Más armas nucleares y menos diálogo internacional aumentan el riesgo de uso de armas atómicas en el mundo
- El Stockholm Internacional Peace Research Institute (SIPRI) estima que China ha aumentado su arsenal
- EE.UU. y Rusia siguen poseyendo el 90 % de las armas nucleares del planeta
El número de armas atómicas operativas se ha incrementado en el mundo y las nueve potencias nucleares (Estados Unidos, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte) han puesto en marcha programas de modernización de armamento durante el último año, según revela el informe anual del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (Stockholm Internacional Peace Research Institute, SIPRI).
Esto, unido a las tensiones geopolíticas en ascenso y a la falta de mecanismos de diálogo entre potencias, "incrementa el riesgo de que las armas nucleares puedan ser usadas de forma agresiva [no en ensayos] por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial", de forma premeditada o por error, advierte el centro de análisis, con sede en la capital sueca.
La guerra de Ucrania ha afectado a todos los aspectos de las relaciones internacionales, considera el SIPRI, que advierte del "continuo deterioro de la seguridad global" y de que nos dirigimos a "uno de los momentos más peligrosos en la historia de la humanidad".
Más armas nucleares operativas
El número de armas nucleares en estado operativo aumentó en 2022.
Del total estimado de 12.512 cabezas nucleares que existían en el mundo en enero de 2023, alrededor de 9.576 estaban listas para su uso potencial, 86 más que el año anterior (un 1 % más).
De estas, el SIPRI estima que 3.844 cabezas nucleares están desplegadas en misiles y aviones, y que unas 2.000, casi todas pertenecientes a EE.UU. y Rusia, se mantienen en estado de "alta alerta operacional", es decir, que se encuentran ya instaladas en misiles o dispuestas en bases aéreas para ser subidas a bombarderos en cualquier momento.
Solo dos países, Rusia y EE.UU. poseen, conjuntamente, casi el 90 % de todas las armas nucleares del mundo.
Según las estimaciones del SIPRI, EE.UU. posee 1.770 cabezas nucleares desplegadas y 1.938 almacenadas. De ellas, 3.508 son estratégicas y 200 no estratéticas o tácticas (de menor potencia, y pensadas para ser usadas en el campo de batalla).
Rusia tiene 1.674 ojivas desplegadas y 2.815 almacenadas. De ellas, 2.673 son estratégicas, y 1.816 tácticas.
El SIPRI supone que el tamaño de sus arsenales ha permanecido estable el último año, aunque reconoce que, tras la invasión de Ucrania, la transparencia sobre las armas nucleares se ha reducido.
China incrementa su arsenal
China, por su parte, aparece en tercer lugar. Su arsenal se ha incrementado en 60 cabezas nucleares (410 en total) y se espera que continúe aumentando, a la que vez que desarrolla su potencial de misiles balísticos intercontinentales.
"China ha comenzado una expansión significativa de su arsenal nuclear", asegura en el informe del SIPRI Hans M. Kristensen, investigador asociado del centro y director del Proyecto de Información Nuclear de la Federación de Científicos Americanos (FAS). "Cada vez es más difícil conjugar esta tendencia con las declaraciones de China de que su objetivo es solo tener el mínimo de fuerzas nucleares necesario para su seguridad nacional", añade.
Tanto Reino Unido como Francia han anunciado públicamente su intención de invertir en nuevos programas y en modernizar su arsenal. El gobierno británico, además, anunció que dejaría de revelar datos sobre el tamaño de su arsenal.
Por su parte, India, Pakistán e Israel parecen estar también expandiendo o modernizando sus arsenales, mientras Corea del Norte sigue priorizando su programa nuclear en su estrategia de seguridad nacional. Pyongyang podría tener unas treinta ojivas, según el SIPRI.
Amenazas de uso y riesgo de error
"La mayoría de los estados con armas nucleares están endureciendo su retórica sobre la importancia de las armas nucleares, y algunos incluso han amenazado explícita o implícitamente con su uso potencial", señala Matt Korda, investigador asociado del SIPRI y también miembro de la FAS.
"Esta competición nuclear elevada ha incrementado dramáticamente el riesgo de que las armas nucleares puedan ser usadas de forma agresiva por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial", advierte.
El aumento de la tensión geopolítica y la falta de canales de comunicación entre potencias aumenta a su vez el riesgo de "errores de cálculo, malentendidos y accidentes" hasta niveles "inaceptablemente altos", asegura por su parte Dan Smith, director del SIPRI.
"Hay una necesidad urgente de restaurar la diplomacia nuclear y reforzar los controles internacionales de armas nucleares", pide Smith.
Hay que recordar que el pasado febrero Rusia suspendió su participación en el tratado de control de armas Nuevo START, el único en vigor para la reducción de armas nucleares.
La guerra de Ucrania deteriora la seguridad internacional
El anuario del SIPRI, que este año llega a su 54ª edición, revela que la seguridad global se ha deteriorado en 2022, sobre todo por el impacto de la guerra de Ucrania.
Sin embargo, el centro recuerda que no es el único gran conflicto en el mundo, y que las tensiones y la falta de confianza entre potencias habían aumentado mucho antes de la invasión rusa.
"Nos dirigimos hacia uno de los periodos más peligrosos en la historia de la humanidad", advierte el director del SIPRI. "Es imperativo que los gobiernos del mundo encuentre maneras de cooperar para calmar las tensiones geopolíticas, ralentizar la carrera de armamentos y gestionar las consecuencias cada vez peores del colapso medioambiental y el aumento del hambre en el mundo".