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La combinación de dos fármacos ofrece resultados similares a la quimioterapia en pacientes con cáncer de vejiga

  • El tratamiento estaría indicado especialmente para aquellas personas que no pueden recibir quimioterapia convencional
  • Lo demuestra un trabajo del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, publicado en Journal of Clinical Oncology

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El urotelial es es el tipo más común de cáncer de vejiga.
El urotelial es es el tipo más común de cáncer de vejiga.

La combinación de dos medicamentos, enfortumab vedotin y pembrolizumab, ha demostrado beneficios en el tratamiento para pacientes con tumor urotelial avanzado que no pueden recibir quimioterapia convencional, según ha corroborado un estudio. El urotelial es es el tipo más común de cáncer de vejiga.

El trabajo científico está en fase II, tiene como nombre EV-103, se ha publicado en la revista Journal of Clinical Oncology y analiza datos de una cohorte específica de pacientes con cáncer urotelial localmente avanzado o con metástasis que no eran aptos para recibir quimioterapia con cisplatino.

La investigación ha contado con el investigador del Grupo de Oncología Clínica del Instituto de Investigación del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona y oncólogo del mismo hospital, el doctor José Pablo Maroto, único autor español del estudio, según ha informado el propio centro este lunes en un comunicado.

La administración de fortumab vedotin y pembrolizumab, que previamente habían demostrado beneficios en la supervivencia en el tratamiento de segunda línea y en casos de cáncer urotelial avanzado, ofrecen resultados comparables a los de la quimioterapia con cisplatino. La principal conclusión del trabajo es que los pacientes que recibieron esta nueva combinación terapéutica mostraron una alta tasa de respuesta y sus efectos fueron duraderos, lo que la postula como una buena opción como tratamiento de primera línea.

Estos resultados representan un avance significativo en el tratamiento del cáncer urotelial avanzado y ofrecen nuevas esperanzas a los pacientes que se enfrentan a esta enfermedad y que no pueden optar a la quimioterapia con cisplatino.

Comparable a la quimioterapia

Los pacientes con cáncer urotelial avanzado o con metástasis que no podían recibir quimioterapia con cisplatino, ya sea por presentar insuficiencia renal, neuropatía periférica, problemas auditivos, cardíacos o mal estado general, recibían un fármaco derivado del carboplatino que ofrece resultados muy inferiores.

"El cisplatino es un fármaco que se elimina por vía renal y que, por tanto, requiere que los pacientes estén bien hidratados. En el caso de los pacientes frágiles o que tienen algún problema renal no podemos indicarlo y, por tanto, no podemos ofrecer el tratamiento óptimo", ha afirmado el doctor Maroto.

Actualmente está en marcha el ensayo clínico fase III confirmatorio que, si cuenta con resultados positivos, sentará las bases para la aprobación en España de esta combinación terapeutica, que actualmente está en proceso de investigación.