El incendio de La Palma, estabilizado después de cinco días con 2.900 hectáreas afectadas
- Sigue habiendo 14 puntos activos que no suponen ningún riesgo, por lo que se mantienen los efectivos de emergencia
- En total, el fuego ha dañado sesenta inmuebles de Puntagorda y Tijarafe, además de 200 hectáreas de Taburiente
El incendio forestal del noroeste de La Palma ha quedado estabilizado este miércoles con una superficie afectada de 2.900 hectáreas, aunque todavía no han sido extiguidos totalmente catorce puntos dentro del perímetro que no suponen riesgo, por lo que no se puede considerar como controlado.
La consejera de Presidencia del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, ha anunciado que no hay frentes activos que puedan extender el perímetro, pero por ahora se mantienen los mismos medios terrestres y aéreos.
El fuego comenzó a las 01:05 horas del sábado en la zona de El Fayal y se extendió con rapidez, lo que obligó a una amplia evacuación de vecinos que ya han podido regresar a sus casas. También ha alcanzado unas 200 hectáreas del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente.
Los vecinos que aún permanecían desalojados pudieron volver a sus viviendas a última hora del martes, según ha informado el Gobierno de Canarias y el Departamento de Seguridad Nacional. Todo ello tras evolucionar el incendio forestal de forma "favorable" durante esta última jornada, ya que la disminución del viento y la retirada de las nubes facilitaron la actuación de los medios aéreos.
Sesenta edificaciones afectadas
Un total de sesenta edificaciones han resultado afectadas por el fuego, que también ha causado daños sobre todo en viñedos. "Ha sido una actuación épica", ha afirmado Nieves Lady Barreto, quien ha recordado que en un primer momento, al declararse el fuego de madrugada, fueron los propios vecinos y el personal de medio ambiente del Cabildo de La Palma los que lucharon contra las llamas.
El viento de 40 kilómetros por hora provocó que se activaran focos secundarios, lo que llevó a las 07:42 horas a activar el nivel dos de incendio forestal, con lo cual el Gobierno de Canarias asumió la coordinación de las labores de extinción. El objetivo principal del operativo fue que el fuego no rebasara la carretera LP-1 hacia la costa, que es donde están las zonas más pobladas, y en lo pocos lugares en los que bajaron las llamas pudieron ser controladas rápidamente.
El fuego ha sido atacado estos cuatro días en tres frentes: el norte, el sur y el de el Parque Nacional de la Caldera de Taburiente. En su estabilización han participado diariamente 500 efectivos desde tierra y once medios aéreos: dos hidroaviones, un avión Air Tractor, siete helicópteros en labores de extinción y un helicóptero de coordinación de la Guardia Civil.
Los hidroaviones van a seguir realizando descargas en los catorce puntos que aún quedan por el interior del perímetro para asegurar su total extinción.
El Gobierno de Canarias ha aprobado las primeras ayudas para muebles y enseres y ha pedido también fondos al Estado, que se canalizarán a través del Cabildo de La Palma. Nieves Lady Barreto ha puesto de relieve la "excelente colaboración" entre las administraciones y la rapidez en la activación de los medios contra el fuego.
Una vez que quede controlado el fuego se hará un perimetraje de la zona afectada y probablemente se reduzca el cálculo de la superficie afectada.