Enlaces accesibilidad

El Gobierno de Sudán declara 'persona non grata' al jefe de la misión de la ONU en el país, Volker Perthes

  • ​En mayo, decenas de personas se manifestaron frente a su residencia en el país para reclamar su "expulsión inmediata"
  • Al menos 13 personas han muerto y 20 han resultado heridas cerca de la base de la misión de la ONU

Por
El humo se eleva sobre Jartum, en Sudán, mientras continúan los combates entre el ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido paramilitares.
El humo se eleva sobre Jartum, en Sudán, mientras continúan los combates entre el ejército sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido paramilitares.

El Gobierno de Sudán ha anunciado este jueves que ha declarado 'persona non grata' al jefe de la Misión Integrada de Asistencia para la Transición de la ONU en Sudán (UNITAMS) Volker Perthes, en medio de los combates entre el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).

El Ministerio de Exteriores sudanés ha notificado oficialmente al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, de que Perthes ha sido informado de la decisión, que ha entrado en vigor este mismo jueves.

A principios de mayo, decenas de personas se manifestaron frente a la residencia del enviado de la ONU en el país para reclamar su "expulsión inmediata".

Manifestaciones y amenazas de muerte

Durante los últimos meses, personas afiliadas con el Ejército y con grupos islamistas sudaneses han protagonizado diversas manifestaciones contra Perthes, que ha sido además objeto incluso de amenazas de muerte.

De hecho, Naciones Unidas mostró en abril su "profunda preocupación" por un vídeo que circula en redes sociales en el que un hombre reclama una 'fatua' (edicto islámico) que le permita asesinar a Perthes, jefe de la Misión Integrada de Asistencia para la Transición de la ONU en Sudán (UNITAMS).

Además, no es la primera vez que las autoridades sudanesas muestran su rechazo al enviado de Guterres, ya que el jefe del Ejército y presidente del Consejo Soberano de Transición, Abdelfatá al Burhan, pidió el año pasado a Perthes que dejase de "interferir en los asuntos internos" del país, amenazándole con la expulsión del territorio del país africano.

El país africano estaba gobernado antes del estallido de los combates por una junta liderada por el jefe del Ejército, Abdelfatá al Burhan que tenía como 'número dos' al cabecilla militar de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, alias 'Hemedti'. Las discrepancias entre ambos sobre la integración paramilitar en un futuro Ejército unificado --acuerdo previo a la formación de un nuevo gobierno de unidad liderado por civiles-- acabaron degenerando en el conflicto que actualmente se vive en el país.

Al menos 13 muertos cerca de la base de la misión de la ONU

Al menos 13 personas han muerto y 20 han resultado heridas por la violencia intercomunitaria que ha tenido lugar este jueves cerca de la base de la Misión de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS), que se encuentra ubicada en la capital del estado de Alto Nilo, Malakal.

La misión ha señalado en un comunicado que la violencia estalló durante la madrugada entre dos comunidades desplazadas que se refugian en el centro de la ONU para la protección de civiles (Sitio de Protección de Malakal).

Debido a la cercanía del incidente con las oficinas del organismo internacional, los heridos han sido trasladados a un hospital de la UNMISS, donde están recibiendo tratamiento médico.

"Durante los enfrentamientos de la semana pasada, el personal militar y policial de mantenimiento de la paz reforzó su despliegue inmediatamente para calmar la situación. Hoy, poco después de oír los disparos, hemos desplegado más efectivos sobre el terreno", ha explicado el jefe de la misión en el estado de Alto Nilo, Aldred Orono.

Así, Orono ha indicado que "al estar al lado de las fuerzas de mantenimiento de la paz que patrullan habitualmente la zona e interactúan con las comunidades, siempre estamos alerta y preparados para responder con firmeza en cuanto recibimos informes de disturbios".

La UNMISS ha pedido el cese inmediato de las hostilidades, ha instado a las comunidades a ejercer la máxima moderación y está gravemente preocupada por la pérdida de vidas. Sin embargo, ha remarcado que "la responsabilidad principal de proteger a los civiles recae en el Gobierno de esta joven nación".

"Como misión de mantenimiento de la paz, nuestra labor principal es apoyar al gobierno para garantizar la seguridad de los civiles. El primer pilar de la protección es la prevención, pero en Sudán del Sur las tensiones suelen surgir en cuestión de segundos", ha explicado Orono.

En diciembre del año pasado, unas 37.032 personas desplazadas se refugiaban en el Sitio de Protección de Malakal, según el registro de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).