Una manifestación ecologista contra el tren de alta velocidad Lyon-Turín deja una docena de policías heridos
- Se oponen al proyecto porque consideran que destruirá valles alpinos y generará grandes cantidades de escombros
- Las autoridades han incautado más de 400 objetos peligrosos durante los controles previos
Una manifestación no autorizada convocada por colectivos ecologistas contra la construcción del tren de alta velocidad Lyon-Turín ha desembocado este sábado en varios incidentes con la policía antidisturbios francesa. Más de 2.000 manifestantes, según las autoridades, 4.000, según los convocantes, han protestado en la región francesa de Saboya, en los Alpes franceses. Al menos 12 agentes han resultado heridos en los disturbios.
Varios colectivos ecologistas se oponen al proyecto porque consideran que destruirá valles alpinos y porque los túneles generarán grandes cantidades de escombros. Respaldada por la Unión Europea, esta nueva línea, lanzada hace más de 30 años para unir las dos ciudades de Francia e Italia, incluye un túnel de 57,5 km a través de los Alpes y vías de acceso aún en discusión. Según sus detractores, el proyecto es "faraónico" y "perjudicial" para la biodiversidad y los recursos hídricos.
La vanguardia de la manifestación ha mantenido enfrentamientos con agentes enviados a la zona, a los que han lanzado diversos tipos de proyectiles mientras que los policías ha respondido con material antidisturbios.
Posteriormente los manifestantes han cortado la carretera A43, lo que ha provocado la intervención de la Policía y los doce heridos entre las fuerzas de seguridad, ha informado el ministro del Interior, Gérald Darmanin. El tráfico en una línea de tren regional ha quedado interrumpido por la presencia de manifestantes en las vías. El prefecto de Saboya , François Ravier, ha informado más tarde de un manifestante lesionado en una pierna.
Varios políticos electos de la izquierda y ecologistas han acudido a la concentración, entre ellos Mathilde Panot, presidenta del grupo de La Francia Insumisa en la Asamblea Nacional.
"Se ha formado un 'black block' de unas 300 personas"
El ministro de Interior ha explicado que "96 extranjeros conocidos por las autoridades fueron rechazados en la frontera. Se incautaron más de 400 objetos peligrosos durante los controles previos a la frontera. Apoyo a los 12 gendarmes heridos", ha resumido en un tuit Darmanin.
"Se ha formado un 'black block' de unas 300 personas que han lanzado objetos contra las unidades de la fuerza móvil", ha relatado el prefecto de Saboya. Ravier ha explicado que se hicieron controles antes de la convocatoria, lo que permitió a los agentes incautarse "cientos de armas tales como cuchillos, martillos y bombonas de gas".
Los organizadores, por su parte, hablan de "varios heridos" entre sus filas durante la concentración convocada por una decena de movimientos, entre ellos los Levantamientos de la Tierra y los No-Tavs italianos.
Reducir la emisión de gases, ¿a qué coste?
El objetivo del proyecto de la vía férroviaria de alta velocidad es reducir el flujo cada vez mayor de vehículos pesados para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero.
La Administración defiende que aliviará las carreteras alpinas de un millón de vehículos pesados. También señalan el desarrollo económico que supondrá una línea ferroviaria más rápida.
Los opositores, en cambio, señalan que el transporte de mercancías por ferrocarril no ha dejado de disminuir en los últimos años. También denuncian el impacto medioambiental de este "titánico proyecto ferroviario, que implica la perforación de 260 km de túneles a través de los macizos alpinos".
Según ellos, las obras ya han secado varios manantiales y captaciones de agua del valle. El coste global estimado del proyecto ha pasado de 12.000 millones de euros en 2002 a 26.100 millones, según el Tribunal de Cuentas de París en 2012.