Narges Mohammadi, periodista y activista por los derechos de las mujeres en Irán, premio Nobel de la Paz
- La activista está presa en su país y condenada a 12 años
- El Comité del Nobel hace suyo el lema de la revuelta de las mujeres iraníes: "Mujeres, vida, libertad"
Narges Mohammadi, periodista y activista por los derechos de las mujeres en Irán, es la ganadora del premio Nobel de la Paz 2023. Así lo ha anunciado el Comité Nobel en Oslo.
Mohammadi se encuentra actualmente en la prisión de Evin, con varias condenas que suman 12 años, y tiene prohibido recibir llamadas y visitas. La activista ha sido detenida varias veces, también por oponerse a la pena de muerte y la tortura.
Mohammadi es vicepresidenta del Centro de Defensores de los Derechos Humanos, una organización dirigida por Shirin Ebadi, premio Nobel de la Paz en 2003.
El 16 de sepiembre se cumplió el primer aniversario de la muerte de la joven kurdo-iraní Mahsa Amini tras ser detenida en Teherán por no llevar bien puesto el velo. Su muerte provocó una ola de protestas en todo el país.
Las autoridades iraníes han respondido con represión policial, condenas de muerte y un endurecimiento de la ley sobre el uso del velo. Esta misma semana, varias organizaciones de derechos humanos han denunciado que una adolescente ha quedado en coma tras un enfrentamiento en el metro de Teherán por este motivo.
Muhammadi, una "luchadora por la libertad"
El premio se ha otorgado a Mohammadi por "su lucha contra la opresión de la mujer en Irán y para promover los derechos humanos y la libertad para todos", ha declarado la presidenta del Comité, Berit Reiss-Andersen, al anunciar el fallo.
El galardón, ha asegurado Reiss-Andersen, honra también a los "cientos de miles de personas que durante el pasado año se han manifestado contra las políticas de discriminación y opresión contra las mujeres del régimen teocrático".
El Comité ha hecho suyo el lema de la revuelta del movimiento de las protestas de las mujeres iraníes: "mujeres, vida, libertad".El marido de Mohammadi, Taghi Ramahi, que vive en París, ha asegurado que el premio ayudará a la lucha por los derechos humanos pero, más, más importante, es de hecho un premio" para el movimiento.
La ONU considera que el premio "resalta el coraje y determinación de las mujeres de Irán, y cómo inspiran al mundo".
"Hemos visto esta valentía y decisión ante la represión, la intimidación, la violencia y las detenciones", ha subrayado la portavoz de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos Liz Throssell.
Daniel Bashandeh, analista político, ha explicado en el Canal 24 Horas de TVE que el premio Nobel de la Paz a la activista por las mujeres Narges Mohammadi, "simboliza que el régimen es vulnerable, y que solo puede usar la represión para mantenerse en el poder".
Pocas mujeres en la historia del premio
En más de 120 años de historia, el Nobel de la Paz ha premiado a 111 personas (de ellas, solo 18 mujeres, ahora 19) y 27 organizaciones.
El de la Paz es el quinto de los galardones anunciados hasta ahora, después de los de Medicina, Física, Química y Literatura, y sucede al otorgado en 2022 al bielorruso Ales Bialiatski y las organizaciones rusa Memorial y la ucraniana Center for Civil Liberties.
Según el testamento de Alfred Nobel pueden designar candidatos al galardón de la Paz catedráticos de universidad en Derecho, Historia y Ciencias Políticas, parlamentarios, antiguos laureados y miembros de tribunales internacionales, entre otros.
El de la Paz es el único de los seis galardones que se otorga y se entrega fuera de Suecia, en Oslo, por expreso deseo de Nobel, ya que en su época Noruega formaba parte del vecino país.
Irán condena la concesión del premio
El Gobierno de Irán ha condenado horas después de conocerse el galardón a Mohammadi y lo ha calificado “como un acto político” y una medida de “presión” de Occidente.
“La decisión del Comité del Nobel de la Paz es un acto político en línea con la política intervencionista y antiiraní de algunos Gobiernos europeos”, ha dicho el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Naser Kananí, en un comunicado.
El diplomático ha afirmado que se trata de otra “medida de presión de Occidente” contra Irán y que se suma al “terrorismo económico e inhumano” que ha sufrido el país "durante más de cuatro décadas".
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