Entra en vigor el horario de invierno: a las 03.00 se han retrasado los relojes hasta las 02:00
- El próximo cambio horario en España será el correspondiente al del verano y se producirá el domingo 31 de marzo de 2024
Octubre no solo supone la caída de las hojas; con él también llega el cambio de hora en los relojes. En la madrugada de este domingo 29 de octubre, los españoles han tenido que retrasar una hora sus relojes como cada año. Las 03.00 horas de la España peninsular han pasado a ser las 02.00 y se ha dado así la bienvenida al horario de invierno.
En el caso de Canarias, el ajuste de los relojes se ha realizado a las 2.00 de la madrugada, cuando ha pasado a ser la 1.00. Un cambio que ha dado una hora más de sueño durante esta madrugada y que ajusta los relojes biológicos a la hora de la luz natural. Según la Sociedad Española de Sueño (SES) y estudios de la Universidad de Murcia, este horario permite una mayor sincronía entre la salida del sol y el inicio de la jornada laboral y escolar.
¿Tenemos que retrasar o adelantar el reloj?
Se trata de una de las preguntas más frecuentes sobre el cambio de hora y que se repite año tras año. En el caso del horario de invierno, se retrasa una hora el reloj. Por lo tanto, cuando lleguen las 03.00 de la mañana volverán a ser las 02.00, algo que hay que tener en cuenta de cara a los planes que podamos tener durante ese periodo de tiempo.
Esta duda suele surgir por comparar los dos cambios de hora con los que cuenta España todos los años. Se tiende a confundir el de invierno (que retrasa el reloj), con el de verano (que lo adelanta una hora todos los meses de marzo).
¿Qué aparatos cambian solos de hora y cuáles debo cambiar a mano?
Otra cuestión a tener en cuenta con respecto a este próximo cambio en los relojes si queremos evitar sorpresas y no desubicarnos es saber si tenemos que modificar la hora de manera manual o se hace de manera automática.
La clave es saber si nuestro dispositivo cuenta con un sistema conectado a Internet o no. En esta última opción se engloban algunos electrodomésticos, también relojes de mano o de pared, y despertadores, tanto analógicos como aquellos digitales que no se conectan a la red.
Actualmente, gracias a un protocolo que sincroniza los relojes de los sistemas informáticos, el Network Time Protocol, la mayoría de los dispositivos con conexión que tenemos en casa -teléfonos móviles, relojes inteligentes, ordenadores o tablets-, cambian la hora de forma automática.
No obstante, la recomendación siempre es comprobar que se ha hecho el cambio y, si esto no ha ocurrido, configurar la automatización.
Controversia con el cambio horario: efectos para la salud
El cambio de horario también lleva aparejadas modificaciones en el estado de salud. Según afirmó el doctor Eduard Estivill a RTVE.es hay “ritmos circadianos que nos afectan, por ejemplo, la luz y la oscuridad".
Por su parte, la Sociedad Española del Sueño, afirma que un descanso deficiente y pobre puede favorecer la aparición de enfermedades como el cáncer, el alzhéimer y la hipertensión arterial, además de “la obesidad, diabetes, infarto de corazón, el ictus, la depresión y la ansiedad".
Por lo tanto, la alteración de horarios influye en que se duerma menos, lo que puede derivar en irritabilidad, insomnio, falta de concentración, bajo rendimiento laboral o escolar o, incluso, tener hambre antes.
¿Cuánto tardaremos en acostumbrarnos? Consejos para adaptarse
Adaptarnos al cambio de horario puede llevar hasta una semana o diez días, dependiendo de la persona, apuntan los expertos. Los niños y las personas con patologías pueden ser los que más tarden por lo que, en estos casos, se recomienda realizar cenas ligeras y acostarse temprano.
A nivel general, las recetas para favorecer un sueño de calidad pasan por evitar el consumo de alcohol, cafeína o de otras bebidas energéticas o azucaradas antes de irse a domir o la importancia de relacionar la cama con el sueño, evitando hacer otras actividades como trabajar o comer en ella. También es esencial alejarnos de las pantallas iluminadas antes de dormir, ya que no solo reduce el sueño sino su calidad.
Sobre el uso de pastillas, los especialistas consideran que los afectados no se deben automedicar, ya que se trata de una situación temporal que acaba por regularse. En el caso de que los problemas persistan, recomiendan acudir al médico.
¿Se sigue ahorrando energía con esta medida? ¿Qué impacto económico tiene?
Tras el impacto en la salud, la del ahorro energético es otra de las cuestiones que siempre se plantean de cara a si mantener o no el cambio horario. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el ahorro potencial en iluminación podría alcanzar en torno a 300 millones de euros, lo que supone el 5 por ciento del total.
Es decir, sí se ahorra, pero no está tan claro el 'cuánto'. El IDAE subraya que es algo “potencial” y, además, que no existen estudios actualizados sobre esta cuestión. Hay que tener en cuenta también que el modo de vida de la ciudadanía ha cambiado mucho desde el primer cambio de hora en la década de los 40.
Por su parte, un informe de 2019 de la Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo, afirmaba que estos ahorros son marginales, ya que puede haberlos en iluminación pero que no es tan obvio en calefacción, cuyo consumo podría incluso aumentar en invierno.
En cuanto a la economía, las cosas tampoco están claras. Según la Comisión Europea, que realizó una consulta pública en 2018, suprimir esta práctica sería algo beneficioso para las empresas. Facilitaría la planificación en los sectores energéticos y de transporte -como en el caso de los trenes nocturnos)- y simplificaría las aplicaciones que dependen de la hora.
¿Sería más sano mantener el horario de invierno todo el año?
Según los expertos, sería mucho más beneficioso para la salud mantener el horario de invierno, ya que quedaría más ajustado a los ritmos de vida que tenemos día a día.
La Sociedad Española del Sueño (SES) afirma que, el horario de invierno “facilita tener más horas de sueño y un despertar más natural que coincide con el amanecer”. En el caso de que hubiese un horario de verano permanente, en los meses de invierno “habría falta de luz por la mañana y en los de verano un exceso de luz por la noche”.
Esto, según la SES, desajustaría el reloj interno y podría provocar “bajo rendimiento y vulnerabilidad a determinadas enfermedades”.
También se alega que, de esta manera, evitaríamos tener horas de oscuridad cuando los niños van al colegio o cuando empezamos la jornada laboral y favorecería el rendimiento escolar.
¿Cuándo se vuelve a cambiar la hora en España?
El Boletín Oficial del Estado publicó el 15 de marzo de 2022 las fechas de cambios horarios para los próximo cinco años –desde el 2022 al 2026-, tal y como estableció el Real Decreto 236/2002.
Por lo tanto, el próximo cambio horario en España será el correspondiente al del verano y se producirá el domingo 31 de marzo de 2024. En ese momento se deberán adelantar los relojes una hora, pasando de las 2.00 de la mañana a las 3.00 horas.
¿Cuándo será el último cambio de hora en España?
Aún no existe unanimidad sobre si eliminar o no las dos modificaciones horarias que nuestro país tiene al año. El Parlamento Europeo acordó poner fin a esta práctica en la UE a partir de 2021, permitiendo a cada país elegir si mantener el horario de verano o el de invierno, aunque esta medida no llegó a término por falta de acuerdo.
En España se decidió posponer esta decisión también por falta de consenso, tras el análisis de una comisión de expertos. Con lo cual, al menos hasta el año 2026, los españoles tendrán que adelantar o atrasar su reloj según la estación.