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La Aemet confirma que este miércoles fue el día más cálido del verano en España con temperaturas de más de 43 grados

  • Según la Agencia Estatal de Meteorología, la actual ola de calor ha sido "la más intensa y prolongada" de 2023
  • Las altas temperaturas acabarán el viernes con la llegada de un frente atlántico asociado a la borrasca Betty

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Una mujer se abanica en el parque del Rio Miño, ese miércoles en Lugo
Una mujer se abanica en el parque del Rio Miño, ese miércoles en Lugo

La ola de calor que sacude al país desde el pasado domingo se despide este viernes con un frente atlántico asociado a la borrasca Betty y un descenso "brusco" de temperaturas en el norte tras haber registrado este miércoles el día más cálido del verano en España.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la actual ola de calor ha sido "la más intensa y prolongada" de 2023 y ya se han registrado 17 récords de días cálidos en España, siendo el más tórrido este 23 de agosto.

Así, en puntos como Miranda de Ebro (Burgos), Tortosa (Tarragona) o Tablada y Carmona (Sevilla) llegaron a superar los 43,5 grados de temperatura. También el observatorio del Ebro ha registrado la temperatura más alta desde el inicio de sus observaciones en 1880, con una temperatura de 43,9.

Frente a las sofocantes temperaturas de estos días, incluso en la cornisa cantábrica, la ola de calor acabará el viernes con la llegada de un frente atlántico asociado a la borrasca Betty y un descenso notable de los valores en Galicia, alto Ebro y Cantábrico, que en su parte oriental tendrá una caída extraordinaria.

"La ola de calor se acabará mañana con un cambio brusco del tiempo", ha informado el portavoz de la Aemet José Luis Camacho, que ha pedido a la ciudadanía que preste atención los próximos días a los boletines meteorológicos y avisos porque este cambio térmico "puede estar asociado a fenómenos de alto impacto: bajadas importantes de temperaturas, lluvias intensas y tormentas acompañadas de rachas violentas en algunas zonas".

Un descenso térmico notable en el cantábrico

En el cantábrico oriental el descenso térmico previsto será muy acusado; frente a temperaturas estos días por encima de los 40 grados en amplias zonas del norte de España, las predicciones para el viernes situarán muy por debajo de esos niveles las máximas en Bilbao y San Sebastián.

Así, está previsto que las máximas se sitúen en esas localidades en valores de 25 y 24 grados, respectivamente, mientras que en Oviedo podría llegarse solo a 21 grados.

El acusado descenso térmico en esas zonas de la península continuará el fin de semana, con probables chubascos y tormentas fuertes el sábado en Cataluña y el resto del Pirineo, sin descartarse en la Comunidad Valenciana y sur de la Ibérica.

Sin embargo, todavía se prevé alcanzar los 34-36 grados en la mitad sur, nordeste y archipiélagos, incluso los 38-40 en el Guadalquivir; las mínimas no bajarán de 24-26 en el área mediterránea.

El sábado continuará el descenso término en el norte y las temperaturas bajarán de forma notable en amplias zonas de la mitad noroeste peninsular; sin embargo, seguirán siendo significativamente altas todavía en los tercios sur y sureste peninsular, así como en ambos archipiélagos.

En dicha jornada del fin de semana, las temperaturas máximas en ciudades vascas como Bilbao y San Sebastián serán todavía más bajas que el día previo, con niveles de 21 y 22 grados, respectivamente. Asimismo, en Galicia bajarán mucho los termómetros en los próximos días; el sábado las máximas serán de 22 grados en Lugo, y de 23 en La Coruña; en otras ciudades de la cornisa cantábrica como Santander no se sobrepasarán ese día los 21 grados, ni los 20 grados en Oviedo.

Sin embargo, pese a la situación en el norte del país, se podrán superar todavía ese día los 35 grados en los tercios sur y sureste peninsular, Mallorca y zonas de Canarias, incluso los 40 en el Guadalquivir. Las mínimas no bajarán el sábado de 25 grados en el área mediterránea y Guadalquivir.

Avisos por calor este jueves

El país entero se mantiene todavía este jueves en alerta y especialmente la Ribera del Ebro de Zaragoza y de Navarra, que están en nivel rojo, por temperaturas que han alcanzado puntualmente hasta los 43 grados en provincias como Burgos, Sevilla, Córdoba o en La Rioja.

Otras siete comunidades se mantienen en nivel de riesgo importante, en naranja, por registros de más de 40 grados, especialmente el nordeste, zona centro y suroeste peninsular, y otras tantas están en amarillo, con riesgo ligeramente inferior al anterior.