna a golpe de asesinatos, extorsiones e intimidaciones. "Con esos miles de millones de euros se mantiene toda una estructura de corrupción donde las vidas no tienen valor alguno", sostiene el fiscal federal belga, Frédéric Van de Leeuw.

Dicho y hecho. El 6 de julio de 2021, el prestigioso periodista de la televisión neerlandesa, Peter R. de Vries, fue asesinado en plena calle del centro de Amsterdam cuando salía de los estudios donde grababa su programa.

El periodista Peter R. de Vries, asesinado por la "Mocro Maffia" antes del sepelio. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

Llevaba varios meses trabajando en un reportaje sobre la Mocro Maffia. La banda criminal había puesto precio a su cabeza. "En los Países Bajos haríamos bien en ser menos ingenuos y reconocer que lo que ocurre en Italia también ocurre en nuestras calles", manifestaba Dilan Yesilgöz-Zegerius, ministra de Justicia de Países Bajos.

Abogados, magistrados, periodistas saben que los narcotraficantes de la 'Mocro Maffia' no están dispuestos a que nadie se enfrente a ellos. "Si alguien tiene que morir, morirá, no importa si está con su mujer o con su hijo", avisa la mano derecha de uno de los jefes de esta organización criminal neerlandesa.

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El exprimer ministro, amenazado

La apacible y tranquila sociedad neerlandesa ha dejado de serlo. La 'Mocro Maffia' no permite que nadie les desafíe. El exprimer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, lo ha podido comprobar de primera mano cuando aún dirigía el país.

Un hombre llora por la muerte del periodista De Vries en las calles de Amsterdam. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

Hasta que anunció que iba a destinar más de 400 millones de euros para luchar contra los narcotraficantes, el político se movía en bicicleta por la ciudad y le gustaba acercarse a la gente.

“En este juego no hay reglas“

Semanas después, la policía descubrió que miembros de la mafia neerlandesa le seguían y le amenazaron. "En este juego no hay reglas", sentencia Vito Shukrula, uno de los abogados favoritos de la 'Mocro Maffia'.

En Bélgica, ocurre lo mismo. Bandas que luchan entre sí para controlar el ventajoso negocio de la cocaína, tiroteos, asesinatos, ajustes de cuentas, actos a los que la policía no se había enfrentado nunca antes. "Una delincuencia organizada que quiere aterrorizar y hacerse con el poder mediante la violencia", admite Van de Leeuw.

Redada de la policía belga contra el narcotráfico en la autopista entre Amberes y Rotterdam. © SABLE ROUGE - PATRICK SPICA PRODUCTIONS

Se calcula que, sólo en Amberes, el tráfico de cocaína mueve 50.000 millones de euros, el equivalente a cinco veces el presupuesto de la ciudad. La mafia del narcotráfico es rica y no duda en poner a los pies de los caballos a todo un estado.

El ministro de Justicia belga, Vincent Van Quickenborne advierte que, "si cedemos ante los criminales como sociedad, acabaremos como algunos países sudamericanos, es decir, como un narcoestado donde la mafia de la droga está por encima de la ley y lo dicta todo". Ha sido amenazado de muerte en dos ocasiones.