El incendio de Tenerife baja de peligrosidad y los 3.200 evacuados volverán a sus viviendas
- La decisión de bajar a nivel 1 implica que la coordinación de la extinción corresponde al Cabildo de Tenerife
- Desde que se reactivaron las llamas se han calcinado 60 hectáreas en Santa Úrsula y La Orotava
El incendio de Tenerife, que se declaró el pasado 15 de agosto y aún no se consideraba extinguido, volverá este viernes a nivel 1 de emergencia tras una noche tranquila y una situación más optimista tras la reactivación de las llamas de este jueves, lo que permitirá el realojo de las 3.200 personas evacuadas a partir de las 13:00 horas de este viernes.
Así lo ha anunciado en rueda de prensa el consejero autonómico de Política Territorial, Manuel Miranda, después de una noche mucho más tranquila de lo esperado, con pequeños rebrotes que los efectivos han podido controlar "perfectamente".
El dispositivo contra el incendio se encontraba bajo la dirección del Gobierno de Canarias tras haber subido este jueves a nivel 2 de gravedad del plan INFOCA. La decisión de bajar a 1 el nivel de emergencia implica que la coordinación de las labores de extinción corresponden al Cabildo de Tenerife y se replegará la Unidad Militar de Emergencias (UME).
La presidenta de la corporación insular, Rosa Dávila, ha precisado que se mantiene desplegado el resto de efectivos. Por ello continuarán en las labores los destacamentos de las brigadas forestales y bomberos, la Eirif del Gobierno de Canarias y la Brif del Ejecutivo central.
Calcinadas 60 hectáreas más
Desde que se reactivaron las llamas este jueves se han calcinado 60 hectáreas en la zona de Santa Úrsula y La Orotava, que se suman a las 14.000 que ya se habían visto afectadas en agosto.
Nueve medios aéreos se habían incorporado al operativo este viernes a primera hora, además de un operativo terrestre de 120 efectivos, después de que un total de 94 agentes, entre brigadas forestales y la UME, trabajaran en la contención del fuego durante la noche.
Unos 3.000 vecinos de La Corujera (Santa Úrsula) y otros 200 de Pino Alto (La Orotava), han permanecido desalojados, la mayor parte se fueron a segundas residencias, viviendas de amigos y familiares, hoteles y centros sociosanitarios, y algo más de un centenar en el pabellón municipal de deportes de Santa Úrsula.
El fuego, que afecta a la zona alta de los municipios de Santa Úrsula y La Orotava, es una reactivación del incendio forestal que se declaró el 15 de agosto en Tenerife y aunque fue controlado el 11 de agosto, no ha podido ser extinguido.
Las temperaturas altas que se han registrado en Canarias en los últimos días así como el viento han propiciado que se produzcan reactivaciones del fuego, especialmente en la cara norte de la isla.