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Análisis

Gaza, ante una represalia israelí de duración "incierta" y marcada por el rol clave de los rehenes

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Gaza, ante una represalia israelí de duración "incierta" y marcada por el rol clave de los rehenes
Gaza, ante una represalia israelí de duración "incierta" y marcada por el rol clave de los rehenes

Desde el sábado los combates no cesan en la Franja de Gaza. A un lado y otro de la frontera, las imágenes bélicas se repiten sin cesar. Israel ha declarado la guerra a Gaza tras la ofensiva sorpresa lanzada por Hamás a primera hora del sábado y en la Franja se espera un movimiento sin precedentes.

En un nuevo capítulo del conflicto palestino-israelí, que lleva estancado desde hace décadas ante la mirada pasiva de la comunidad internacional, Gaza afronta una anunciada represalia israelí "de magnitud considerable" y que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ya asegura que será "una guerra" larga y "difícil".

Todo ello en un escenario nunca antes visto. En el de Gaza habiendo sido superior por momentos a Israel con toma de rehenes y logrando controlar importantes posiciones que hasta antes de ayer estaban ocupadas por el ejército israelí.

Las expertas y analistas consultadas por RTVE.es coinciden en que es complicado aventurarse para pronosticar cuánto podrá durar esta nueva escalada de tensión, pero coinciden en que este nuevo capítulo de una "guerra que ya existía" será de excepcional "dureza".

Una respuesta militar dura y de "magnitud considerable"

"Es importante tener en cuenta que la guerra ya existía. Al final, esto ha sido un paso más en una espiral de escalada de violencia, la que consiste en la ocupación israelí de territorios palestinos", explica la analista experta en Oriente Próximo, Itxaso Domínguez.

"Lo que sí que parece es que la respuesta militar de Israel, como ya lo ha prometido su primer ministro y muchos otros dirigentes, va a ser de una magnitud considerable y va a ser, sobre todo, militar", añade Domínguez.

Desde Israel, Netanyahu y su gobierno se muestran tajantes y avisan de la contundencia: "Llevará tiempo, será difícil. Nos esperan días desafiantes [...] Pero he ordenado una amplia movilización de reservas y que devolvamos el fuego de una magnitud que el enemigo no ha conocido. El enemigo pagará un precio sin precedentes".

Un aviso que ya es realidad. A primera hora de la tarde del sábado, el Ejército israelí ya comenzó a bombardear Gaza y se espera que el movimiento continúe próximamente.

"Es difícil saber si será una respuesta militar larga o corta. Israel ha estado apostando en los años anteriores por respuestas cortas en las que el número de víctimas e infraestructuras afectadas sean muy altas", añade Domínguez.

El uso de los rehenes, clave en los tiempos

Sin embargo, el secuestro de ciudadanos y militares israelíes por parte de Hamás puede hacer variar este patrón anterior. Según cifras del gobierno israelí, más de un centenar de civiles y militares están bajo arresto en paradero desconocido.

"El problema, en este caso, es que hay civiles y militares israelíes secuestrados e Israel ha demostrado en el pasado un compromiso total con los casos de secuestros y de no cejar en su empeño hasta que los liberen", contextualiza Domínguez.

"Israel no puede permitir que estos rehenes se mantengan en la red de Hamás y en el territorio de la Franja de Gaza. Eso va a ser determinante a la hora de desarrollarse un conflicto caracterizado por la asimetría de superioridad de los israelíes sobre los palestinos", añade Domínguez.

Preguntada por los secuestros, la portavoz de la embajada de Israel en España, Tal Izhacob, ha asegurado en una entrevista en TVE que lo realizado por Hamás es un "crimen de guerra". "Están cometiendo un doble crimen de guerra. Por un lado, está atacando y dañando desde su población civil y, por otro lado, a la población civil israelí, dañando, atacando civiles que no han hecho nada", expresa Izhacob.

La incógnita: el "equilibrio" de la duración de la operación israelí

Los rehenes pueden marcar el devenir del conflicto y sobre todo, marcar los tiempos de los enfrentamientos. Los prisioneros que ahora tiene Hamás le pueden servir para dos cosas: o bien negociar un intercambio de prisioneros, o como escudos humanos ante los anunciados ataques israelíes.

"En cualquier caso, Israel, por sus condiciones y necesidades, va a golpear muy duramente y va a llevar a cabo una acción lo más corta y dura posible. Por contra, la perspectiva de Hamás es que no han agotado sus armas y que tienen comandos activos que todavía pueden poner complicadas las cosas a las unidades que intenten entrar en Gaza", explica en una entrevista en el Canal 24 Horas de TVE el experto en Relaciones Internaciones y codirector del Instituto de Estudios Sobre Conflictos y Acción Humanitaria, Jesús Núñez.

"A Hamás le interesa un conflicto más prolongado que vaya desgastando a Israel. Es en ese equilibrio delicado entre la prisa de Israel y la paciencia estratégica que ha mostrado hasta ahora Gaza donde va a estar el calendario", añade Núñez.

La guerra de Israel y Gaza, entre el "equilibrio" por la prisa de Netanyahu y la "paciencia estratégica" de Hamás

La comunidad internacional, ¿clave para negociar?

El domingo, desde el ejecutivo de Netanyahu se habría pedido ayuda a Egipto para mediar en los secuestros, que pueden ser usados como moneda de cambio, pero por el momento no hay respuesta, según 'The New York Times'.

"Nada de lo que hemos visto antes se puede comparar con lo que está pasando y va a ser muy difícil saber hacia donde vamos, pero sí es muy evidente que a lo que vamos es al desastre. Ellos ahora tienen un gobierno de fanáticos y quieren sangre, van a destruir Gaza de maneras que son difíciles de imaginar mientras no haya reacción internacional. Y por el momento, no hay reacción internacional", comenta la analista política y exportavoz de la Autoridad de Palestina, Nour Odeh.

"No podemos decir con certeza lo que van a hacer hasta que no tengan el control que está bajo control de las guerrillas. Pero esto va a cambiar muchas cosas en la historia. Ya no se puede decir que no hay necesidad de hablar con Hamás. La lucha palestina ya no es insignificante, pero ahora a ver qué hace el mundo, aunque hasta ahora...", añade Odeh.

La única certeza: la población civil vuelve a ser la damnificada

En la misma línea se expresa la analista y experta en el conflicto palestino-israelí, Teresa Aranguren, que comenta que la duración de la ofensiva israelí será de "días o semanas" y se extenderá "hasta donde la comunidad internacional se lo permita".

Pero algo parece claro, aunque no se sepa el tiempo que se prolongarán los choques, la población civil, como en todas las guerras, serán los damnificados.

La Franja de Gaza es un territorio reducido y con una de las mayores densidades de población a nivel mundial. En una superficie similar a la isla de La Gomera (22.000 habitantes) viven más de dos millones de personas, de las cuales en torno a la mitad son menores de edad.

"Hay una falacia que se repite mucho y es que en Gaza los objetivos son militares. Basta conocer Gaza para saber primero que eso es imposible, porque es una de las zonas más densamente pobladas del mundo", explica Aranguren.

"Plantear esos ataques sobre Gaza como objetivos militares realmente no refleja la realidad. Hay milicianos de Hamás, sí, pero mayoritariamente son civiles, y es imposible discernir entre bombardeos civiles o militares. Para la población de Gaza esto va a significar más destrucción. Cada vez habrá más desesperación y más posibilidades de estallidos violentos y, si no se le pone remedio, habrá más desesperanza, porque la comunidad internacional lo consiente. Han convertido Gaza en un territorio inhabitable", concluye Aranguren.