Francia denuncia una campaña de desinformación organizada por Rusia
- Han detectado 355 dominios que asumían la identidad de medios de comunicación
- Exponen que han lanzado una acción multifacética para revertir una narrativa antifrancesa
Francia ha denunciado este martes que una campaña de desinformación vinculada a Rusia ha falsificado la página web del ministerio de Asuntos Exteriores y ha usurpado varios medios de comunicación galos. Los países occidentales han acusado en varias ocasiones a Rusia de utilizar las redes sociales e Internet para difundir información falsa y así dirigir la opinión pública a favor del Kremlin.
Francia ha denunciado en particular las actividades rusas en África y ha afirmado que actores vinculados a Moscú han intentado desprestigiar a París en África Occidental, saturando los medios de comunicación y las redes sociales.
Eso ha llevado al gobierno francés a lanzar una acción multifacética para revertir una narrativa antifrancesa que, según expone el Ejecutivo, socava su influencia y sus intereses.
"Esta campaña se basa especialmente en la creación de falsas páginas de Internet para piratear la identidad de medios de comunicación nacionales y sitios web gubernamentales, así como en la creación de cuentas falsas en
redes sociales", ha declarado la Ministra de Asuntos Exteriores, Catherine Colonna.
Aseguran que se ha usado un dominio muy parecido al del nombre del Ministerio de Asuntos Exteriores, en una práctica conocida como typosquatting. Aunque la mayoría del contenido era el mismo, se publicó un artículo que sugería que el gobierno francés se disponía a imponer un impuesto para recaudar fondos para la ayuda militar a Ucrania contra la invasión rusa.
Campaña de desinformación
Los expertos han detectado 355 dominios que asumían la identidad de medios de comunicación. Entre ellos están el '20 Minutos' Le Monde' 'Le Parisien' y 'Le Figaro' y de los que salieron 58 noticias.
Según el Ejecutivo francés, la campaña tenía varios objetivos. La creación de sitios web con contenidos denigrantes para los funcionarios ucranianos, la usurpación de la identidad de medios de comunicación nacionales y sitios web, así como la creación de cuentas falsas, principalmente en Facebook y Twitter.
Moscú ha negado sistemáticamente haber llevado a cabo estas operaciones de piratería, pero el Ministerio de Asuntos Exteriores francés asegura que, aunque no puede atribuir directamente los ataques a las autoridades rusas, las embajadas del país y los institutos culturales rusos han difundido esta información.