El BCE estima que la inflación en la zona euro se mantendrá por encima del 2%
- Su vicepresidente, Luis de Guindos, ha indicado que ello requerirá que la política monetaria y fiscal trabajen en la misma dirección
- Ha defendido que la entidad seguirá subiendo los tipos de interés para reducir la inflación al objetivo del 2%
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, ha destacado este viernes en Londres que la inflación durante un tiempo, a pesar de que se ha moderado, lo que requerirá que la política monetaria y fiscal trabajen en la misma dirección.
En un discurso en la universidad King's College de Londres, De Guindos ha hablado de la política monetaria en la eurozona y ha hecho un repaso sobre los principales motores del fuerte impulso de la inflación en 2022, que en octubre de 2022 llegó al 10,6%. El vicepresidente del BCE ha recordado que los precios de la energía han sido los principales impulsores de este incremento, pero también ha mencionado la disminución de la inflación vista en los últimos meses.
Se estima que la inflación siga bajando de forma paralela a la caída de los precios energéticos, ha añadido De Guindos, que también ha resaltado que los expertos prevén una caída al 5,4% en 2023, mientras que en 2024 puede bajar al 3% y al 2,2% en 2025. De hecho, a finales de abril, el vicepresidente del BCE ya indicó que la institución no podría permitirse un repunte de la inflación, ya que eso podría dañar su credibilidad.
Además, los expertos del Eurosistema han revisado ligeramente a la baja las perspectivas de crecimiento económico de la eurozona para los próximos dos años, por lo que se espera que la economía se desacelere al 0,9% en 2023 antes de recuperarse al 1,5% en 2024 y al 1,6% en 2025, a medida que se moderan los precios de la energía, ha añadido.
Seguirá subiendo los tipos para reducir la inflación
El vicepresidente del banco europeo ha señalado que, como respuesta al incremento de la inflación en 2022, el BCE empezó a endurecer su política monetaria en varias fases para asegurar que la inflación vuelva al objetivo de situarla en el objetivo del 2%. "El entorno actual de alta inflación requiere que la política monetaria y fiscal trabajen en la misma dirección. A medida que caen los precios de la energía y disminuyen los riesgos en torno al suministro de energía, es importante que las medidas gubernamentales de apoyo relacionadas con la energía se reduzcan para evitar que aumenten las presiones inflacionarias a mediano plazo", ha dicho.
De Guindos ha añadido que las decisiones futuras que tome el BCE "garantizarán que los tipos de interés oficiales del BCE se lleven a niveles suficientemente restrictivos para lograr que la inflación vuelva a tiempo a nuestro objetivo a medio plazo del 2% y se mantendrán en esos niveles durante el tiempo que sea necesario".
El Consejo de Gobierno del BCE ha subido el tipo de referencia (el que cobra a los bancos por los préstamos a una semana) al 4% y ha elevado también en 0,25 puntos básicos la facilidad de crédito (a la que presta a los bancos a un día), hasta el 4,25%, y la facilidad de depósito (a la que remunera a los bancos el exceso de reservas a un día), hasta el 3,5%.