El PP niega haber convocado la concentración en Ferraz y reprocha a Interior las cargas "injustas" a los manifestantes

• No condena la manifestación y ve "normal" que lo que está ocurriendo "tenga sus expresiones y reflejos" en la ciudadanía
• Interior defiende la actuación "proporcional" de los agentes y niega que la Policía recibiera órdenes políticas

Borja Sémper, en una imagen de archivo en una rueda de prensa en la sede del PP.

El PP niega haber convocado la concentración de este lunes por la noche en la sede del PSOE en Ferraz contra la amnistía y ve "normal" que haya una reacción ciudadana a lo que está ocurriendo. Los 'populares', que no han condenado la manifestación, reprochan al Gobierno las cargas policiales "injustas" que se produjeron y su "hipocresía".

“El PP no va a condenar una concentración a la puerta de la sede de ningún partido”, ha dicho en un corrillo con periodistas en el Congreso la secretaria general y portavoz parlamentaria de los 'populares', Cuca Gamarra, si bien ha añadido que sí condena las "actitudes vandálicas". "Pero yo no voy a señalar a nadie que acude a una sede", ha incidido.

El Gobierno ha exigido al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, una condena "rotunda" de lo que considera un "ataque" al PSOE, y ha avisado: "Atentar contra los partidos es atentar contra la democracia". En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, ha avisado a Feijóo de que su actitud al respecto debería ser "muy distinta" y le ha pedido que "acepte" el resultado de las urnas.

La respuesta se la ha dado Gamarra en una rueda de prensa en la que ha reprochado al Ejecutivo su "hipocresía y cinismo" por "alzar la voz" ante cuestiones "muy puntuales" y que a ella "no le gustan" (en referencia a los disturbios en Ferraz), cuando está negociando una amnistía que abarca "muchas causas" que “tienen que ver con actos de violencia y vandálicos” producidos hace unos años. Se ha referido así a los CDR o a Tsunami Democràtic.

Para el vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta del PP, Borja Sémper, "es normal" que lo que está ocurriendo con la amnistía, que "apela a la esencia básica del Estado de Derecho", tenga "sus expresiones y reflejos" en la ciudadanía porque el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, está "despertando una indignación transversal" entre "conservadores, liberales, socialdemócratas y progresistas".

Critica además que quienes "promueven esto" (en referencia al PSOE) "se quejan amargamente de manera desproporcionada que unos ciudadanos españoles se manifiesten frente a sus sedes”. "Lo que defendemos es que la libertad de manifestación sigue siendo vigente", ha proseguido, y ha subrayado, eso sí, que cualquier marcha debe ser "serena, contundente y ordenada": "Es lo más eficaz para responder de forma democrática al atropello del gobierno".

"El PSOE mandó a la gente a protestar a Génova en 2004"

El Partido Popular ha emitido además un comunicado en que señala que "es posible" que algunas de las personas que se concentraron frente a Ferraz "lo hiciera también ante la sede del PP en marzo de 2004" tras los atentados terroristas de Atocha y que, entonces, "fue el PSOE quien mandó a la gente a protestar a Génova diciendo 'España no merece un gobierno que le mienta'".

"Pese a las mentiras de este Gobierno, el PP no ha convocado concentración alguna en Ferraz", prosiguen los 'populares'. La marcha, convocada contra la negociación del PSOE con los partidos independentistas para una ley de amnistía a cambio de su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez, sí fue alentada por Vox y su líder, Santiago Abascal.

El Gobierno "obligó" a la Policía a tratar a los manifestantes "como a CDR"

El PP indica que la delegación del Gobierno de la época en la que gobernaba Mariano Rajoy "no ordenó cargar a la policía ni usar gases lacrimógenos" y critica que fue el Ejecutivo de Pedro Sánchez quien este 6 de noviembre "obligó a nuestros agentes a tratar a las personas que estaban en la calle como si fueran CDR" (en referencia al Comité de Defensa de la República, una organización independentista investigada por la justicia por posibles delitos de terrorismo).

El Partido Popular muestra en todo caso su "apoyo" a los agentes y dicen que es "compatible" con su crítica a los mandos del "Ministerio del Interior socialista".

Además, recalca que el PP ha celebrado "actos en defensa de la igualdad de los españoles" en Santiago de Compostela, Madrid, Toledo, Málaga y Valencia, y ha participado en una manifestación convocada por la sociedad civil en Barcelona. "Todas esas movilizaciones fueron pacíficas y se desarrollaron de un modo ejemplar", prosigue.

Recuerda igualmente que el próximo domingo los 'populares' han convocado marchas en las 52 capitales de provincia de España y que el 18 se manifestarán también en la madrileña Plaza de Cibeles en la marcha convocada por la sociedad civil. "La forma de protestar contra las indignas negociaciones del PSOE es hacerlo de manera que Pedro Sánchez no logre que se desvíe la atención de su indecencia", defiende.

Subraya que el PP "es un partido institucional que combate a los que rodeaban el Congreso (Podemos), iban a nuestras sedes a insultarnos (PSOE), a atacarlas (Bildu) o a los que usaban la calle para generar disturbios (los independentistas)". Y critican que en ninguna de esas prácticas encontraron "inspiración alguna".

Y zanja: "Vamos a liderar la contestación social e institucional a la rendición de nuestro país con la misma estrategia que ha sacado a la calle a decenas de miles de personas en convocatorias organizadas por el Partido Popular".

Marlaska niega que diera "órdenes políticas" y defiende la actuación policial

El ministro del Interior,  Fernando Grande-Marlaska, ha defendido este martes la actuación de la Policía Nacional bajo los criterios de "profesionalidad, necesidad y, por tanto, de legalidad" y ha garantizado que, por lo menos desde que él es ministro, las fuerzas de seguridad "no obedecen ningún criterio político", sino operativo.

En declaraciones en los pasillos del Senado, y sin citar al PP o a Vox, ha rechazado que determinados partidos justifiquen acciones violentas "absolutamente deleznables en democracia" y ha instado a "la derecha y la ultraderecha" a evitar discursos "ambivalentes": "Me molesta muchísimo que alguien ponga en tela de juicio la profesionalidad de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, en este caso de la Policía Nacional"

Ha insistido en que solo responden a criterios operativos, de la cadena de mando, pero ha garantizado que, como ministro de Interior, asume todas las órdenes dadas en el ámbito operativo como si las hubiera dado él mismo. Con todo, ha zanjado que el "acoso" a la sede del PSOE y la "coacción", "no caben en una democracia".

Por otra parte, fuentes de la Policía, en base al atestado policial, defienden las cargas "proporcionadas" y el uso de gas lacrimógeno ante manifestantes "ultras" que les lanzaron objetos y aseguran que intervino en total una pala, tres palos de madera, una barra de hierro y tres barras extensibles.