Los 'carteros de la guerra' que llevan las pensiones a los jubilados: "Aquí no quedan bancos abiertos"

• Los funcionarios de Correos acuden al punto de encuentro ataviados con chalecos antibalas
• No hay bancos y la guerra ha destruido cualquier forma de pago electrónico en estas zonas
• Guerra entre Rusia y Ucrania, en directo

El personal de Correos ucraniano lleva las pensiones a los jubilados de Chasiv Yar

La guerra de Ucrania ha cambiado muchas cosas para los habitantes de zonas cercanas al frente. En Chasiv Yar no quedan cajeros ni bancos abiertos. Los rusos la bombardean constantemente porque está en la vía de suministros que mantiene el frente de Bajmut, a unos 15 kilómetros. Los pocos jubilados que siguen allí dependen, para cobrar sus pensiones, de unos funcionarios a quienes consideran auténticos héroes: los carteros.

En el centro de la ciudad, los funcionarios del servicio de Correos ucraniano se colocan el chaleco antibalas, y luego piden el documento de identidad a unos jubilados.

"Para hacer más rápido el proceso, mi compañera apunta lo que hay que pagarles en un papel y yo les entrego el dinero, porque aquí no quedan bancos abiertos para cobrar sus pensiones", cuenta a TVE Hana. Con ese dinero, pueden comprar artículos de primera necesidad, que también les traen.

La guerra ha destruido cualquier forma de pago electrónico

Ya sea para conseguir alimento o cobrar sus pensiones, los pocos civiles que quedan en Chasiv Yar tienen que desplazarse hasta el punto al que acuden los funcionarios de Correos para recoger en mano el dinero, ya que la guerra ha destruido cualquier forma de pago electrónico.

“"No puedo pagar el alquiler si me evacúan a otro sitio, por eso sigo aquí"“

Antes de la guerra, la ciudad tenía unos 13.000 habitantes. Ahora solo quedan poco más de 1.000, la mayoría, jubilados que no tienen adonde ir.

"Con las 2.000 grivnas que cobro (unos 50 euros) de mi pensión no puedo pagar el alquiler si me evacúan a otro sitio. Por eso sigo aquí", explica una anciana que sigue en la ciudad pese al conflicto.

Para ellos, los empleados de Correos como Hana, que les llevan la poca pensión que cobran, se han convertido en auténticos héroes.

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