La lucha contra la hepatitis C arroja esperanza en España con 165.000 pacientes curados
- Las hepatitis causadas por los virus B y C provocan más de un millón de muertes en el mundo, según la OMS
- El 80% de pacientes a nivel global no disponen de los recursos suficientes para prevenir, detectar y tratar la enfermedad
Pilar Martínez fue diagnosticada de hepatitis C a los 56 años. “Me notaba muy cansada y al principio no le di importancia”, cuenta a RTVE.es. Al igual que Pilar, Juan Francisco Durán notó que además del agotamiento, adelgazaba mucho y su piel comenzaba a estar de color más amarillo.
Aunque la enfermedad les ha dejado alguna secuela, ambos a día de hoy están curados de la hepatitis C. Como ellos, un total de “165.000 pacientes se han curado en el Sistema Nacional de Salud desde que se aprobó el Plan Nacional de Hepatitis en España en 2015”, explica Javier García-Samaniego, jefe de sección de Hepatología del Hospital Universitario La Paz y coordinador de la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (AEHVE) .
España se acerca a los objetivos de la OMS
Este éxito de curación en España se enmarca dentro del objetivo principal que mantiene la Organización Mundial de la Salud, el de tratar de erradicar las hepatitis víricas en todos los países del mundo para 2030. Este propósito está a punto de alcanzarlo España, ya que cada vez está más cerca de eliminar la hepatitis C, según confirma Manuel Romero, presidente de la AEEH
Aunque el futuro de España con la hepatitis C es esperanzador, las hepatitis virales, fundamentalmente causadas por los virus B y C, provocan más de un millón de muertes en el mundo y más de tres millones de nuevas infecciones al año, según cifras de la OMS. Por ello, y con motivo del Día Mundial contra la Hepatitis, las asociaciones ponen el foco en el tratamiento y diagnóstico de las personas que la padecen pero no lo saben, y en el colectivo más vulnerable.
Diferentes curas y tratamientos para cada virus
Existen cinco virus principales que causan la hepatitis, una enfermedad que produce infección e inflamación en el hígado. Se los clasifica en A, B, C, D y E.
“Los virus de la hepatitis B, C y D son los que producen enfermedad hepática crónica y son aquellos en los que debemos poner más el foco”, señala el especialista García-Samaniego.
En el caso de la hepatitis A, esta no cronifica y existe una vacuna eficaz implantada de forma universal. No sucede lo mismo con el virus B, ya que para este si existe un tratamiento eficaz para inhibir el virus y se están desarrollando nuevos medicamentos, pero el virus es tan complejo que “se necesitarán años de investigación para encontrar una cura”, explica Sabela Lens, investigadora del IDIBAPS y CIBERehs, y hepatóloga del Hospital Clínic de Barcelona.
El futuro para este virus es ambicioso ya que, según explica el doctor García-Samaniego, entre los objetivos de la OMS para 2030 se pretende que el “90% de los recién nacidos estén vacunados”.
La hepatitis C, según explica García-Samaniego, “no tiene vacuna, pero sí cura, a través de los medicamentos de acción directa”, y en el caso del virus D solo aparece en los pacientes que tienen la hepatitis B. Para los pacientes de este tipo si existe un medicamento pero aún no ha sido aprobado en España. Por ello, según sostiene Lens se deben destinar “todas las labores de detección y tenerlo controlado hasta que llegue el fármaco”.
Pero todavía queda mucho camino por recorrer, ya que según detalla la OMS, hoy en día “el 80% de personas con hepatitis en el mundo no pueden obtener los servicios que necesitan para prevenir, detectar y tratar la enfermedad”. Una realidad que es distinta en muchos países, mientras unos avanzan en su tratamiento y cura, otros se estancan.