Triana despide a María Jiménez por sevillanas
- Un fandango, la salve rociera y otros cantes de aire flamenco han jalonado la misa de funeral de la artista en Sevilla
Los penachos negros de los cuatro caballos que han tirado de la carroza con el féretro de María Jiménez han sido la única señal de luto de su funeral, celebrado en la trianera iglesia de Santa Ana, donde el barrio la ha despedido por sevillanas, "como ella quería", según afirmaban los trianeros y, sobre todo, las trianeras.
Un fandango, la salve rociera y otros cantes y toques de inequívoco aire flamenco han jalonado la misa de funeral de María Jiménez, cuyo parecido con cualquier otro funeral habrá sido coincidencia, mientras que una iglesia abarrotada de gente que desafiaba los rigores del bochorno sevillano ha recibido el féretro de la cantante con palmas por ritmo de sevillanas y gritos de "ole, ole, ole".
Junto al altar, los familiares y allegados de la cantante habían dispuesto una fotografía suya de primer plano a todo color y una especie de estandarte que reproducía el dibujo de las plumas de un pavo real, todo lo cual ha ido precedido por una liturgia que los sevillanos conocen bien, la de la bulla y la expresividad, con la que han acompañado a la carroza fúnebre desde que a las once menos cuarto salió de la capilla ardiente instalada en el Ayuntamiento de Sevilla hasta que una hora y media después ha llegado al templo de Triana.
La ministra de Hacienda y Función Pública en funciones, María Jesús Montero, ha visitado en nombre del Gobierno la capilla ardiente que se instaló en el Ayuntamiento de Sevilla con los restos mortales de la artista María Jiménez, destacando que fue una "mujer libre con mayúscula", icono de la lucha por la autonomía de Andalucía.
El alcalde de la ciudad, José Luis Sanz, ha confirmado que los servicios municipales urbanísticos están ya buscando un "espacio" en el entorno de la calle Betis, en el barrio de Triana, para dedicárselo a María Jiménez. "Es lo lógico" que el espacio esté en Triana, ha defendido el alcalde, para el que la propuesta --que se elevará al próximo Pleno-- "se la merece María". "Se merece un espacio en la ciudad que tanto quería y que tanto la quería".