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San Fermín 2023

Los toros de Núñez del Cuvillo dejan un quinto encierro limpio, emocionante y veloz

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Quinto encierro veloz y limpio de San Fermín 2023 con toros de Núñez del Cuvillo

Los de Núñez del Cuvillo:

'Farfonillo' (nº 30 de 555 kg)

'Morito' (nº 103, de 565 kg)

'Ganador' (nº 205, de 565 kg)

'Pesadillo' (nº 81, de 515 kg)

'Encumbrado' (nº 121, de 560 kg)

'Asturiano' (165, de 545 kg)

El quinto encierro de San Fermín 2023 con toros de Núñez del Cuvillo ha sido emocionante, veloz y con momentos de peligro, pero menos atropellado que los cuatro anteriores, más limpio, lo que ha permitido a los mozos hacer bonitas carreras porque la manada se ha estirado dejando huecos desde el inicio.

Los toros de la ganadería gaditana han tardado dos minutos y veintiún segundos en completar el recorrido entre los corrales de Santo Domingo y la plaza de toros de Pamplona, el mismo tiempo que hicieron los toros de Fuente Ymbro este lunes, lejano todavía de la marca histórica de los Miura de 2015, de dos minutos y cinco segundos.

El último parte médico de este quinto encierro ha habido dos traslados de mozos heridos al Complejo Hospitalario de Navarra por politraumatismos.

Uno de los corredores heridos es un vecino de Barberà del Vallès (Barcelona), de 45 años, que ha sido trasladado desde el tramo de Mercaderes con un traumatismo craneoencefálico con herida en la zona occipital. Desde el tramo de Santo Domingo ha sido conducido al hospital el estadounidense K.T., de 38 años, con traumatismo en la pierna derecha, trauma craneal y herida incisa.

En la enfermería de la plaza de toros han sido atendidos otros dos corredores, que no han precisado traslado al hospital.

En el Complejo Hospitalario de Navarra permanecen el mozo herido por asta de toro el pasado día 9, G.F.F., de 48 años de Vila-Real (Castellón) permanece ingresado y evoluciona favorablemente y en observación en urgencias el galés de 60 años B.H., quien este lunes sufrió fracturas costales.

La manada ha salido muy hermanada de los Corrales de Santo Domingo y ha estado liderada casi desde el primer tramo por un toro negro de nombre Farfonillo y 555 kilos de peso que se ha abierto paso a toda velocidad desmarcándose de sus hermanos.

Los bravoz han cruzado velozmente por la plaza del Ayuntamiento hasta la curva de Mercaderes, donde dos toros han resbalado y han chocado contra el vallado, uno de los cuales se ha quedado unos segundos tendido en el suelo.

Un toro negro se desmarca de sus hermanos

Mientras tanto, el toro negro que iba en cabeza se ha separado todavía más de sus hermanos y ha recorrido a toda velocidad la recta de la Estafeta, rodeado por una multitud de mozos.

El resto de la manada llegaba más retrasada, también rodeada por los mozos que intentaban buscar su oportunidad de correr por delante de los astados. Algunos corredores han tropezado y los toros les han pasado por encima. En otras dos ocasiones, en el lado derecho de la Estafeta, las caídas de los corredores han provocado pequeños montones pero lejos de las reses.

Superado el tramo de Telefónica y enfilando hacia la plaza de toros, otro mozo ha tropezado delante de los astados. Después, otro toro ha golpeado con el cuerno a una chica que se encontraba parada de espaldas en la parte derecha del vallado.

Una vez en el interior del coso taurino, las reses han ido entrando una a una en chiqueros sin que se hayan producido momentos de tensión o peligro.

Los Núñez del Cuvillo protagonizaron un primer encierro en 2022 con carreras bonitas y cinco heridos sin gravedad, fue también muy rápido, duró dos minutos y 35 segundos y estuvo marcado por un montón en la plaza.

Es la duodécima participación en los Sanfermines para los astados de Vejer de la Frontera que por la tarde lidiarán los diestros Morante de la Puebla, Alejandro Talavante y Roca Rey.

Toros peligrosos en la carrera

La manada que ha corrido este encierro está formada por tres toros de capa negra, 'Farfonillo' (número 30 de 555 kg), 'Morito' (nº 103, de 565 kg) y 'Ganador' (nº 205, de 565 kg), uno colorado de nombre 'Pesadillo' (81, de 515 kg), un jabonero de nombre 'Encumbrado' (nº 121, de 560 kg), y un jabonero sucio de nombre 'Asturiano' (165, de 545 kg).

La ganadería de Joaquín Núñez del Cuvillo es una de las preferidas por las figuras del toreo por su volumen y juego. El encaste comenzó en 1982, con vacas y sementales de José Luis Osborne Vázquez, al que su propietario, el sevillano Joaquín Núñez del Cuvillo, fue añadiendo reses del Conde de La Corte (a través de Mora Figueroa), Núñez (Sayalero y Bandrés), Marqués de Domecq (Torrealta) y Juan Pedro Domecq.

Son toros de pelaje muy variado: negro, ensabanado, colorado, castaño y jabonero -blanco amarillento, como el de las antiguas pastillas de jabón; puede ser blanco claro o amarillo como la paja, pajizo-. Es un toro con volumen, que se arranca y remata siempre, llegando hasta el final. Por eso es peligroso en la carrera, ya que persigue y no le importa estrellarse en el vallado en pos de quien les cite.