Los incendios forestales en España provocaron los niveles más altos de emisiones en marzo

• Así lo ha resaltado un informe del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus
• También destacaron las emisiones en América Central, en Eurasia y en Canadá

Un bombero trabaja en la extinción de un incendio forestal en la Laguna de El Portil, en Punta Umbría, Huelva

El Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus ha advertido que el comienzo temprano de los incendios forestales en el hemisferio norte ha provocado un aumento de las emisiones por esta causa, problemática en la que destaca el caso de España. El país experimentó los niveles más altos de los que se tiene constancia en un mes de marzo, al nivel de los derivados de los fuegos producidos en 2012.

Según el informe de Copernicus, la población que sufrió los mayores incendios forestales fue la región norte de Asturias, donde cerca de 135 fuegos quemaron unas 11.000 hectáreas entre el 23 de marzo y el 1 de abril. Durante ese tiempo se registraron concentraciones muy elevadas de material particulado grueso (PM10) o partículas inhalables llegando a valores entre los 60 y ls 80 µg/m3 en algunas estaciones. La Unión Europea, sin embargo, considera que no se deben superar los 50 µg/m3 para preservar la salud humana.

También en Galicia se quemaron en marzo 1.662 hectáreas, pero fue en la Comunidad Valenciana donde se registró el mayor de los incendios y el número más alto de emisiones. Su región oriental vivió el primer gran fuego del año en España, aquel que se declaró el jueves 23 de marzo cerca de Villanueva de Viver y que arrasó con unas 4.700 hectáreas en las provincias de Castellón (Valencia) y la vecina Teruel (Aragón).

Esos datos, ha apuntado Copernicus, no son habituales en un momento tan temprano del año, sino que han sido provocados por las altas temperaturas y las condiciones de sequía.

América Central. Eurasia y Canadá: otros de los territorios más afectados

Por otro lado, los investigadores han destacado también que América Central registró incendios estacionales ligeramente superiores a la media entre marzo y mayo, situación que supuso el desplazamiento de algunos penachos de humo hacia Norteamérica y el Atlántico norte.

Durante el pasado mes de mayo se produjeron también importantes incendios forestales en dos regiones distintas del hemisferio norte: Eurasia y el oeste de Canadá. En Eurasia, los fuegos afectaron a Kazajistán, a Mongolia y a algunas zonas fronterizas de Rusia, como Kurgán, Tiumén, Omsk y Novosibirsk.

En el oeste de Canadá, por su parte, destacó una importante actividad de incendios forestales en la Columbia Británica, en Alberta, en Saskatchewan y los en Territorios del Noroeste. Asimismo, a finales del mayo se batieron récords en los Territorios del Noroeste y Nueva Escocia.

Pero la situación fue especialmente extrema en Saskatchewan, donde se superaron las 23 megatoneladas de emisiones a causa de los fuegos frente a las dos megatoneladas máximas que hasta ahora se habían alcanzado