'La vida rota de Marcos Uribe', el pódcast del hombre que sobrevivió a un pelotón de fusilamiento
- La dictadura de Pinochet torturó y acabó con la vida de miles de chilenos durante casi dos décadas
- El periodista de RTVE José Antonio Guardiola reconstruye en siete capítulos la historia de cómo Uribe salvó su vida
- Escucha La vida rota de Marcos Uribe
“El día más terrible de mi vida”. Así recuerda el chileno Marcos Uribe el 16 de octubre de 1973, aquella jornada en la que se convirtió en el único superviviente de un pelotón de fusilamiento que terminó en una matanza. Con los ojos vendados, las costillas rotas por los golpes y un terror desesperanzador, escuchó cómo las balas apagaban los gritos de 15 hombres, uno a uno, mientras él esperaba su turno. Pero nunca llegó. Salió del paredón por su propio pie y, sin embargo, jamás volvería a estar del todo vivo.
Uribe y sus compañeros eran un grupo de presos de La Serena a los que sorprendió la Caravana de la muerte de Pinochet 35 días después del golpe militar. Una historia que solo él pudo llegar a contar ante las cámaras de TVE en 1998 y que ahora protagoniza La vida rota de Marcos Uribe, el nuevo pódcast de José Antonio Guardiola. El periodista reconstruye sus memorias en siete capítulos en los que aborda desde el principal interrogante, por qué él sí se salvó, hasta una conversación con el teniente que estuvo presente en el paredón.
Un hombre común que recibió una pregunta excepcional
La dictadura de Pinochet torturó y acabó con la vida de miles de chilenos durante casi dos décadas. De entre todos ellos, Marcos Uribe no era un hombre excepcional. No obstante, este enfermero comprometido con la política del presidente Allende fue arrestado el 15 de septiembre de 1973 y, un mes después, frente al pelotón de fusilamiento, recibió una pregunta que cambiaría su rumbo para siempre: "¿Quieres vivir o morir?”. Así se titula el primer episodio de los tres del pódcast que este jueves han visto la luz.
Uribe tardó 25 años en compartir su sufrimiento y escogió al periodista José Antonio Guardiola para ello. "Cuando yo le hice la entrevista estaba temeroso, nunca antes había contado por lo que pasó", dice al recordar cómo el chileno eligió un sitio cerrado en el que nadie pudiera reconocerle. "Si hubiésemos sido la televisión chilena, a lo mejor no nos habría contado nada", más que conceder una entrevista, de hecho, Guardiola llegó a sentir que para él supuso una suerte de desahogo: "Estaba verbalizando todo lo que había interiorizado durante muchos años".
Ahora, con el apoyo de su hijo mayor y el de otros familiares o víctimas de la dictadura, su historia ha terminado de completarse tras su muerte. Pero, ¿por qué 'la vida rota' si Uribe logró salvarse? "Porque intentó reconstruirla, pero siempre tenía un muro delante", como muchos de los chilenos que sufrieron las consecuencias del golpe de estado que cumple ya 50 años. Para el periodista de RTVE, hay una imagen que plasma implícitamente el "poso de amargura" con el que tuvo que cargar durante el resto de sus días, mientras vivía entre Chile y Canadá.
En ella aparece Uribe junto a varios de sus nietos, con una sonrisa que, sugiere, no se corresponde con su mirada. "Creo que no fue del todo feliz, solo tuvo ráfagas de felicidad", lamenta.
"Es una recreación que pocas personas harían"
El pódcast cuenta con multitud de atractivos, como el contenido de aquella caja llena de recuerdos que Uribe dejó embalada tras su muerte o la narración del paso de su entrevista desde el periodismo al Palacio de Tribunales de Santiago de Chile, donde sirvió para hacer justicia. Destacan, además, la búsqueda del joven teniente de ojos verdes que le dirigió aquella cruel pregunta sobre la vida o la muerte y las experiencias de grandes reporteros como Patricia Verdugo y Miguel de la Quadra Salcedo o de reputadas personalidades como la abogada Carmen Hertz.
Sin embargo, hay un capítulo que resulta especialmente impactante. Y es el número cuatro, aquel en el que Marcos Uribe describe con detalles escalofriantes qué escuchó y qué sintió desde que empezaron las torturas hasta que el último disparo apagón los gritos y los llantos del paredón. "Es uno de los grandes valores que tiene esta entrevista", asegura al respecto José Antonio Guardiola.
En una situación extrema como la que vivió el chileno, "tu mente solo está centrado en sobrevivir, en ti mismo, normalmente no eres consciente de lo que ocurre alrededor", mientras que "solo intentas enfocarte en qué momento te van a matar". Pero el relato de Marcos Uribe es coral. "Él oye los gemidos de sus compañeros, las torturas, los palos, a los militares... Es una recreación que pocas personas harían porque no se suele tener la suficiente capacidad de entender lo que sucede más allá de uno", explica el periodista a RTVE.es.
El pódcast cumple, además, con una de las máximas del reporterismo: "Es una historia sobre algo muy gordo contado a través de la vida de alguien anónimo". Y esa es la clave, junto con una potente narración, para que cada capítulo lleve al oyente de la mano hasta un final lleno de dudas y de respuestas que podrá disfrutarse próximamente.
El primer pódcast de Guardiola: "Necesito sentirme inseguro"
La trayectoria de José Antonio Guardiola, actual Director del Máster de Reporterismo Internacional RTVE/UAH, guarda experiencias tan diversas como la también dirección del programa informativo En portada, El Mundo en 24 horas, Sur a norte y El ojo en la noticia. Eso sí, a sus 60 años, el que se ha publicado este jueves se trata de su primer proyecto en formato pódcast, todo un "reto" y "un experimento narrativo" con el que asegura haber disfrutado enormemente.
"El miedo escénico a la hora de enfrentarte a un reportaje tiene que existir y, si vas relajado, no sale. Yo necesito sentirme inseguro, hacer algo que no había hecho nunca antes", reconoce. Inseguridad que, entre otras cosas, ha conseguido al realizar su primer viaje en solitario y de trabajo por Chile y que hace que su pódcast esté cuidado al detalle, desde la emoción más primaria hasta los datos más certeros.
Y, por el mismo motivo, su intención –de momento- es no hacer ningún pódcast más. "Me apetece explorar", algo que, por suerte, seguirá enriqueciendo a los espectadores de RTVE.