Azerbaiyán suspende su operación militar en Nagorno Karabaj después de que los secesionistas acepten desarmarse
- Las organizaciones armenias entregarán sus armas y Rusia actuará de nuevo como garante
- En 24 horas, han muerto 32 personas en Nagorno Karabaj, entre ellas siete civiles
- Claves del conflictos en Nagorno Karabaj
Azerbaiyán ha suspendido la operación militar que había lanzado este martes contra el territorio separatista de Nagorno Karabaj, tras aceptar las organizaciones armadas locales rendirse y desarmarse por completo. El presidente azerbayano, Ilham Aliyev, ha asegurado que los separatistas de Karabaj ya "han empezado" a deponer las armas. Este jueves están previstas negociaciones entre ambos bandos.
"La mayoría" de las fuerzas y equipos de los separatistas armenios han sido "destruidos", ha añadido Aliev en una conferencia de prensa, en la que ha asegurado que las autoridades armenias habían demostrado "habilidad política" al no intervenir directamente en el conflicto.
Los combatientes armenios habían hecho llegar su petición de alto el fuego a través del mando de las fuerzas rusas presentes en la región. En virtud del acuerdo alcanzado, "las formaciones armadas armenias ubicadas en la región de Karabaj de la República de Azerbaiyán y las formaciones armadas armenias ilegales depondrán las armas, abandonarán las posiciones de combate y los puestos militares y se desarmarán por completo", tal y como ha informado el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán.
Las unidades armadas de la autoproclamada República de Artsaj (la entidad creada por los habitantes de etnia armenia de Karabaj, y no reconocida internacionalmente) entregarán todas las armas y equipo pesado y "serán disueltas", insistía el comunicado.
El alto el fuego ha entrado en vigor a las 13:00, hora local (dos horas menos en España) y las fuerzas rusas desplegadas en el área, que, según Putin, también mediarán en las negociaciones sobre el futuro del enclave, han sido los encargados de garantizar su cumplimiento.
Más de 10.000 personas, entre ellas mujeres, niños y ancianos, ya han sido evacuadas del enclave, tal y como ha declarado el miércoles por la noche un responsable separatista armenio.
En un discurso televisado, Aliyev ha ofrecido a la etnia armenia de Nagorno Karabaj y a la vecina Armenia perspectivas de cooperación, reconciliación y desarrollo conjunto. El mandatario ha asegurado que Azerbaiyán había recuperado la plena soberanía sobre el territorio y que ahora quería integrar a la población de Karabaj y convertir la región en un "paraíso".
Ha añadido que Azerbaiyán no tenía nada contra la población armenia de este enclave, ya que "son nuestros ciudadanos", sino contra sus "criminales" dirigentes separatistas. También ha manifestado que valoraba que Aremenia no hubiera tratado de intervenir en la operación militar de Bakú y que se hubiera mantenido "vigilante".
Los secesionistas armenios se rinden ante la falta de apoyo internacional
Los representantes de la autodenominada República de Artsaj han asegurado en un comunicado que los soldados azerbaiyanos han roto sus líneas y han tomado una serie de puntos estratégicos, como nudos de comunicaciones y puestos elevados, lo que les ha obligado a capitular ante la ausencia de apoyo internacional.
"En la situación actual, las acciones de la comunidad internacional para terminar la guerra y resolver la situación son inadecuados. - han explicado en un comunicado - Considerando esto, las autoridades de la República de Artsaj han aceptado la propuesta del mando del contingente de mantenimiento de la paz ruso para cesar el fuego".
Los secesionistas no han contado en esta ocasión ni con la ayuda de Armenia ni con la intervención de Rusia para detener los combates. El Kremlin ha rechazado las acusaciones armenias de que no ha hecho lo suficiente para evitar el enfrentamiento, y ha declarado que se trata de un asunto interno de Azerbaiyán.
Mientras tanto, el presidente ruso, Vladimir Putin, y el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, han mantenido una llamada telefónica en la que han abordado la situación en Nagorno-Karabaj, así como de las relaciones bilaterales, según ha informado la agencia de noticias TASS, citando al gobierno armenio.
Armenia cifra las muertes en 200
El cese de hostilidades se produce 24 horas después de que el Ejército azerbaiyano comenzara a bombardear Nagorno Karabaj con el fin de restaurar el "orden constitucional" en el territorio separatista, poblado por unos 120.000 armenios étnicos.
Según un responsable armenio de derechos humanos de la región separatista, en total han muerto al menos 200 personas como consecuencia de la ofensiva militar azerbaiyana y más de 400 han resultado heridas.
Las autoridades azerbaiyanas han reconocido dos civiles muertos durante la operación antiterrorista, mientras el presidente azerbaiyano ha hablado de varios soldados muertos, sin precisar.
Los secesionistas tenían pocas posibilidades de resistir la nueva embestida de Azerbaiyán, que inició la ofensiva tres años después de la última guerra por el control del enclave y tras someterlo durante más de nueve meses a un bloqueo. En diciembre de 2022 cortó el corredor de Lachín, la única vía de comunicación entre Armenia y Nagorno Karabaj.
Negociaciones entre ambos bandos
Azerbaiyán ha indicado que este jueves, "a propuesta de la Presidencia azerbaiyana", se celebrará una reunión con representantes de los residentes armenios en Nagorno Karabaj en la localidad de Yevlaj. En dicho encuentro se abordará la "reintegración de la población bajo la Constitución y las leyes de la República" azerbaiyana.
Las conversaciones de paz entre Azerbaiyán y los separatistas armenios, previstas para el jueves, tendrán lugar con la "mediación" de las fuerzas de paz rusas desplegadas en la región, según ha trasladado Vladímir Putin al primer ministro armenio en la conversación telefónica que recogida en un comunicado del Kremlin.
Hikmet Hajiyev, asesor para política exterior de la presidencia de Azerbaiyán, ha asegurado que el desarme de las fuerzas karabajíes permitirá reintegrar pacíficamente a la población local, y favorece las perspectivas de un acuerdo de paz con Armenia.
Si los armenios de Nagorno Kabaraj aceptan ponerse bajo la autoridad del gobierno central azerbaiyano, puede suponer el fin de un conflicto que se inició en 1988, y que ha provocado dos guerras abiertas entre Armenia y Azerbaiyán (1991-1994 y 2020).
Armenia acusa a Azerbaiyán de abrir fuego contra sus posiciones
Armenia, que se negó a ayudar a los separatistas alegando que no quería verse arrastrada a una nueva guerra, ha acusado a las fuerzas azerbaiyanas de abrir fuego contra las posiciones de sus tropas en una zona fronteriza a última hora del miércoles. Azerbaiyán lo ha negado de manera inmediata.
El Ministerio de Defensa ha asegurado que sus tropas habían recibido disparos de armas ligeras cerca de la ciudad de Sotk, en la frontera entre ambos países, a unos 140 km de Karabaj.
Este tipo de intercambios se producen con frecuencia en las zonas fronterizas entre los dos antiguos Estados soviéticos del Cáucaso Sur, que intentan alcanzar un acuerdo de paz a largo plazo.