Dormir con el aire acondicionado encendido: inconvenientes y precauciones a tener en cuenta

• Una excesa exposición al aire acondicionado puede provocar faringitis, bronquitis o amigdalitis, según informan los expertos
• Para evitarlo recomiendan poner el modo automático al dormir y por encima de los 24 grados, y también utilizar humificador

El aire acondicionado, un gran aliado contra el calor que puede ser perjudicial

Con el intenso calor y las elevadas temperaturas, el aire acondicionado se ha convertido en un producto estrella que ayuda a conciliar el sueño en las noches más tórridas. Los expertos aconsejan no abusar de ellos ya que pueden producir faringitis o bronquitis.

Ronald Alexander explica que desde electrodomésticos Hermanos López han vendido un 70% más de aires acondicionados y que muchos de ellos los compran para dormitorios.

Inconvenientes de dormir con el aire acondicionado

Estos ayudan a bajar la temperatura y son un gran aliado para evitar el calor, pero también tienen sus inconvenientes. Mientras dormimos, la temperatura corporal baja y alcanza su mínimo, pero cuatro horas después de conciliar el sueño se crea un ambiente demasiado fresco puede llegar a ser perjudicial.

En concreto, Juan Carlos Casado médico de las Sociedad Española de Otorrinolagringología sostiene que las personas tenemos en la nariz una especie de filtros, y al introducir aire muy frío "obligan a trabajan de manera excesiva y cuando fallan suelen aparecen la faringitis, la rinitis o la amigdalitis".

El aire acondicionado puede ocasionar estornudos y resfriados. En concreto, un 20% de los catarros que se dan en verano son por una excesa exposición a estos. Un tercio de los casos puede derivar en una bronquitis según explican los especialistas.

Grupos de riesgo y recomendaciones

Javier de Miguel Díaz, neumólogo de hospital Gregorio Marañón explica que los grupos de riesgo son los niños, las personas mayores y aquellas con patologías cardiorespiratorias crónicas.

Para evitarlo, los expertos aconsejan poner el aire acondicionado para dormir en modo automático, por encima de los 24 grados, con humificador y sin que el aire de directamente a la cara y la piel.