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EE.UU., Reino Unido y Francia critican a Rusia pero no le atribuyen el ataque a la presa

  • Los países han insistido en que sin la invasión lanzada por Moscú este desastre nunca se habría producido
  • Sus servicios de inteligencia están tratando de obtener información y Rusia quiere que la ONU investigue el incidente
  • Guerra entre Rusia y Ucrania, en directo

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Una imagen de satélite muestra un primer plano de la presa e instalación hidroeléctrica de Nova Kakhovka, Ucrania.
Una imagen de satélite muestra un primer plano de la presa e instalación hidroeléctrica de Nova Kakhovka, Ucrania.

Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, las tres potencias occidentales del Consejo de Seguridad de la ONU, han evitado este martes atribuir a Ucrania o Rusia la responsabilidad de la voladura de la presa de Kajovka, aunque han insistido en que sin la invasión lanzada por Moscú este desastre nunca se habría producido.

Ese ha sido el mensaje que los tres países han dejado en una reunión del máximo órgano de decisión de Naciones Unidas, convocada de urgencia tras la destrucción de esta infraestructura situada en la región sureña de Jersón y de la que Ucrania y Rusia se acusan mutuamente.

En sus discursos, los representantes de Washington, Londres y París han subrayado la gravedad de la situación y han insistido en la idea de que todo ello, incluido el desastre de la presa, deriva de la guerra lanzada por Moscú hace más de un año.

"La destrucción de la presa es otra víctima de la brutal invasión rusa de Ucrania. Quiero dejar totalmente claro que fue Rusia quien inició esta guerra, fue Rusia quien ocupó esta zona de Ucrania y fueron fuerzas rusas las que tomaron ilegalmente la presa del año pasado y han estado ocupándola desde entonces", ha indicado el enviado estadounidense Robert Wood.

En una línea similar se han pronunciado los embajadores del Reino Unido y Francia, que han considerado la ruptura de la presa como otra consecuencia de la invasión rusa y han pedido una vez más a Moscú la retirada inmediata y sin condiciones de sus fuerzas.

Los servicios de inteligencia están buscando información

En declaraciones a los periodistas a su llegada a la reunión, tanto Wood como el representante británico James Kariuki han reconocido que sus países por ahora desconocen quién voló la presa y ha destacado que sus servicios de inteligencia están tratando de obtener información. "Compartiremos lo que podamos en cuanto podamos", ha dicho Kariuki, que señaló que en el pasado Rusia ha llevado a cabo "operaciones de falsa bandera" y que no duda en que volverá a hacer acciones de este tipo.

Wood, por su parte, ha insistido en que Ucrania no tiene motivos para destruir una presa en su propio país, pero tampoco quiso culpar directamente a Rusia.

El embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, ha insistido ante el Consejo de Seguridad en que Ucrania fue quien voló la instalación y se ha mostrado a favor de que la ONU investigue el incidente y ha recordado que su país ya buscó sin resultado que la organización internacional iniciase pesquisas sobre otros como el sabotaje del gasoducto Nord Stream.

Pero ni Nebenzia, ni el embajador ucraniano ante la ONU, Sergiy Kyslytsya, que también intervino en la sesión tras todos los miembros del Consejo, han podido aportar ninguna prueba que incriminase al rival por la voladura de la presa.

El secretario general de la ONU, António Guterres, ha revelado que la ONU "no tiene acceso a información independiente sobre las circunstancias" de la destrucción de la presa, y se abstenido de señalar a ninguno de los países. "Pero una cosa está clara: esta es otra consecuencia devastadora de la invasión rusa de Ucrania", ha matizado.

Rusia asegura que Ucrania ya declaró su intención en diciembre

Además, Nebenzia, ha asegurado que Ucrania ya había declarado en diciembre su intención de volar la presa de Nueva Kajovka, en el río Dniéper, y cita un artículo del diario 'The Washington Post' en el que se afirma que las Fuerzas Armadas ucranianas habían incluso probado ataques con misiles HIMARS contra una de las esclusas de la presa de Novokajovskaya.

Además, durante su discurso en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU ha recordado que Rusia ya había advertido en un documento publicado en octubre en el Consejo de Seguridad de la posibilidad de este ataque.

Por su parte, el representante permanente de Ucrania ante Naciones Unidas, Sergíy Kyslytsya, ha tachado de "predecible" la declaración de Rusia y les ha acusado de usar la "misma técnica" de culpar a otros de sus crímenes, y ha puesto los ejemplos de Mariúpol, Bucha, Izium y la central nuclear de Zaporiyia.

"Permítanme señalar que Rusia ha estado controlando la presa y toda la central de Kajovka durante más de un año. Es físicamente imposible hacerlo estallar de alguna manera desde el exterior mediante bombardeos. Ha sido minado por los ocupantes rusos. Y lo han volado por los aires", ha manifestado Kyslytsya durante su intervención.

80 localidades en Jersón corren peligro

La presa de la central hidroeléctrica de Kajovka, a 60 kilómetros de la ciudad de Jersón, fue destruida el martes durante la madrugada y ha dejado completamente inundadas al menos ocho asentamientos en Jersón, y otros 80 corren peligro; se espera que la extensión máxima de territorios inundados se alcance entre tres y cinco días.

Ucrania pierde otra infraestructura clave con la voladura de la presa de Nova Kajovka

Ucrania ha asegurado que, aunque las inundaciones han afectado a ambos bandos, el lado ucraniano sufrirá "ocho veces más" que el ruso.

Las autoridades de ambos países han comenzado a evacuar a los habitantes de las zonas afectadas. "La destrucción de la central hidroeléctrica ya ha provocado un desastre ecológico: docenas de asentamientos río abajo del Dniéper están inundados, el embalse de Kajovka y el Canal de Crimea del Norte, que suministra agua a la península de Crimea, se están volviendo poco profundos", ha descrito Nebenzia.

"En otras palabras, Kiev una vez más se ha dispuesto a vengarse de Crimea por su elección a favor de Rusia, y dejar a la población de Crimea sin agua. Tampoco descartamos un intento implícito de provocación contra la central nuclear de Zaporiyia", ha asegurado la parte rusa.