Sánchez se compromete a seguir con la política del "diálogo" y la "concordia" en Cataluña
- Insiste en que su proyecto "respalda sin fisuras la Constitución democrática" y confía en el acuerdo para su investidura
- Yolanda Díaz se reúne con Puigdemont (Junts) para abordar su posible apoyo a la investidura y Moncloa se desmarca
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha afirmado este lunes que si sigue gobernando continuará con la política del "diálogo" y la "concordia" en Cataluña ya que, en su opinión, es "una solución plenamente constitucional" a la "grave fractura heredada" y que ha funcionado. Y tras dar ya por fallida la investidura del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado su intención de presentarse él mismo a una "sin dilación" en cuanto Feijóo se dé "de bruces contra la realidad" si el rey le propone como candidato, ya que considera que el acuerdo con el resto de fuerzas "se va a alcanzar".
Sánchez se ha expresado así durante su intervención en un desayuno informativo en el Ateneo de Madrid, el mismo día en que la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz, se reúne con el expresidente catalán y eurodiputado Carles Puigdemont (huido de la Justicia por el 'procés') para abordar el posible apoyo de Junts a la investidura de Sánchez. Un encuentro, sin embargo, del que Moncloa se ha desmarcado y ha ubicado únicamente en el ámbito de Sumar.
En su intervención, Sánchez ha comentado que una de sus prioridades para la nueva legislatura si consigue seguir al frente del Gobierno será "seguir velando por la convivencia entre territorios y personas, defendiendo esa España plural y dejando atrás un pasado de trincheras y de barricadas dialécticas".
En concreto, sobre Cataluña ha dicho que en los últimos años su Gobierno ha tomado medidas "valientes, arriesgadas y en algunas ocasiones también incomprendidas por parte de la sociedad", pero ha subrayado que era por el "fin noble" de solucionar "la grave fractura heredada" del Ejecutivo de Mariano Rajoy en esta comunidad autónoma.
"Apostar por el diálogo y la concordia son la mejor solución a esta crisis, una solución que es plenamente constitucional y que ha funcionado, porque Cataluña está infinitamente mejor hoy que hace un lustro. Llega el momento de ser coherentes y seguir avanzando en el propósito por la convivencia", ha declarado.
Además, Sánchez ha incidido en que su proyecto a favor de la convivencia en Cataluña "respalda sin fisuras la Constitución democrática" y está basado en principios como el "respeto" y el "afecto", al asumir la pluralidad lingüística y cultural de España "con orgullo".
El acuerdo "se puede, se debe y se va a alcanzar"
Por otra parte, ha dado ya por fallida la investidura del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y ha asegurado que el acuerdo para la suya propia "se puede, se debe y se va a alcanzar sin temor, con ambición y con audacia". Sánchez ha agradecido a las fuerzas políticas que han mostrado su voluntad de negociar y "entenderse con PSOE y con Sumar" (sin mencionar a Junts): "Son muchas cosas las que separan al PSOE de esas fuerzas, pero muchas las que nos unen". Se ha referido así a cuestiones como "crecer con justicia social" o que "el diálogo es mejor que el enfrentamiento".
Ha afirmado además que intentará su propia investidura "sin dilación", en cuanto acabe "el tiempo de espera inútil" con el que ha dicho que Feijóo ha decidido "entretener" a la sociedad española y el rey le proponga como candidato, si así sucede.
Muy crítico ha sido con Feijóo y con la propuesta que le hizo de intentar gobernar dos años, ya que cree que es "una excentricidad" y una "ocurrencia" que solo puede plantear alguien que no tiene proyecto.
Tras advertir de que habrá más "excentricidades" por parte de Feijóo hasta el pleno del Congreso en el que se debatirá esa investidura, ha lamentado que la veintena de días que quedan hasta ella van a ser "de la marmota" y un tiempo "estéril".
En ese contexto ha insistido en que el líder del PP está "más preocupado por mantener su puesto en su partido que por hacer algo útil para la vida de los ciudadanos".
Acusa a Feijóo de convertir su "frustración personal" en un bloqueo
Una actitud que ha dicho que no es "responsable", como cree que tampoco lo es "convertir su frustración personal", que ha asumido como legítima y comprensible, en un bloqueo colectivo e institucional.
Lo que confía es que tras su "fracaso" el 23J y en la constitución de la Mesa del Congreso, Feijóo "se dé de bruces con la realidad" en su investidura fallida, se dé cuenta de que no tiene los votos suficientes y que su socio exclusivo es Vox.
El jefe del Ejecutivo ha hecho hincapié en que el 23 de julio España logró parar "la ola reaccionaria de la ultraderecha" en Europa, ha considerado que el país fue un "dique" ante esas tesis y se ha convertido en un referente para quienes creen en el progreso y para demostrar que se puede derrotar a los que están dispuestos a todo, hasta el uso de "la mentira y el engaño", para hacerse con el poder.
"El PP y Vox pueden proferir los exabruptos que quieran pero la democracia española es robusta, modélica, ha hablado con claridad y ha dicho 'no' a la propuesta derogatoria de los señores Feijóo y Abascal", ha zanjado.
Por último, ha resumido su proyecto político en seis prioridades: continuar modernizando la economía, la transición ecológica, los servicios públicos, la igualdad real, "volver a poner en marcha el ascensor social" y proseguir velando por la convivencia entre territorios.