Robles se opone al envío de bombas de racimo de EE.UU. a Ucrania: "No se pueden entregar en ningún caso"

• La titular de Defensa ha explicado que se trata de una iniciativa unilateral de EE.UU. que no se desarrolla en el marco de la OTAN
• Ha asegurado que la posición de España es clara: "no a las bombas de racimo y sí a la ayuda a la legitima defensa a Ucrania"
• Guerra entre Rusia y Ucrania, en directo

Margarita Robles tras intervenir en un reparto de propaganda electoral del PSOE

La ministra de Defensa y número cuatro en la lista del PSOE para el Congreso por Madrid, Margarita Robles, ha asegurado este sábado que no comparte y se posiciona "en contra" de la decisión de Estados Unidos de enviar bombas de racimo a las Fuerzas Armadas ucranianas. Tras expresar su respeto a las decisiones de "un país soberano", Robles ha explicado que se trata de una iniciativa unilateral de EE.UU. , que no se desarrolla en el marco de la OTAN.

"España, desde el compromiso firme que tiene con Ucrania, tiene también un compromiso firme en que determinadas armas y bombas no se pueden entregar en ningún caso", ha aseverado Robles en declaraciones a los medios de comunicación en un acto del PSOE en Madrid.

Cuestionada por el polémico envío, pues se trata de una decisión que choca con los avisos de Naciones Unidas y que contraviene una convención internacional que prohíbe el uso de este tipo de armamento, la titular de Defensa ha asegurado que la posición de España es clara: "no a las bombas de racimo y sí a la ayuda a la legitima defensa a Ucrania, que entendemos que no se realiza con estas bombas".

La principal característica de este tipo de munición es la liberación de un gran número de pequeñas bombas que pueden matar indiscriminadamente en una amplia zona equiparable a varios campos de fútbol.

A esta capacidad destructiva hay que añadir que estas pequeñas bombas en ocasiones caen al suelo sin explotar, por lo que se convierten en minas antipersona, representando una amenaza para la población durante años e incluso décadas.

Este tipo de munición está prohibida en 118 países (incluido España) bajo la Convención sobre Municiones en Racimo, en vigor desde 2010, pero no en Ucrania, Rusia ni EE.UU., que no han suscrito la declaración internacional.

EE.UU. y Ucrania justifican el envío

Joe Biden ha justificado su "difícil" pero necesaria decisión porque "los ucranianos se están quedando sin munición". El mandatario estadounidense enfatizó este viernes que no es una decisión permanente, sino que estará en vigor mientras Estados Unidos asegura un suministro suficiente de artillería de 155 milímetros, ampliamente utilizada por los sistemas de la OTAN.

Ucrania ha justificado el envío porque "la Federación Rusa ha estado utilizando indiscriminadamente municiones de racimo desde el primer día de la agresión no provocada a gran escala". Además, Kiev se ha comprometido a utilizarlas solo en su territorio, nunca en zonas urbanas y dando prioridad al desminado posterior.