El artista internacional Saype realiza su primera obra en España
- "En nuestras manos”, movimiento para concienciar sobre la importancia del agua
- Primer Land art en una laguna en riesgo de desaparecer
Concienciar sobre el problema de la crisis hídrica. Eso es lo que el artista francés Guilleme Legros, más conocido como Saype, busca con su primera obra en España y su primer land art en una laguna, ubicada en Oropesa (Toledo). “Todos hablamos de CO2 pero el uso del agua es un problema. Y pienso que es muy importante que los Estados creen normas e intenten encontrar soluciones a estos problemas” asegura.
“Todos hablamos de CO2 pero el uso del agua es un problema“
Esta obra la realiza de la mano de la alianza multisectorial StepbyWater -. Según Raquel Paiz, Responsable de Comunicación y Estrategia de StepbyWater, “se trata de promover acciones que nos animen a actuar sí o sí por el agua. No hay ni un segundo que perder”.
Pintura 100% biodegradable
Además de destacar por sus grandes dimensiones, sus obras son realizadas con pinturas biodegradables. Él mismo las prepara a base de carbón vegetal, tiza, agua y proteínas lácteas.
El trabajo se irá deteriorando poco a poco hasta desaparecer. Las condiciones climatológicas y la interacción de los animales influirán en su duración. Y ésta es una de las peculiaridades del trabajo de Saype, quien señala que la huella quiere dejarla “en las personas y no en la naturaleza”.
Primer trabajo en España
Venecia, Andorra, París, Dubái, Japón o Río de Janeiro son sólo algunos de los rincones por los que Guillaume Legros ha difundido sus mensajes humanistas.
“ES un problema global y todos tenemos que contribubir a buscar soluciones“
Ésta es su primera parada en España y también su primer trabajo para concienciar sobre la crisis hídrica. Pero no debemos olvidar, insiste Saype “que es un problema a nivel global y todos debemos contribuir para encontrar soluciones”.
El objetivo es que esta obra sirva de inspiración y contribuya para seguir debatiendo en torno a la problemática del agua. Y actuar “para proteger este recurso tan vital y limitado”, dice Guillaume Legros