Cuatro olas de calor y noches que no bajan de los 25 grados: ¿estamos ante un verano extremo?

Una deportisa hidratándose tras hacer ejercicio en una playa de Fuerteventera.

Cuatro olas de calor, noches más cálidas de lo normal que no dejan dormir y al menos tres días con los registros más altos de temperatura desde 1950. Sin lugar a dudas, este 2023 está siendo caluroso, pero ¿es normal el calor que hace este verano?

Hasta ahora, se han registrado 24 días de olas de calor y este 23 de agosto ha sido el día más cálido del verano en España, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Contando esta última ola de calor, que comenzó el domingo pasado, el organismo ha contabilizado cuatro veces más récords de días cálidos (19) de los previstos para este verano. Además, el mismo día 23 se registró la tercera temperatura media más alta desde 1950, fecha en la que comienza la serie histórica. Asimismo, el episodio de calor actual ha dejado tres días (21, 22 y 23) entre los diez más cálidos en este ranking.

Si bien se han batido récords de temperatura, el análisis de los registros de lo que va de verano realizado por DatosRTVE muestra que nos encontramos ante un periodo especialmente caluroso, pero no extremo. De hecho, hasta ahora no se ha superado la situación excepcional de 2022 que, con 42 días de olas de calor y julio como el mes más cálido desde que existen registros, se convirtió en el verano más caluroso de la historia en nuestro país.

Un verano más cálido de lo normal en Canarias, Asturias y Cantabria

Han sido días de altas temperaturas. Desde el pasado 1 de junio, los termómetros han registrado más calor de lo normal en casi todas las estaciones. Para saber si la temperatura de un día ha sido extrema o simplemente más alta de lo normal, se ha adaptado la metodología del científico de la Universidad de las Islas Baleares especializado en el clima, Daniel Argüeso.

Así, se toma como referencia la mediana de las máximas y de las mínimas de ese día, que es el valor que divide por la mitad toda una serie de datos, entre los años 1991-2020. Si la temperatura está por encima de este umbral, el día se considera más cálido que de costumbre. Del mismo modo, si la temperatura sobrepasa el percentil 95, nos encontramos ante un día o una noche extremadamente cálidos, ya que el registro se encuentra entre el 5% más alto de todos los registrados en el periodo de referencia [Ver metodología].

Con este criterio, se puede afirmar que lugares tan distantes como el Puerto de la Cruz, en Tenerife, y San Vicente de la Barquera y el Cabo Peñas, en Cantabria y Asturias, están viviendo un verano significativamente cálido, ya que las máximas han sido excepcionalmente altas durante más de la mitad de los días. Sin embargo, en ningún caso han superado el 60%.

La peculiaridad de los dos enclaves del norte de España reside en que, pese a que sus termómetros no han pasado de los 30 grados, las máximas han sido hasta siete y seis grados más altas de lo normal, respectivamente. Además, el 61% de las noches en San Vicente de la Barquera también han sido más calurosas que de costumbre, mientras que en el Cabo Peñas ha habido mínimas extremas más de la mitad de las noches.

Este mismo fenómeno se ha producido en Zumaia (Gipuzkoa) o A Coruña, con un 83 y un 85% de días más cálidos de lo normal, respectivamente. En el siguiente gráfico, también puede verse cómo sus temperaturas máximas se han desviado más de diez grados por encima de lo habitual en algunas fechas. Por su parte, Barcelona ha vivido un 86% de días de verano cálidos, pero solo seis con temperaturas extremas: el 18 y el 25 de julio y 20, 21 y 22 de agosto, ya en plena ola de calor.

Cádiz, Murcia y Castellón también han pasado un verano especialmente caluroso, aunque sus máximas han estado más próximas a los valores normales. En las estaciones de Tarifa y Águilas, el 80% de los días han sido cálidos, mientras que en Castelló-Almassora, el porcentaje ha superado el 70%. Ahora bien, sus temperaturas máximas de junio, julio y agosto han llegado a superar la normal para esas fechas en 6; 5,6 y 5,3 grados, respectivamente.

Las olas de calor del verano de 2023: ¿son excepcionales?

En los últimos años, hemos vivido algunos de los veranos más cálidos de la historia. Los días en los que la temperatura sobrepasaba los umbrales aumentaban considerablemente y la alerta por ola de calor llegaba a casi todas las comunidades.

“No es excepcional que haya olas de calor porque son momentos puntuales en los que se registran temperaturas más altas de lo normal”, explica Albert Barniol, meteorólogo y presentador de ‘El Tiempo’ de TVE. Las olas de calor son un fenómeno cada vez más frecuente y extenso y, en total, se han informado 116 olas de calor desde el primer registro en 1975.

En la península y Baleares se han registrado cuatro olas de calor este verano, dos en julio y otras dos en agosto, además de dos picos de calor de junio que la Aemet en un primer momento calificó como ola de calor.

Por su parte, Canarias, a pesar de que algunas localidades como el Puerto de la Cruz ha registrado el mayor número de días extremos, solo ha vivido dos ola de calor este año: la que se produjo entre el 10 y el 14 de agosto y la que se ha cerrado entreel 20 y el 24 del mismo mes.

Respecto al año pasado, las olas de calor de este verano están siendo más cortas. Según los registros de Aemet, la primera ola de calor de 2022 duró siete días; la segunda, 18 y la última, 16. Este año, las olas de calor han durado entre cuatro y ocho días, pero, según Barniol, “no hay un motivo definitivo por el que en 2022 las olas de calor fueran más largas que las de 2023”.

Aumentan las noches tropicales en nueve de cada diez estaciones

Albert Barniol aclara que el calor diurno está dentro de lo esperado, a pesar de que en algunas estaciones como la de Valencia Aeropuerto y Calatayud se han batido récords históricos por altas temperaturas. Pero “las noches sí están siendo más cálidas de lo normal”, aclara.

Las noches tropicales son aquellas en las que la temperatura no baja de los 20 ºC -si no bajan de 25 ºC se las llama tórridas- y este verano el número de noches tropicales ha aumentado en nueve de cada diez estaciones. En Canarias, se han registrado más de 30 noches tropicales en lugares como Tazacorte (La Palma), Puerto de la Cruz (Tenerife) o en Mogán y Pájara (Gran Canaria), donde más de la mitad de las noches del verano han sido extremadamente cálidas. En la península también ha hecho mucho más calor de lo normal en Valencia o en Murcia, con un 41 y un 38% de noches con temperaturas extremas en cada caso.

En cuanto a noches más cálidas de lo normal, Fisterra (A Coruña) se lleva la peor parte, con un 85%. Le siguen los aeropuertos de Tenerife Norte y Fuerteventura, 82 y 80%, respectivamente; y Yecla (Murcia) y Ávila capital, ambas con un 77% de noches cálidas.

Las zonas próximas a la costa son las que más noches tropicales registran y, según Barniol, su ubicación geográfica es fundamental. Otros factores que influyen más allá de la latitud y la longitud son el tipo de mar que tienen a su alrededor y las condiciones atmosféricas, que pueden hacer que a la temperatura le cueste más bajar.

Barniol explica que las noches más extremas son las de Canarias y ello se debe mayormente su ubicación: “La latitud de Canarias es muy importante, influye probablemente menos el mar porque el Atlántico no es muy cálido, pero lo que tiene más influencia allí son los fenómenos atmosféricos que se dan como los reventones secos”.

Las anomalías en las mínimas más significativas se han registrado en Ávila con casi nueve grados más de lo normal el pasado 22 de agosto. También en algunos puntos de Murcia, donde el termómetro se desvió hasta en seis grados, o en Barcelona, donde localidades como Arenys de Mar y Manresa han dormido con temperaturas extremadamente cálidas una de cada cinco noches, y los termómetros han llegado a subir hasta cinco grados más de lo esperable.

A pesar de que la tendencia es que la temperatura global suba, Barniol hace hincapié en que hoy en día también es más fácil superar los umbrales del calor que hace diez años debido a que los datos estadísticos de los que parten no están actualizados.

“Los umbrales se hacen a partir de unos datos estadísticos y se cogen cada 30 años. El que corresponde al periodo actual es el de 1991-2020, pero para determinar los valores umbrales del calor se siguen utilizando los datos de 1981-2010, donde las temperaturas eran más bajas y, por tanto, el umbral era más bajo. Si se utilizaran los datos de 1991-2020, el umbral sería aproximadamente una décima más alto y, en consecuencia, como sería más difícil de superar, habría menos olas de calor”, concluye el meteorólogo.

Sobre esta información

Para la elaboración de esta información, se han utilizado los registros de temperaturas entre el 1 de junio y el 22 de agosto de 2023. Los datos proceden del catálogo de datos abiertos de Aemet a través de la librería de R Climaemet, desarrollada por Manuel Pizarro, Diego Hernangómez y Gema Fernández-Avilés. Esta herramienta recoge información de una selección de estaciones meteorológicas que el organismo verifica con un pequeño decalaje temporal. Por eso, se han incorporado los registros provisionales de las últimas jornadas facilitados por la web de la agencia.

Para poder definir si la temperatura de un día ha sido extrema o simplemente más alta de lo normal, se ha adaptado la metodología del científico de la Universidad de las Islas Baleares especializado en el clima Daniel Argüeso y publicada en el portal hoyextremo.com. Toma como referencia la mediana y el percentil 95 de las máximas y de las mínimas de ese día, que es el valor que divide por la mitad toda una serie de datos, calculada sobre un periodo de 31 centrado en la jornada que se va a analizar y usando como base los años 1991-2020.

Cuando la temperatura registrada para 2023 queda por encima de la mediana, el día se considera más cálido que de costumbre. Del mismo modo, si la temperatura sobrepasa el percentil 95, el valor se califica como extremo, ya que está entre el 5% más alto de su serie histórica. 

En esta información han colaborado Cristina Pozo García, del equipo de DatosRTVE, y Albert Barniol, meteorólogo de RTVE.

*Esta noticia se modificó el 14 de septiembre de 2023 para ajustar las fechas y el recuento de días a la información oficial publicada por Aemet.