Dos muertos y 100.000 evacuados tras las peores lluvias caídas en una década en el norte de China
- El tifón Doksuri tocó tierra el viernes por la mañana en la costa de la ciudad de Jinjiang
- Un nuevo tifón, el Khanun, gana fuerza y se acerca a Filipinas
Las autoridades y los residentes del norte de China se encuentran en alerta máxima debido a las lluvias y tormentas más intensas de la última década en la región, que han dejado al menos dos muertos y más de 100.000 personas evacuadas.
Los remanentes del tifón Doksuri, que tocó tierra el viernes por la mañana en la costa de la ciudad de Jinjiang, en la provincia suroriental de Fujian, avanza por el centro y norte del país, según ha informado la agencia estatal de noticias Xinhua.
Según el Centro Meteorológico Nacional de China, la precipitación media en Pekín ha alcanzado los 157,8 milímetros, mientras que en una aldea del distrito suburbano de Fangshan se ha registrado una precipitación máxima que ha superado los 538 milímetros, lo que ha provocado un corrimiento de tierras que ha obligado a evacuar a más de 10.000 residentes.
Las áreas más afectadas en la capital son las regiones oeste, sur y urbanas, lo que ha llevado a la evacuación de más de 45.000 personas y la suspensión de operaciones de más de 200 líneas de autobús y varias rutas de tren en las áreas suburbanas.
Miles de personas evacuadas y el tifón llega a Filipinas
En la provincia de Hebei, las autoridades meteorológicas pronostican que las precipitaciones acumuladas probablemente excedan los 250 milímetros en algunas áreas.
Las ciudades afectadas en la región incluyen Zhangjiakou, Chengde, Tangshan, Baoding, la nueva área de Xiong'an, Langfang y Shijiazhuang, la capital provincial.
Específicamente, la ciudad de Baoding se ha visto duramente afectada por las poderosas inundaciones, lo que ha llevado a la evacuación de más de 54.890 personas.
El nivel de riesgo de inundaciones en el norte de Baoding, donde un puente se ha derrumbado provocando que dos camiones cayeran al agua y una persona desapareciera, ha alcanzado el nivel II, el segundo más alto.
Mientras tanto, un nuevo tifón, el Khanun, se acerca a Filipinas, siguiendo una trayectoria similar a la efectuada por el Doksuri.
Un nuevo tifón gana fuerza
El tifón ha ganado fuerza mientras avanza hacia las aguas del norte del archipiélago, lo que ha generado preocupación en un país que todavía se recupera del impacto del tifón Doksuri, que dejó al menos 25 personas muertas y más de 300.000 damnificados.
Mientras, las autoridades en Pekín han tomado todas las medidas necesarias para proteger a la población y minimizar los daños causados por estas fuertes lluvias y tormentas, ante la previsión de que el fenómeno meteorológico continúe durante los siguientes días en el norte de China y que el tifón Khanun afecte al sur del país.