De 'la niña' de Rajoy al 'buenas noches y buena suerte' de Zapatero: los momentos de 30 años de debates electorales

• El de Sánchez y Feijóo este lunes es el quinto 'cara a cara' de un presidente y un líder de la oposición de la democracia
• Debate electoral: resumen y reacciones del cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo

Felipe González y José María Aznar estrenaron los debates electorales en 1993.

Los debates electorales son un clásico en la campaña de cualquier elección que se celebra en España, aunque no hay ninguna ley que obligue a ello a nivel nacional. Esta tradición, que se inauguró en 1993 con los primeros encuentros televisados entre Felipe González y José María Aznar siguiendo la estela de los grandes debates estadounidenses, ha dejado momentos icónicos como el ”buenas noches y buena suerte” de José Luis Rodríguez Zapatero o “la niña” de Mariano Rajoy. En los últimos años, motivado por el multipartidismo, el formato ha evolucionado hacia la inclusión de más contrincantes, pero la campaña de este 23J sí volverá a contar con el clásico ‘cara a cara’ entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición.

Y es que Pedro Sánchez (PSOE) y Alberto Núñez Feijóo (PP) confrontarán directamente este lunes en Atresmedia, el primer debate a dos que se celebra desde 2015, ya que el modelo no cuajó en la campaña de las generales de la repetición de 2016 ni en los comicios de abril y noviembre de 2019.

Los debates son una perfecta ocasión para confrontar propuestas y desmarcarse de los rivales, como ha ocurrido tradicionalmente. Echando la vista atrás, estos son los debates celebrados hasta la fecha y los momentos que han dejado.

1993: González y Aznar estrenan el formato

González y Aznar inauguraron los debates de la reciente democracia española en 1993. Era toda una novedad y se seguía el modelo de EE.UU., si bien nuestras elecciones son legislativas y no presidencialistas, como allí, pero el estreno demostró ser un éxito rotundo.

Tras unas negociaciones muy difíciles que estuvieron a punto de fracasar sobre quién llegaría antes a los estudios, la temperatura, la altura de las sillas o la prohibición de planos cortos y perfiles, se acordaron dos debates en televisiones privadas. El primero fue en Antena 3, moderado por Manuel Campo Vidal, y una semana después se celebró otro en Telecinco moderado por Luis Mariñas.

La expectación fue máxima. El primero de los debates, que abrió Aznar, fue visto por nueve millones de espectadores. El líder del PP se lo había preparado a conciencia con sus asesores y resultó vencedor según todas las crónicas ante un González que le había infravalorado. El lunes siguiente, ambos se volvieron a ver en otro encuentro más crispado que alcanzó los 10,5 millones de espectadores y, esta vez, el presidente del Gobierno salió vencedor según la opinión pública. De las elecciones de aquel año salió victorioso el PSOE.

2008: Zapatero frente a Rajoy, y “la niña” que se coló en el debate

Tuvieron que pasar 15 años para un segundo ‘cara a cara’ entre presidente y líder de la oposición, ya que no se celebró ninguno para las generales de 1996, del 2000 y del 2004. En 2008, el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y Mariano Rajoy, emularon a González y Aznar y se enfrentaron en dos debates organizados por la Academia de la Televisión, un territorio neutral acordado por los responsables de la campaña de ambos partidos. Y ambos protagonistas lograron un récord de audiencia con 13 millones de espectadores, cifra que no volvió a ser superada.

Del primero de aquellos debates entre Zapatero, que trataba de revalidar un gobierno que empezó en 2004, y Rajoy, que había estado cuatro años liderando la oposición tras la marcha de Aznar, se hizo célebre la ya famosa “niña de Rajoy”. Y es que el entonces aspirante nos hizo imaginar a una niña que nacía en España y para la que él deseaba que tuviera “una familia, una vivienda y unos padres con trabajo”, entre una lista de derechos. No hubo consenso sobre si aquella niña del debate fue un “acierto” o un “ridículo”, puesto que dependió del prisma de cada uno. Eso sí, Rajoy acabó metiendo a esa niña en los mítines de campaña.

El primer debate, moderado por Campo Vidal, fue brusco y Rajoy acusó a Zapatero de de haber “agredido” a las víctimas del terrorismo. Tras aquel encuentro hubo otro debate moderado por Olga Viza que ha pasado al imaginario colectivo por la forma en la que se despidió Zapatero en su minuto de oro final: “Buenas noches y buena suerte”. Una frase que a muchos les pasaría desapercibida pero que era recordada tras usarla el periodista de la CBS Ed Murray en su debate frente al senador republicano estadounidense McCarthy. Esa misma frase era el título de una película dirigida por George Clooney basándose en el enfrentamiento del periodista y parlamentario norteamericanos. Tras este último debate, el PSOE aumentó la ventaja que le daban los sondeos y acabó imponiéndose en las elecciones.

2011: Rajoy y Rubalcaba con la crisis económica como protagonista

En 2011, Alfredo Pérez Rubalcaba se estrenaba como candidato del PSOE a las elecciones tras la renuncia de Zapatero. En aquella campaña, solo se celebró un debate entre él y Rajoy, que seguía al frente de la oposición. Esta vez estuvo también presentado por Campo Vidal en la Academia de la Televisión.

El cara a cara entre Rubalcaba y Rajoy ha dejado algunas propuestas de ambos candidatos y muchas críticas a las del partido contrario. La reforma laboral, la prestación por desempleo, la sanidad pública o la educación provocaron los mayores enfrentamientos. La economía y el empleo han centrado el primero de los tres bloques del primer y único cara a cara entre los candidatos de PSOE y PP en esta campaña electoral.

El tema estrella del debate estaba claro: la crisis económica que estalló en 2008 tras el derrumbe de Lehman Brothers y que se extendió por Europa. El paro estuvo también muy presente y, de hecho, el momento más visto fue cuando Rubalcaba le preguntó a Rajoy qué haría con el seguro de desempleo si el 'popular' era elegido presidente. El socialista acusó al candidato ‘popular’ de querer bajar las prestaciones del paro y responsabilizó al PP de la “burbuja inmobiliaria” y Rajoy le respondió llamándole “mentiroso”. Según los sondeos post-debate, Rajoy se impuso aunque por poca distancia en ambos debates y en aquellas elecciones el PP fue vencedor por mayoría absoluta.

2015: debate tenso Rajoy-Sánchez entre acusaciones de “indecente” y “ruin”

2015 supuso un antes y un después en la política española y, por ende, en los debates políticos. Surgían nuevas formaciones que pisaban con fuerza, como Podemos y Ciudadanos, y reclamaban su espacio.

Aún así, se celebró el clásico ‘cara a cara’ entre los dos principales contrincantes: el entonces presidente Mariano Rajoy y el aspirante a La Moncloa, Pedro Sánchez, que llevaba un año al frente de la Secretaría General de su partido. También estuvo moderado por Campo Vidal, ya un referente en los debates electorales.

Aquel debate del 20 de diciembre fue muy bronco y estuvo muy marcado por la corrupción tras salir a la luz en los últimos años casos como la trama Gürtel o los ‘papeles de Bárcenas’. "El presidente del Gobierno tiene que ser una persona decente y usted no lo es", le dijo Sánchez a su rival. Rajoy respondió con un “hasta aquí hemos llegado” y tachó al socialista de “ruin, mezquino, miserable y deleznable”.

Sánchez acusa de "no ser decente" a Rajoy, que le responde que es una acusación "mezquina"

La entrada de otros partidos a los debates y la apuesta por la escenografía

Desde entonces, no ha vuelto a haber más debates a dos entre candidatos a la presidencia del Gobierno. Pero sí que ha habido debates múltiples desde 2015 ante la ruptura del bipartidismo. En 2015, Atresmedia y la Academia de la Televisión organizaron dos debates a cuatro. Al primero asistió la entonces vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría en sustitución de Rajoy, que se enfrentó a Sánchez, Albert Rivera (Ciudadanos) y Pablo Iglesias (Podemos). Incluso la Universidad Carlos III y el diario El País organizaron sendos debates con los candidatos de la entonces nueva política: Iglesias y Rivera.

Los debates a cuatro se volvieron a repetir con en 2016 ante la repetición electoral con un encuentro entre Rajoy, Sánchez, Rivera e Iglesias en la Academia de la Televisión.

Rajoy repele las críticas en un debate que no aclara cómo evitar unas terceras elecciones

Y el escenario se fragmentó más en 2019 con la entrada en escena de Vox (que había logrado unos meses antes entrar en el parlamento andaluz). Para las generales de abril, se celebraron dos debates a cuatro consecutivos (uno el día 23 y otro el 24) en los que se estrenaba Pablo Casado al frente del PP. Santiago Abascal no participó por decisión de la Junta Electoral Central, puesto que Vox no tenía representación en el Congreso. El primero de esos debates fue en RTVE y estuvo moderado por Xavier Fortes, mientras que el segundo fue en Antena 3 conducido por Ana Blanco y Vicente Vallés. Aquellos debates dejaron bien clara la existencia de dos bloques (con el ‘no es no’ de Rivera a Sánchez), con dardos también a posibles aliados para erigirse como el voto útil.

Debate a cinco para las generales de noviembre de 2023 con Sánchez, Casado, Rivera, Iglesias y Abascal. EFE

Las elecciones generales de noviembre de 2019 ya sí contaron con Santiago Abascal en un debate con los cinco principales candidatos en la Academia de Televisión. La repetición electoral y la amenaza de un nuevo bloqueo estuvieron muy presentes en aquella cita, en la que los posibles socios en los respectivos bloques mostraron aún más recelos que en la campaña de abril. El desafío independentista y el miedo a la extrema derecha estuvieron muy presentes en aquel debate.

En aquellos comicios, Sánchez ganó las elecciones, pero con un resultado inferior al de las elecciones de abril, al igual que ocurrió con Unidas Podemos. Para evitar un nuevo bloqueo y unas terceras elecciones, se apuró en cerrar un pacto con Pablo Iglesias para una coalición de gobierno que dura a día de hoy.

Ahora, Sánchez llega a estos debates como presidente del Gobierno. De los rivales que tenía en 2019, solo permanece Abascal después de que la política arrollara los liderazgos de Casado, Rivera e Iglesias. Desaparecido Ciudadanos, está por ver cómo se defiende en los debates del 23J con Feijóo y Yolanda Díaz, con quien mantiene una buena relación pero compite en votos.