Puigdemont pide al Supremo "revocar" su procesamiento y la Fiscalía le acusa de usar "artimañas" para eludir la justicia
- La defensa del expresidente catalán ha pedido anular las órdenes nacionales de detención
- La Fiscalía dice que solo está disponible para la justicia "cuando le beneficia", es decir, "para recurrirlo todo"
El expresidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, ha pedido este jueves en el Tribunal Supremo "revocar" su procesamiento por el 'juicio del procés', mientras que la Fiscalía le ha acusado de usar "artimañas" para "liar" y "empantanar" la acción de la justicia, una situación que consideran "un abuso de derecho y un fraude procesal" tras estar "cinco años desaparecido" eludiendo a los tribunales.
El fiscal Javier Zaragoza se ha manifestado así en la vista en el Tribunal Supremo para resolver los recursos de apelación de Puigdemont y de los exconsejeros, Toni Comín y Lluís Puig, contra la decisión de mantener su procesamiento por malversación y desobediencia -Clara Ponsatí solo por el segundo- acordada por el magistrado Pablo Llarena, tras la reforma del Código Penal.
La defensa del expresidente ha pedido anular las órdenes nacionales de detención y revocar el procesamiento de Puigdemont y de los exconsejeros para "que se adapte el procedimiento a la realidad gestada por el poder ejecutivo y legislativo" porque "ninguno es responsable del desaguisado de una reforma penal deplorable".
En su opinión, el auto de procesamiento ha quedado "desfasado" y obsoleto debido al "transcurso del tiempo y algunos hechos" tales como la sentencia del procés y la reforma penal que deroga la sedición y modifica el delito de malversación, que ha situado este procedimiento en "un escenario de embrollo procesal".
Puigdemont pide "reordenar esto"
"Es el momento de reordenar esto", ha dicho el abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye. Pero la Fiscalía ha respondido que lo único que pretenden los políticos es "liar más procesalmente el asunto para seguir planteando nuevas batallas" en los tribunales cuando "todo este empantanamiento procesal no ha sido obra del tribunal, ni de la Fiscalía ni de la Abogacía, ha sido obra de los recurrentes".
Y todo esto "cuando desde hace cinco años han desaparecido" y "solo están a disposición de la Justicia para aquello que les beneficia", es decir, "para recurrirlo todo", siendo "la única vez en la historia que un rebelde ha podido ejercer todos los derechos y no ha adquirido ninguna carga ni ninguna obligación".
Por eso, ha rechazado también el planteamiento de la defensa de Puigdemont dejando claro que será en los escritos de acusación cuando se concrete y valore la tipicidad de los hechos.