Trump presionó al gobernador de Arizona para que anulara el triunfo de Biden
- Pidió a Doug Ducey que intentara buscar evidencias de fraude para desacreditar la victoria del demócrata
- Estas revelaciones se producen cuando se intensifica la batalla por la nominación para ser el candidato del Partido Republicano
El expresidente de Estados Unidos Donald Trump presionó a finales de 2020 al entonces gobernador de Arizona, el republicano Doug Ducey, para que anulara el triunfo electoral del demócrata Joe Biden, según han informado este sábado el diario The Washington Post y la cadena CNN.
Trump había perdido en el estado de Arizona por menos de 11.000 votos y supuestamente pidió a Ducey que intentara buscar evidencias de fraude para desacreditar la victoria de Biden, según han dicho a The Washington Post y CNN fuentes familiarizadas con las conversaciones entre Trump y Ducey.
Concretamente, los dos tuvieron una llamada telefónica en la que Trump pidió a Ducey que revirtiera los resultados electorales de Arizona.
Ducey dijo a la prensa en diciembre de 2020 que había tenido una conversación telefónica con Trump, pero el contenido de la misma se desconocía hasta ahora.
Llamada parecida a la que mantuvo con el secretario de Estado de Georgia
La llamada telefónica de la que informaron este sábado los medios es parecida a la que mantuvo Trump con el secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, tras los comicios de 2020.
En esa ocasión, Trump pidió a Raffensperger que "buscara" los votos que fueran necesarios para anular la victoria de Biden, según un audio de la llamada que hizo público entonces The Washington Post.
En este caso, no existe una grabación de la llamada entre Trump y Ducey, que dejó la gobernación de Arizona en enero de este año.
Estas revelaciones se producen cuando se intensifica la batalla por la nominación para ser el candidato del Partido Republicano para las elecciones presidenciales de 2024, en las que Biden optará a la reelección como candidato del Partido Demócrata.
Hay 14 aspirantes a la nominación en el campo republicano y, aunque Trump parte como favorito, se enfrenta a políticos de gran peso como el gobernador de Florida Ron DeSantis y el que fuera su vicepresidente Mike Pence.