Once niños desaparecen cada semana intentando cruzar el Mediterráneo Central, según Unicef
- La agencia de la ONU calcula que desde 2018 unos 1.500 niños han fallecido o desaparecido en esta ruta migratoria
- Más del 70 % de los menores que llegaron a Europa por esta ruta lo hicieron sin compañía o separados de sus padres
Al menos 289 niños, una media de once a la semana, han muerto o desaparecido este año cruzando el Mediterráneo Central cuando trataban de llegar desde África a las costas italianas, según estimaciones hechas públicas este viernes por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
La agencia de Naciones Unidas para la infancia calcula que desde 2018 unos 1.500 menores han fallecido o desaparecido en esta ruta migratoria, lo que representaría alrededor de una de cada cinco personas desaparecidas en esa vía para llegar a Europa.
Muchos de los naufragios, denuncia la organización, que se producen en la travesía del Mediterráneo Central terminan en la muerte de todas las personas a bordo o simplemente no se registran, por lo que el número real de víctimas infantiles es prácticamente imposible de verificar y probablemente sea mucho mayor.
Muchos naufragios quedan sin documentar
En los últimos meses numerosos niños, niñas y bebés han perdido la vida en esta ruta, en otras rutas que cruzan el Mediterráneo y en la ruta atlántica desde África Occidental. Esto incluye las recientes tragedias ocurridas frente a las costas de Grecia y las Islas Canarias españolas.
Sin embargo, Unicef subraya que muchos naufragios quedan sin documentar, por lo que las cifras son probablemente mucho más altas.
En un comunicado, la organización estima que 11.600 niños -una media de 428 a la semana- han llegado desde África a costas italianas en lo que va de año, el doble que en el mismo periodo de 2022.
La mayor parte cruzan desde Libia y Túnez, en muchos casos tras haber completado ya peligrosos trayectos desde otros países africanos o de Oriente Medio.
"Crear vías seguras y legales para que los niños accedan al asilo"
Según datos de los primeros tres meses de 2023, más del 70 % de los menores que llegaron a Europa por esta ruta lo hicieron sin compañía o separados de sus padres o guardianes legales, lo que les expone a un mayor riesgo de violencia, explotación y abusos, señala Unicef.
"Esta es una clara señal de que hay que hacer más para crear vías seguras y legales para que los niños accedan a asilo y para reforzar los esfuerzos para salvar vidas en el mar", señala en la nota la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell. La agencia también pide a la Unión Europea que garantice que todo lo anterior se refleje en el Pacto de la Unión Europea sobre Migración y Asilo, que se está negociando en estos momentos.
“Esta es una clara señal de que hay que hacer más para crear vías seguras y legales para que los niños accedan a asilo y para reforzar los esfuerzos para salvar vidas en el mar“
En ese sentido, Unicef pide a los Gobiernos, entre otras cosas, más protección para los menores, más coordinación en las operaciones de rescate y más trabajo en los países de origen para reducir el número de personas que huyen de sus hogares.